Portento en todas las especialidades, llegó a dejar de competir por un bajón mental y ahora cinco victorias la separan del récord absoluto del sueco Stenmark
12 ene 2023 . Actualizado a las 10:25 h.Mikaela Shiffrin (Colorado, 1995) hizo historia al igualar el récord de victorias en la Copa del Mundo de esquí alpino de su compatriota Lindsey Vonn. Ambas se han subido 82 veces a lo más alto del podio, pero Shiffrin, con 27 años, todavía tiene mucho por decir. Se quedó a un paso de superar el hito al no poder hacerse con el triunfo en el eslalon celebrado ayer en Flachau (Austria). Aún así, es la nueva reina del circo blanco.
Su contacto con la nieve le viene de familia. Sus padres y su hermano ya eran amantes de este deporte y, con tan solo 5 años, comenzó a practicarlo. Sus primeros éxitos llegaron a los 13, cuando ganó el eslalon, el eslalon gigante y la combinada en la competición infantil Whistler Cup. Cumplidos los 15, su talento traspasó fronteras al coronarse en la carrera internacional de esquí infantil más importante del mundo, el trofeo Topolino, hoy denominado Copa Infantil por la Federación Internacional.
Dicen los expertos que no esquía, que baila sobre la nieve. Lady eslalon, como así la apodan, compite en todas las modalidades en lugar de especializarse en una como muchos de sus competidores. Con 15 años debutó en la Copa del Mundo y, con 18, se convirtió en la campeona de eslalon más joven de la historia. Tres medallas olímpicas, seis campeonatos mundiales y 82 carreras de la Copa del Mundo, avalan su supremacía en el esquí alpino con tan solo 27 años.
«Métodica y técnica»
«Shiffrin aborda el esquí de una manera muy diferente a la mayoría, o tal vez a todos», dijo a Associated Press Lindsey Vonn. «Es muy metódica y técnica, algo opuesto a mí, pero por eso ha tenido tanto éxito», destacó.
Pesar por su padre
La estadounidense protagonizó una de las imágenes más reveladoras sobre la importancia de la salud mental en el deporte. Durante los Juegos de Invierno celebrados en Pekín en el 2022, el foco se centró en Shiffrin. Lady eslalon estaba sentada en la nieve, cabizbaja, tapándose la cara e incapaz de terminar la prueba. Había caído, y no solo físicamente. Llegó a plantearse dejar el deporte porque su cabeza no iba. Su dominio se tambaleó por la repentina muerte de su padre en un extraño accidente doméstico que le hizo apartarse durante un año de la montaña. «Me lo estoy cuestionando todo. Estoy decepcionada y frustrada», aseguró en aquella cita olímpica.
Un bache del que consiguió salir adelante. Meses después —el pasado noviembre— logró romper el récord de tener más podios en una sola disciplina, que ostentaba Lindsey Vonn. La segunda contaba con 66 victorias en descenso, y Shiffrin ya tiene 67.
Unos éxitos que no conquistó solo a base de talento. Dormir bien, entrenamiento, hacer dieta y no probar el alcohol y la cafeína son algunas de sus normas. También la disciplina. Maniática de las rutinas, Shiffrin confesó a medios estadounidenses que siempre se va a dormir a las nueve de la noche para asegurarse que descansa las horas necesarias. Y tampoco perdona la siesta. De hecho, durante los Juegos de Sochi, aseguran haberla visto durmiendo encima de unas chaquetas entre un descenso y otro.
Con más de 1,2 millones de seguidores en Instagram, le apasiona la moda. La estadounidense también aprovecha su reconocimiento para tratar de inculcar la importancia sobre una buena nutrición. Por ello, publicó un libro, Las recetas ganadoras de Mikaela Shiffrin, donde deja claro que los alimentos frescos son básicos para una dieta equilibrada.
Desde que comenzó a competir siempre ha llevado escrito en sus esquíes y en su casco las iniciales «ABFTTB», abreviatura de «siempre más rápida que los chicos». La deportista reconoció en un medio americano que se siente orgullosa de que no existan diferencias salariales entre hombres y mujeres en su deporte. Además, en lo económico presta mucha atención a los entrenamientos de los chicos. Le gusta aprender de ellos e, incluso, compartir ejercicios para mejorar.
Lady eslalon todavía tiene mucho que decir. Con ocho triunfos esta temporada, Shiffrin se acerca al récord absoluto de Ingemar Stenmark, con 86 victorias. Vonn intentó superar la marca del sueco, pero se tuvo que retirar hace cuatro años cuando las lesiones pusieron fin al intento. Es el turno de su compatriota.