El Departamento de Comercio de EEUU impone un arancel a las importaciones de alambrón español, medida que afecta a la multinacional con plantas en Asturias
26 oct 2017 . Actualizado a las 12:57 h.Dunald Trump continúa poniendo en práctica las medidas proteccionistas que anunció en su campaña electoral y su última decisión tiene consecuencias directas en Asturias. El Departamento de Comercio tiene pensado levantar un muro a las importaciones y ha decidido imponer un impuesto especial a las compras de acero español. Su decisión afectará a varias compañías con plantas en España que fabrican alambrón, entre ellas ArcelorMittal.
La nota difundida por el Departamento de Comercio señala que la tasa que cobrará es preliminar y que afectará a las importaciones de otros países además de España. Italia, Corea del Sur, Sudáfrica, Turquía, Ucrania y Reino Unido también tendrán que pagar una tasa para vender en Estados Unidos. El motivo es que el Gobierno considera que, una vez analizado el mercado, las prácticas de estas empresas están provocando una competencia desleal y quieren impulsar esta medida para evitar que se sigan produciendo distorsiones en el mercado.
El producto afectado por el nuevo arancel es el alambrón y, además de ArcelorMittal, en España se verán afectadas las empresas Compañía Española de Laminación, Global Steel Wire y CELSA Atlantic. Según recoge el documento del Gobierno, estas compañías «venden productos en Estados Unidos por bajo de su valor justo». Por ello, impone una tasa del 20,25% a las otras tres compañías, mientras que en el caso de ArcelorMittal eleva ese porcentaje hasta el 32,64%. Además, el Departamento sostiene que la multinacional con factorías en Asturias se negó a cooperar en la investigación, motivo por el que le aplicará la medida con efecto retroactivo de 90 días.
Según explica el Gobierno americano, las importaciones de alambrón procedente de España supusieron casi 41 millones de dólares. El Ejecutivo de Trump debe fijar una posición definitiva el próximo mes de enero, fecha en la que se tomará la decisión respecto a la implantación de una tasa definitiva -hasta ahora es preliminar-. Después, la Comisión de Comercio Internacional dispondrá de un plazo de 45 días para reafirmar la decisión.