Borja Fernández pide apoyo al Real Valladolid, que se confíe en su honradez, y alega que no tiene «nada que esconder»
DEPORTES
Su abogado asegura que está «derrumbado» y prevé que tenga que declarar en Huesca mientras el club emite un comunicado ambiguo
28 may 2019 . Actualizado a las 21:54 h.El abogado Gustavo Mateos, que ha asistido este martes al jugador del Real Valladolid Borja Fernández tras su detención en la operación policial contra presuntos amaños en el fútbol, ha asegurado que el ya exfutbolista ha querido pedir dos cosas, que el Real Valladolid le apoye y «no tenga dudas» y que la gente confíe en su honradez porque no tiene «nada que esconder».
En declaraciones a Europa Press, el letrado ha explicado que es amigo de la familia del exfutbolista gallego y que ha acudido a la Comisaría de la calle Gerona de Valladolid porque lo ha pedido Borja, quien está «totalmente derrumbado, porque no entiende nada de lo que sucede».
Mateos ha explicado que el exfutbolista le ha trasladado dos cosas: En primer lugar que la gente «confíe en su honradez» ya que defiende que «no tiene absolutamente nada que esconder y que nunca ha actuado mal» y que el club le apoye y «no tenga dudas».
El letrado ha detallado que Borja Fernández ha prestado ya declaración en la Comisaría vallisoletana, donde «ha participado en todo, ha contestado a todas las preguntas y ha facilitado cosas que inicialmente le han pedido», ya que ha recalcado que es una persona que «no tiene nada que esconder y que quiere que se aclaren las cosas».
Mateos ha defendido que Borja es una persona «muy carismática responsable, humana y muy querida» y que se encuentra «hundido»,aunque también seguro de que «se va a aclarar». El abogado también se ha mostrado convencido de ello porque es lo lógico «cuando alguien no ha cometido ningún tipo de situación delictiva».
Además, ha añadido que al exfutbolista estas cosas «le quedan muy grandes» porque «es un chico de Galicia, normal, que ha triunfado en el fútbol pero que sigue manteniendo la normalidad». Por eso, ha añadido, se encontraba «desesperado» y «llorando» porque «la gente se plantease podía haber llegado a coquetear con ese tipo de actuaciones» relativas al posible amaño de varios partidos de fútbol dentro de una red con la que se relaciona ya a una decena de detenidos, entre ellos varios jugadores en activo o retirados como el exmadridista Raúl Bravo.
Gustavo Mateos ha añadido que prevé que Borja sea trasladado a la Comisaría de la Audiencia Nacional, en plaza de Castilla, y que posteriormente tenga que ir a declarar a Huesca, ya que las diligencias de la operación son estudiadas por un Juzgado de Instrucción de la ciudad aragonesa.
«Es curioso porque Borja no conoce absolutamente a nadie de Huesca, ni siquiera a los jugadores, pero se están investigando partidos», ha señalado el abogado.
COMUNICADO «BASTANTE AMBIGUO» DEL CLUB
Sobre el Real Valladolid ha considerado que el comunicado que ha hecho público el club blanquivioleta a primera hora de la tarde de este martes es «bastante ambiguo, sin entrar en nada» y, simplemente «dando respaldo a la Policía», por lo que ha advertido de que a Borja Fernández le habría gustado un mayor apoyo, algo que aun confía que pueda trasladarse en las próximas horas.
En todo caso, ha explicado que ha podido hablar en privado con el consejero delegado del Real Valladolid, Carlos Suárez, quien afirma que también estaba afectado y «llorando» porque sabe qué clase de persona es Borja «lo que ha hecho por el club porque», a lo que ha añadido que él «ha denunciado siempre este tipo de cosas».
Las apuestas, nuevas «reglas del juego»
Sin haberse cerrado aún el presunto amaño del Levante-Zaragoza (1-2) de la temporada 2010-2011, cuyo juicio con 42 imputados se celebrará entre el 3 y el 30 de septiembre en Valencia, ni tampoco los supuestos casos de compra-venta de partidos que afectan a Osasuna, ya ha estallado el primer gran caso de corrupción en el fútbol profesional español como consecuencia de apuestas deportivas llevadas a cabo en la élite por futbolistas de renombre. Hasta ahora, las grandes investigaciones se habían centrado en supuestos amaños en los que se han visto involucrados clubes para cumplir objetivos deportivos, y en las categorías inferiores, con jugadores implicados en apuestas ilegales.
El pasado mes de febrero estalló el 'caso Eldense', vinculado presuntamente a la mafia calabresa que se saldó con cinco detenciones en el club alicantino de Tercera División, después de una escandalosa derrota ante el Barcelona B por 12-0, correspondiente a Segunda B. Un año antes se destapó la 'operación Pizarro', que derivó en la detención de 31 personas acusadas de amaños en Segunda B y Tercera y cuyos cabecillas eran dos exfutbolistas profesionales, Jonan García e Iván Moreno, que supuestamente presionaban o convencían a sus compañeros en divisiones inferiores para forzar jugadas concretas con el objetivo de ganar apuestas.En junio de 2018 llegó la 'operación Cortés', segunda fase de la 'operación Pizarro', con 21 detenidos, entre ellos jugadores de Tercera, tres futbolistas de Primera femenina y un árbitro, con implicaciones en China, donde se organizaban apuestas por internet.
En el caso de Osasuna, con media docena de jugadores del equipo imputados, se descubrió que gran parte de una parti da de más de dos millones de euros fue utilizada para primar a rivales del conjunto navarro por ganar, empatar o perder partidos para salvar la categoría o lograr otros beneficios deportivos. Alrededor de 400.000 euros fueron, supuestamente, destinados a jugadores del Betis, por ganar al Valladolid (4-3) y por dejarse ganar ante Osasuna (2-1) y, según el gerente de Osasuna, otros 250.000 fueron entregados al Espanyol por empatar en Cornellà (1-1) ante el equipo rojillo.