Jota Peleteiro: «No vivo para contentar a nadie»

DEPORTES

Debutará en la Premier tras cinco años en Inglaterra y dice que le gustaría retirarse en Galicia

24 jun 2019 . Actualizado a las 11:15 h.

Descansa, junto a su familia, unos días en su tierra. «Siempre le digo a mi padre que no pillo un día de sol aquí ni de casualidad». A José Ignacio Peleteiro Ramallo (A Pobra do Caramiñal, 1991) no le asustan los retos. Llegará a la Premier con el Aston Villa tras jugar las dos últimas temporadas en su máximo rival: el Birmingham.

-¿Cómo se negocia un traspaso al eterno rival?

-Se pusieron en contacto conmigo, me llamó su director deportivo. Luego lo hizo Dean Smith -técnico del Aston Villa, que ya lo había dirigido en el Brentford- para transmitirme que estaba deseando que volviéramos a trabajar juntos. Fue todo muy rápido para lo que suelen ser estas cosas. En una semana estaba todo cerrado. Para el Birmingham es una inyección de dinero (cobraron por su traspaso unos 5 millones de euros) y a la vez se saca de encima uno de los sueldos más altos. La sanción que tuvo el año pasado por el fair play financiero -le restaron nueve puntos- les condicionó mucho. Todos nos hemos beneficiado.

-Puede que los aficionados del Birmingham no lo entiendan.

-Es una rivalidad muy grande. Supongo que habrá muchos a los que no les guste. Algún abucheo por la calle tendré que llevarme. Nuestro trabajo es así y hay que convivir con ello lo mejor que se pueda. No me preocupa, sinceramente. No me gusta elegir los pasos fáciles para estar en una situación de confort. Miro para mí mismo e intento tomar las decisiones que me ilusionan y creo me benefician. Los primeros días le di vueltas, sabía que iba a ser ajetreado. Ahora ya estoy deseando empezar la temporada con el Aston Villa.

-Un histórico que festejó su regreso entre los grandes.

-Cancelaron la celebración por respeto a los aficionados.

-Vaya, no es lo habitual.

-El entrenador decidió a última hora que no era apropiado festejar nada, que es un club legendario, con una gran historia detrás, y que debe celebrar títulos, no un ascenso a Primera División. Así que contentos estaban pero festejos con la plantilla no hubo.

-Lo dice con tanta naturalidad que ya parece absorbido por la idiosincrasia del fútbol inglés.

-Al final son ya cinco años. Los niños estudian allí, hablan inglés perfectamente. ¡Con lo que me costó a mí los dos primeros años! Tenemos nuestra vida hecha. Es verdad que la tierra tira, pero me quedan años todavía en Inglaterra.

-¿No ha vuelto porque no ha querido o es que no ha habido ninguna propuesta en España que le atrayese lo suficiente?

-Todos los veranos he tenido la oportunidad de volver a jugar en España. Todos. Y ha podido siempre más la pasión que tengo desde pequeño por el fútbol inglés. He conseguido hacerme un nombre y había decidido aguantar un poco más, confiaba que la oportunidad de llegar a la Premier llegase algún día. Era una espinita que tenía dentro desde que vine. No quería conformarme con haber jugado en Primera en España. Mi sueño era jugar la liga más potente del mundo y ahora quiero disfrutarla.

-¿Le gustaría regresar algún día a Galicia todavía como profesional?

-No te niego que sería algo que me encantaría. Y sí, sí que lo he pensado. Me atrae la opción de poder jugar en Galicia mis últimos años de carrera, dentro de cinco o seis, y vivir allí cerca de la familia.

-Si ya se marcó un pase del Birmingham al Aston Villa, que tiemblen en Vigo...

-No, no (se ríe) tendría que volver tranquilo. Pero al final tienes que valorar un proyecto deportivo, cómo va a estar tu familia, no solo una ciudad. A la opción de volver a Galicia sé que nunca le cerraría las puertas.

-¿Y a la de hacerlo en el Deportivo, habiéndose criado en la cantera del Celta?

-No, en el fútbol no puedes decir «nunca» a la ligera porque luego se te cae todo encima. Estoy muy orgulloso de haberme formado en el Celta, pero no puedo tirar piedras contra mi tejado. Y menos a largo plazo, nunca se sabe.

-Está casado con Jessica Bueno, expareja de Francisco Rivera. ¿Cómo curte estar expuesto también por su parcela personal?

-Es parte de mi vida. Está claro que pueden hacerte daño, pero desde pequeño estoy acostumbrado a ser una persona pública. Y no leo nada sobre mí, ni de lo futbolístico, ni de mi vida personal. Intento ser feliz a mi manera, con la gente que tengo alrededor. Cada uno puede opinar lo que quiera, que mi vida es mi vida y no la vivo para contentar a nadie.

En corto

Ha barrido los alrededores de Bimingham para tener de mano todos los restaurantes españoles: «Intentamos seguir comiendo como si estuviéramos en casa». Se le hace raro que alguien le llame José Ignacio. Todavía no jugaba y ya respondía por la inicial de su nombre.

-¿Quién le bautizó como Jota?

-Mis hermanas. Desde muy pequeñito ya, no tenía ni tres años, empezaron a llamarme así por José. Desde ahí, todo el mundo me ha conocido siempre de esa forma.

-¿Qué entrenador considera ha marcado más su carrera?

-Cuando era pequeño, mi padre. Y, en la trayectoria, ya como profesional, Dean Smith.

-Dígame el mejor amigo que haya labrado en el fútbol.

-Txema Añibarro (central ya retirado con el que coincidió en su etapa en el Éibar).

-En Inglaterra son de afamados cánticos en los estadios. ¿Qué canta Jota Peleteiro?

-Ni siquiera tengo un artista o un grupo favorito. Escucho lo que suena en cada momento, sobre todo música española. Estuve en el concierto de 50 Cent en Londres pero no soy mucho de música.

-¿Y qué le apasiona fuera del fútbol y de su familia?

-Los coches. Cuando cojo la consola es siempre con juegos de conducir. Me gusta leer sobre el motor, aprender todo lo que puedo y tener buenos coches. También veo la NBA y la NFL. En vacaciones siempre aprovecho para jugar alguna pachanga de baloncesto.

-¿Se ve compitiendo en algún rali cuando el fútbol se acabe?

-No diría que no, ¿eh?. Por mi tierra tenemos muchos y muy buenos. Los conozco bastante bien (risas).