Las discrepancias entre el juez que lleva el caso y la Policía han sido patentes durante toda la investigación
23 jul 2019 . Actualizado a las 19:58 h.La mañana del pasado 28 de mayo, los futbolistas Íñigo López, Borja Fernández, Carlos Aranda y Raúl Bravo, junto al presidente del Huesca, Agustín Lasaosa y el médico del mismo club Juan Carlos Galindo, se convirtieron en los protagonistas de la operación Oikos. Una operación policial contra el amaño de partidos de fútbol para obtener beneficios en apuestas deportivas.
Dichas detenciones, tal y como revela el diario El Mundo, se produjeron sin un mandato explícito por parte del juez, sino que fue la policía la que decidió intervenir antes el riesgo, siempre según su criterio, de que se pudieran destruir pruebas. El juez por su parte, era partidario de continuar con la investigación mientras que los fiscales rechazaban prolongar el tiempo de escuchas telefónicas.
Las discrepancias en la investigación entre el juez y la policía han continuado. De hecho, los detenidos que aceptaron declarar lo hicieron en comisaría, algo que tampoco gustaba el juez. La investigación continúa a día de hoy y el juez espera poder recibir más pruebas para tratar de aclarar el funcionamientos de toda la trama.
«Al que tenga dudas que espere un tiempo, que le intentaré convencer»
El expresidente de la Sociedad Deportiva Huesca, Agustín Lasaosa, ha hablado este lunes por primera vez después de ser investigado por el caso Oikos y ha pedido a las personas que tienen dudas sobre su comportamiento que esperen un cierto tiempo porque intentará convencerlas. Incluso ha destacado que sigue siendo socio del club y que el futuro «igual nos depara alguna sorpresa».
El exdirigente del club azulgrana ha visitado hoy a la plantilla del equipo en la localidad oscense de Benasque, donde está realizando una concentración de pretemporada, y ha conversado con los medios de comunicación. «Tengo la conciencia súper tranquila. Confío al cien por cien en la justicia pero no puedo decir muchas más cosas. Todo va bien . Fue algo increíble en cuanto al dolor, a lo desagradable. Fue algo tremendamente doloroso pero, conforme han ido pasando los días, he visto que el proceso ha ido mejorando. Tengo la ayuda de mi abogado José María Fuster y de su gabinete, en donde me han ido aclarando todo, y creo que esto se va a quedar, ojalá, que en nada», ha resaltado.
Lasaosa ha reiterado su confianza «al cien por cien» en la justicia porque dice que se lo está demostrando y que espera estar libre según marquen los plazos. «Por los lazos que me han unido y me unen y espero que me unan en el futuro con la Sociedad Deportiva Huesca he venido a saludar a la gente y me veréis por los entrenamientos», ha asegurado. El expresidente del conjunto altoaragonés ha explicado que actualmente hace vida «súper normal» y que pasea por la calle porque no se tiene que esconder de nadie: «Así me lo han aconsejado mis abogados, mis amigos y la gente que me quiere. Me gustaría mandar gracias a la gente que me está apoyando desde el mes de mayo. Estoy recibiendo miles de apoyos de gente que cree en mí y debo de ser agradecido».
Agustín Lasaosa no cree que el hecho de que al Huesca le esté costando confeccionar la plantilla tenga algo que ver con lo ocurrido con el caso Oikos en el que él está inmerso. «Hay mucha gente que me pregunta pero yo no lo creo. Lo que ocurre es un efecto bumerán que ya ocurrió otros años. Cuando bajan equipos los jugadores están pensando que pueden pagar unos salarios altos y tenemos que tener los pies en el suelo», ha comentado.