El árbitro asturiano González Fuertes, polémico protagonista en la final de Copa del Rey
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Las declaraciones del colegiado estuvieron cerca de provocar que el Real Madrid no se presentase al partido decisivo del torneo
26 abr 2025 . Actualizado a las 18:44 h.El fútbol español vive uno de los momentos más calientes de su historia. La guerra fría, por llamarlo de alguna forma, entre el Real Madrid y el Comité Técnico de Árbitros ha tocado techo en el día previo a toda una final de Copa del Rey entre el club blanco y el Barcelona y la causa han sido las declaraciones del colegiado asturiano Pablo González Fuertes, que lleva en la élite del balompié de nuestro país desde el año 2017.
En el día anterior a la gran final, De Burgos Bengoetxea, encargado de dirigir el encuentro en el césped de La Cartuja, y González Fuertes, responsable de VAR para este partido, comparecieron en rueda de prensa. Lógicamente, fueron cuestionados por los vídeos de Real Madrid TV en los que se critican a los árbitros en la previa de los encuentros, y el del Principado afirmó que el colectivo tendría que «tomar medidas muchísimo más serias» respecto a este tipo de 'presiones'. «No vamos a seguir aguantando lo que estamos aguantando», llegó a expresar el trencilla.
Estas declaraciones fueron las que acabaron con la paciencia del Real Madrid. Tras esta rueda de prensa, comenzaron a salir informaciones de que los madrileños se habían indignado debido a la actitud del colegiado antes de dirigir la final y se advirtió de que no acudirían a la tradicional foto con el técnico rival ni a la cena con la directiva blaugrana y el resto de autoridades. Hasta aquí ya era un bombazo y un plante total a escasas 24 horas de uno de los partidos más importantes del año en el fútbol español. Sin embargo, pocos minutos después, comenzaron a salir noticias de que la entidad de Chamartín se planteaba incluso no presentarse al encuentro. Un órdago total a la Federación y al CTA.
Al final, para suerte de los aficionados al fútbol y todos los fans del club blanco y el blaugrana desplazados a Sevilla, se confirmó que la final se terminará jugando. El sentido común se impuso. Pero todo este lío que se ha montado en la previa de la final de la Copa del Rey, uno de los más grandes que se recuerdan, han sido por consecuencia de las declaraciones del gijonés González Fuertes, que no gustaron nada en el seno del conjunto del Bernabéu e hicieron pensar a los directivos blancos que no es una persona imparcial para dirigir dicho encuentro, llegando los entrenados por Carlo Ancelotti a publicar un comunicado en redes sociales en contra de la actitud de los colegiados.
Finalmente, el gran partido se jugará y el Real Madrid se juega gran parte de la temporada en estos 90 minutos. Tras la eliminación en la Champions League y con una situación desfavorable en el campeonato doméstico, los de la capital de España se juegan uno de los títulos que más accesibles tienen en La Cartuja. Sin embargo, lo que ha opacado esta previa en las horas anteriores al encuentro ha sido el revuelo político, que ha silenciado cualquier debate futbolístico que hubiese antes de todo un clásico que decidirá uno de los trofeos del curso.