El futbolista asturiano, un defensa de leyenda y un portento físico, ha muerto en Asturias por un problema cardiaco
25 may 2020 . Actualizado a las 19:20 h.El asturiano Marcelo Campanal, mítico defensa del Sevilla y capitán de la selección española en los años 50 del pasado siglo,ha fallecido este lunes a los 89 años en su Asturias natal por un problema cardiaco. El club sevillista, en el que militó dieciséis temporadas y era considerado toda una leyenda, informó de que «el corazón del racial asturiano, que nunca dejó el deporte, se ha parado a los 89 años». Campanal, dotado de un físico superdotado, fue un defensa de leyenda capaz de anular en los años 50 a futbolistas de la tallade Di Stéfano o Kubala.
Marcelino Vaquero González del Río, conocido como Marcelo Campanal o Campanal II y también como El huracán de Avilés, también destacó en varias disciplinas del atletismo nacional, jugó 403 partidos en el Sevilla durante dieciséis campañas seguidas, entre las décadas de los 50 y los 60 del siglo pasado, y en esa época fue un fijo de la selección nacional, en la que llegó a ser capitán con apenas 23 años y cuya camiseta defendió entre 1952 y 1957.
Nacido en Asturias, Marcelo Campanal forjó su leyenda en Sevilla por una conexión familiar, pues su tío Guillermo era entonces una de las figuras sevillistas, con lo que con apenas 16 años se embarcó de hasta Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) para llegar, tras varios días de viaje, a la capital hispalense y convertirse «posiblemente en el mejor defensa de la historia del club de Nervión».
Tras un par de cesiones, con 19 años firmó con el primer equipo y pronto destacó como un «zaguero férreo y enérgico, que planteaba cada partido como el último» y que, por su condición de atleta, sobresalía sobre el resto, llegando a oscurecer sobre el campo a grandes estrellas como Kubala o Di Stefano, rememoró el Sevilla.
Por él se interesaron el Barcelona, el Inter de Milán o el Real Madrid, «pero la fidelidad de Marcelo a los colores blanquirrojos lo mantuvieron en su casa hasta 1966», recalcó su club de siempre, en el que nunca pudo levantar un título, aunque se proclamó subcampeón de liga en dos ocasiones y de la Copa de España en otras dos.
En 1954 fue nombrado deportista español del año y en 1966, ya con 34 años, se marchó al Deportivo de la Coruña y luego al Iliturgi jiennense antes de retirarse a los 37 años en el Real Avilés.
A pesar de colgar las botas, siguió haciendo deporte hasta los últimos días de su vida. Hace un mes, el que era decano de los internacionales españoles declaró a Efe que llevaba «unos días en cama, pachucho», y que eso le había impedido seguir haciendo bicicleta estática y pesas en su casa, aunque ya estaba recuperado.
De hecho, 'El huracán de Avilés« logró ser el deportista español en activo con más medallas, con 115 títulos nacionales de atletismo en diversas categorías de veteranos y récords en salto de altura, longitud, triple salto, peso, disco, 110 metros lisos o 200 vallas.
El club hispalense, que lo ha definido como «estandarte máximo de la casta y el coraje» y ha publicado un vídeo de homenaje en su cuenta de Twitter, indicó que en sus últimos días tanto el presidente, José Castro, como el vicepresidente, José María del Nido Carrasco, han estado en permanente contacto con su familia.
«Hoy el Sevilla FC despide a una de sus estrellas. Un futbolista adelantado a su tiempo que lo dio todo con el escudo sevillista en el pecho y que siempre se sintió un sevillano más. Por expreso deseo personal, Campanal descansará para siempre en la Sevilla de sus amores», subrayó.
La entidad apuntó así que los restos mortales del internacional serán depositados en el cementerio sevillano de San Fernando junto a los de su esposa, María de la Cruz Guitarte, fallecida hace dos años y medio, y trasladó su «más sentido pésame a todos los familiares y allegados de Marcelo. ¡Descanse en paz, mito de Nervión!».
Durante el confinamiento por la COVID-19, el Sevilla estuvo muy pendiente de »uno de los grandes de su historia« y Campanal llegó a participar en su campaña 'Cuidame' para concienciar a la sociedad de la importancia de cuidar a los mayores, e incluso recibió la llamada del capitán Jesús Navas para interesarse por su salud, tras un percance doméstico del que se estaba recuperando.