Los técnicos gallegos Raúl Caneda y Miguel Álvarez, con experiencia saudí, desgranan las claves de la decisión del portugués
10 ene 2023 . Actualizado a las 09:25 h.El aterrizaje de Cristiano Ronaldo, a sus 37 años, en el Al-Nassr ha puesto el foco en la liga de Arabia Saudí. No es el primer fichaje de renombre en la historia del campeonato más fuerte de Asia, (Bebeto se retiró en el Al-Ittihad, pero también pasaron por allí Stoichkov, Rivelino y Donadoni) que comenzó a tomar forma en los años ochenta y se sirvió del reclamo de veteranos con tirón para reclutar a futbolistas de alto nivel que lo elevasen como el mejor torneo nacional asiático. El entrenador gallego Raúl Caneda, que dirigió al Al-Ittihad (2012-2013) y al Al-Nassr (2014-2016), además de haber trabajado en las ligas de Primera División española (con la Real Sociedad y el Almería), mexicana y catarí, tiene todas las claves para poner en contexto la decisión del astro portugués.
futbolistas de referencia
Internacionales con experiencia en grandes ligas
Los nombres más conocidos para los europeos son Caicedo (Abha), Semedo (Al-Tai), Duarte (Al-Wehda), Cueva (Al-Fateh), Hélder Costa (Al-Ittihad), Krychowiak, Banega y el gallego Santi Mina (Al-Shabab), Pereira, Marega, Carrillo, Ighalo y Vietto (Al-Hilal). Y en el mismo vestuario que Cristiano estarán Ospina, Álvaro González, Luiz Gustavo, Talisca y Pity Martínez. «Permiten ocho extranjeros por club y se han formado varios equipazos, de los mejores de Asia. Todos los futbolistas del Magreb y del mundo árabe se plantean como objetivo fichar por un equipo saudí. Será un retiro dorado, pero competitivo para Cristiano», señala Caneda.
clubes punteros
Mejores que la media europea
«Al-Hilal, Al-Ittihad, Al-Shabab, Al-Nassr y el Al-Ahli (a pesar de que descendió a Segunda) resisten la comparación con la burguesía occidental. Partimos de una visión muy eurocentrista. Hay ligas europeas que no son nada respecto a la saudí. Sus futbolistas no jugarían en los grandes de Arabia. El mejor jugador que yo he entrenado es árabe, Abdo Atif», razona Caneda, que ejemplifica: «Es una actitud millennial: se mira uno demasiado al ombligo y solo importa lo actual. Como cuando se resta importancia a la trayectoria de Pelé porque no jugó en Europa y se ignora que la liga brasileña de aquellos años era mejor que todas la europeas».
el contexto
Incentivos personales
Caneda considera que «para Cristiano no será un paseo. Arabia no quiso ser menos que Catar y lo utiliza para dar un espaldarazo a la Liga y al país, incluso turísticamente [Messi también es imagen saudí en este sentido], pero la exigencia futbolística vendrá dada por la presión de los aficionados (ya que no es como Catar, donde no hay cultura futbolística) y por el nivel de los rivales». «El ambiente de un derbi de Yeda, con quince millones de telespectadores y el estadio vibrando al nivel de un Boca-River conlleva exigencia», añade.
«El salto que pretende dar Arabia es vender su imagen al exterior, porque su fútbol no solo representa a los sauditas, sino a todo el islam. Sus jugadores son iconos sociales, que ganan mucho dinero y ya militan en un fútbol de alto nivel. No sienten la necesidad de irse a Europa. Además, las diferencias culturales hacen difícil que los futbolistas (tanto europeos como árabes) triunfen en este intercambio de destinos. Bebeto, sin ir más lejos, no fue capaz de imponerse. Si Cristiano desea mantener su carácter competitivo, repito que tendrá incentivos para ello, porque en Arabia Saudí existe tradición futbolística y demanda fútbol, hay pasión. No es como el caso de otras ligas que ficharon a estrellas internacionales, como la de Estados Unidos y Japón. En la primera no tuvo el menor impacto. La segunda ya tenía un campeonato establecido y lo reforzó. Y después, solo nos damos cuenta cuando Marruecos o los nipones nos ganan en el Mundial», analiza el entrenador gallego. «Se podría decir que es una liga parecida a la turca, desconocida pero de alto nivel, y con grandes jugadores y entrenadores, pero a la que hay que adaptarse para imponerse», concluye.
el futuro
El efecto arrastre
Con su desembolso, de la misma manera que el PSG alteró el mercado europeo, el Al-Nassr podría sentar un precedente en la liga de Arabia Saudí, cuyas inversiones están sostenidas por el fondo soberano. A partir de ahora, todos los grandes clubes saudíes van a querer incorporar su estrella de referencia, en competencia directa con China y Japón. Ya hace diez años que el Guangzhou Evergrande situó a Marcello Lippi y Darío Conca entre los mejor pagados del mundo, a razón de 12 millones al año netos. En Arabia, ya había jugadores percibiendo seis.
