«Es un momento difícil perder en casa, pero finalmente la semana ha sido muy buena para mí después de volver de la lesión»
28 abr 2018 . Actualizado a las 18:36 h.El tenista asturiano Pablo Carreño ha caído en semifinales del Barcelona Open Banc Sabadell-66 Trofeo Conde de Godó, de categoría ATP 500 y disputado sobre tierra batida, al caer ante la sorpresa del torneo, el griego Stefanos Tsitsipas (7-5, 6-3), que ya espera rival para la final del domingo. Carreño, tras deshacerse en cuartos del segundo cabeza de serie del torneo, el búlgaro Grigor Dimitrov (6-3, 7-6(4)), saltó a la tierra batida barcelonesa consciente de los problemas que entrañaba el tenista heleno, que dio la sorpresa el viernes al derrotar al austriaco Dominic Thiem (6-3, 6-2). De esta manera, Tsitsipas, número 63 del mundo, optará a su primer título en el circuito en una final en la que se enfrentará al ganador del otro duelo de semifinales, que disputarán a continuación el número uno del mundo, el español Rafa Nadal, y el belga David Goffin.
Pablo Carreño admitió que es «un momento difícil» perder en el torneo de su club, si bien se mostró satisfecho con su nivel en la última semana. «Es un momento difícil perder en casa, pero finalmente la semana ha sido muy buena para mí después de volver de la lesión», explicó tras la semifinal disputada en la pista central del RCT Barcelona. Sobre la derrota ante el Tsitsipas, jugador revelación del Godó, el tenista asturiano elogió el juego de su rival y destacó su buen inicio. «Él ha jugado muy bien y ha empezado muy fuerte. Me ha sorprendido un poco, he cometido algún error en momentos clave. Ha demostrado estar a un nivel muy alto y no le ha temblado el pulso en ningún momento», afirmó.
Durante la competición, Tsitsipas comenzó golpeando primero y poniéndose pronto 3-0 arriba; incluso en el sexto juego tuvo dos ocasiones de rotura para el 5-1, pero el asturiano defendió su servicio. Carreño esperó al noveno para devolverle el «break» y confirmarlo a continuación. Sin embargo, el griego, a un nivel soberbio en el torneo, siguió aguantando la presión de ser la revelación en la Ciudad Condal y volvió a quebrar el saque de su adversario asturiano en el duodécimo juego para hacerse con la primera manga en unos 50 minutos. En una segunda manga pareja, Tsitsipas aguardó con paciencia al sexto juego para firmar un nuevo quiebre, que consolidaría poco después con su saque. En el noveno, en su segundo punto de partido, el griego confirmó su victoria y su pase a la final tras vencer en diez sets consecutivos.
Tras Barcelona, Carreño ya piensa en el abierto de Estoril, donde intentará revalidar el título que conquistó el año pasado. «Intentaré recuperarme lo antes posible mentalmente ya que no queda otra que seguir adelante», concluyó.