Acabar el maratón olímpico, un calvario para Tariku Novales

X.R. CASTRO

DEPORTES

Sashenka Gutiérrez | EFE

El atleta de Ames tuvo un encontronazo con una bicicleta en el kilómetro 10, vomitaba cada vez que tomaba sales para hidratarse, sufrió con los abductores y terminó con los pies ensangrentados

10 ago 2024 . Actualizado a las 11:15 h.

Tariku Novales no tuvo el debut soñado en el maratón. Entró en el puesto 68 con un tiempo de 2.25:33 pero después de sufrir un auténtico calvario: tuvo un encontronazo con una bicicleta de la organización, el cuerpo le rechazaba las sales minerales cada vez que las tomaba y terminaba vomitando y por lo tanto deshidratado, tuvo problemas con los abductores y por momentos apenas podía correr y entró con los dos pies con sangre. Pero el gallego de Ames terminó cruzando la línea de meta, por corazón, no por fuerzas.

«Todavía me estoy preguntado cómo he sido capaz de terminar», comentó el atleta de Ames desvelando que «en el kilómetro 11 tuve un encontronazo con una bici de la organización», eso le provocó que se cargase el abductor. Tampoco le respondió el estómago. «Lo llevaba como el culo, en cada avituallamiento las sales me revolvían la tripa y he tenido de parar casi a vomitar cada vez, con lo cual me deshidrataba mucho», prosiguió con su relato de adversidades. Con este panorama, en cada kilómetro pensó en la posibilidad de «echarme a un lado», pero finalmente no lo hizo «porque había una fuerza dentro de mí que me decía que había que terminar. La verdad es que no sé si me arrepiento o estoy orgulloso de haber terminado. Es un palo más pero por desgracia estoy bastante acostumbrado a llevarme palos, pero también estoy acostumbrado a levantarme de ellos, aunque la verdad siento bastante vergüenza de haber estado tan lejos de cualquier expectativa que pudiese tener. Aún teniendo un día malo debía estar más adelante», dijo a TVE.

El gallego, pese a todo, tiró hasta el final y entró como el tercero y último de los españoles. Tariku pasó la media maratón a 1.09;58, a más de dos minutos de sus compañeros de equipo y muy lejos de la cabeza de la carrera. La cosa no mejoro en la segunda parte de recorrido, situando siempre más allá de puesto 70 y perdiendo tiempo con Ibrahim Chakir y Yago Rojo, los otros dos españoles que el aventajaron de un modo significativo. En su caso, acabar fue el gran mérito, que no es poco teniendo en cuenta el día y la dureza del recorrido. También los problemas físicos que evidenció a lo largo de toda la prueba, especialmente a medida que pasaban los kilómetros. El de Ames entró en la meta con gesto contrario y tiró la gorra con  desaprobación. Eso sí, pudo saborear el final del maratón olímpico en un lugar tan mítico. «No he podido disfrutar de los Juegos. He intentado tener mentalidad positiva pero no he sido capaz ni de eso. No he disfrutado de nada y no he sacado nada positivo de esto. Es un momento complicado», dijo Novales con los ojos llorosos.

Ganó el etíope Tola con récord olímpico y Kipchoge abandonó

En el plano global el triunfo se lo llevó con récord olímpico el etíope Tola (2.06:26) y Kipchoge no pudo cumplir su sueño de tres oros olímpicos en la mítica distancia y tuvo que abandonar en el kilómetro 37. Kenenisa Bekele acabó, pero muy lejos de la cabeza. Tamirat Tola marcó un ritmo alto y comenzó a marcar diferencia en el kilómetro 20. El africano ya sabía lo que eran subidas y bajadas del maratón de Nueva York y pasó la media maratón en 1.04:51. Kenenisa Bekele, otro de los ilustres pasó a 40 segundos. El etíope tampoco pudo estar en el grupo de cabeza desde los primeros kilómetros y el primer duelo se quedó en papel mojado a la primeras de cambio.

 Cuando el maratón entró en su parte más complicada, una cuesta del 13 %, fue cuando Tola decidió marcharse en solitario cogiendo metros sobre sus rivales del grupo de cabeza. El etíope apretó los dientes, inclinó el tronco y le puso una marcha más a su carrera. Tamirat, que corrió el maratón por la baja de un compañero de la selección etíope, comenzó a coger diferencias y volar camino del Palacio de Versalles. Tola se cansó de mirar para atrás, pero al mismo tiempo no dejaba de ampliar su ventaja para entrar en la línea de meta con un tiempo de 2-06:26 con récord olímpico, algo del todo inesperado dada la extrema dureza del recorrido.

 Por detrás, el belga Abdi (bronce en Tokio) lanzó un ataque a falta de tres kilómetros en un segundo grupo de tres unidades y se marchó al encuentro con la plata. El bronce fue para Kipruto (Kenia), el último en contactar con la zona de cabeza. Kenenisa Bekele acabó la prueba para despedirse el maratón olímpico en el puesto 39, algo que no pudo hacer el bicampeón olímpico Kipchoge que se retiró en el kilómetro 37. La leyenda de 39 años también es humana.