«El Al-Nassr quiere volver a ser el club más fuerte»
El ourensano Miguel Álvarez Sánchez fue en Arabia Saudí segundo entrenador del Al-Nassr, Al-Fateh, Al-Adalah y Khaleej, y analista del Al-Ettifaq. Formó parte de los cuerpos técnicos de clubes en Alemania, Estados Unidos (como el New York City), los Emiratos Árabes Unidos, Egipto y las Maldivas. Conoce como pocos el campeonato saudí.
rivalidades
Como un Real Madrid-Barça
«Dos clubes mantienen una rivalidad como la del Real Madrid y el Barcelona: el Al-Nassr y el Al-Hilal, son ambos de la capital, Riad. El Al-Hilal es el actual campeón de la Champions de Asia y de la liga (lleva tres seguidas). El Al-Nassr no la gana desde el 2019 y, antes, se había pasado un lustro en blanco, pero fue el primer campeón al crearse la competición y el primero en jugar un Mundial de clubes, en el año 2000 contra el Real Madrid. Está vinculado a la realeza y es muy querido. Busca recuperar su estatus de mejor club de Asia, que le arrebató el Al-Hilal. Sus aficiones llenan grandes estadios», describe. «En Yeda, donde se juega la Supercopa de España esta semana, está el Al-Ittihad (que entrenó el año pasado Contra y que perdió la liga en la última jornada) y el Al-Ahli (ahora en Segunda, con paralelismo con lo que le sucedió al Atlético)», añade.
estructura de club
En diez años, a la vanguardia
«En el 2012, cuando llegué al Al-Nassr, era uno de los pocos que tenían ciudad deportiva. Ahora ninguno de Primera o Segunda envidian a los grandes de España, incluso con estadios propios y centros de concentración. Los cuerpos técnicos eran de cuatro personas y ahora los básicos superan las diez, más los departamentos médicos. Las categorías de base replican este modelo, partiendo de seis personas. Por lo que viví, diría que tienen más recursos que en Alemania, Estados Unidos y España. Deportivamente hay mucha diferencia. No solo el nivel, sino también el idioma, el modo en que hay que transmitir, la cultura (cinco momentos de rezo diarios, o el Ramadán), el calor...», concluye.
«Lo que sucedió con Ronaldo es excepcional, no suelen fichar veteranos»
El técnico gallego Miguel Álvarez analiza el prototipo de jugador saudí, cuyas características quedaron patentes en la disputa del Mundial celebrado en Catar.
el perfil local
Futbolista competitivo con talento, que ha mejorado tácticamente
Para Miguel Álvarez, «lo que sucedió con Cristiano es excepcional. Al contrario de Catar o los Emiratos, en Arabia se buscan jugadores de gran nivel y en plenitud de edad. No se hacen contratos de un año. Se busca competir».
«Hay jugadores locales con enorme talento, como Sami Al-Najei, Firas Al-Brikan y Al-Dawsari, que marcó el 2-1 contra Argentina en el Mundial. Yo entrené a varios jugadores que han sido mundialistas y la selección ya es habitual en la Copa del Mundo. Hay que recordar que la LFP llegó a tener un acuerdo de colaboración para aportar jugadores al fútbol profesional español, lo que en el año 2018 llevó a los deportistas saudíes a tres equipos de Primera (Villarreal, Levante y Leganés) y cuatro de Segunda (Numancia, Rayo Vallecano, Sporting de Gijón y Valladolid)», relata.
«Han evolucionado mucho. El jugador árabe es muy competitivo y físico. Ha mejorado muchísimo tácticamente y en la lectura del juego desde que yo llegué hace diez años», añade.
Experiencia avalada para los extranjeros
En cuanto a la evolución de la estructura de preparación «es como el día y la noche», describe Miguel Álvarez. «Cuando yo llegué en el año 2012, solo cinco equipos tenían entrenadores extranjeros, ahora casi todos y además exigen experiencia avalada. Lo mismo sucede con los jugadores. Ya no fichan a cualquiera. Arabia Saudí fue campeón de Asia sin encajar un gol. Y la Copa del Golfo que juegan ahora, aunque es absoluta, prácticamente van con el equipo sub-23», explica.
LA AFICIÓN
«Te invitan a compartir un té o comentan las razones de la derrota»
«Los seguidores son muy amables y respetuosos. Si te encuentran por la calle, te piden autógrafos, fotos, compartir un té, preguntan las causas de la derrota o comentan la victoria», relata el preparador gallego, que estuvo durante varios años en la liga de Arabia Saudí.