En su película, Rodchenkov, testigo protegido huido del país, desgrana el sistema de dopaje
05 dic 2017 . Actualizado a las 19:52 h.Primero quiso rodar su propio plan de dopaje para mejorar su rendimiento como ciclista. En el proceso, el cineasta norteamericano Bryan Fogel encontró la ayuda de Gregory Rodchenkov, entonces responsable del sistema antidopaje ruso. Meses de trabajo después, fue Rodchenkov quien contactó con Fogel para preparar su huida del país. La desaparición de dos de sus colegas en extrañas circunstancias le animó a volar a Estados Unidos, entregar todas las pruebas sobre el dopaje sistemático de estado en Rusia durante años y convertirse en testigo protegido. Fogel lo cuenta en Icarus, el prestigioso documental de Netflix estrenado el verano pasado, y ahora explica la vigencia de su trabajo en una entrevista con La Voz. La confesión de Lance Armstrong, la duda sobre cómo uno de los deportistas más vigilados del mundo podía haber burlado cientos de controles, le dio la idea.
-Para preparar «Icarus» recurrió a Don Catlin, uno de los padres de la lucha antidopaje, fundador del laboratorio de análisis olímpico de UCLA.
-Necesitaba que alguien me ayudase a que mis análisis terminasen llegando a un laboratorio de la WADA (agencia mundial antidopaje), recurrí a Catlin para que me ayudara con este experimento. Él apoyaba la idea del documental porque había dedicado su carrera a la lucha antidopaje, y sabía que el sistema tenía muchos puntos débiles y no funcionaba. Pese a que veía bien la hipótesis que yo quería demostrar, él no iba a decirme cómo doparme ni quien podía hacerlo. Así que me derivó a Rodchenkov, creo que porque era conocido por su carrera científica. Catlin sospechaba de lo que hacían los rusos, pero no de la envergadura de todo lo que se descubrió después, cuando vimos que el sistema en Rusia era corrupto.
-¿Qué le parece lo más importante de lo que revela Icarus?
-La gente se queda con las trampas que hacía Rusia en el deporte mundial los últimos 40 años, robando medallas de oro en competiciones internacionales. Pero esa es la historia secundaria, para mí la principal es como, a través de una mirilla, se ve otra de más magnitud. Hasta qué punto Rusia está dispuesta a intervenir en asuntos globales para ganar peso a nivel geopolítico. Luego ves todo lo que estaban dispuestos a hacer para ganar medallas de oro, o para corromper el deporte y esa operación sistemática es la misma que usan para interferir en las elecciones de Estados Unidos o en las alemanas o en el Brexit. Rusia está dispuesta a hacer lo que sea y de cualquier forma para ganar, en deporte o unas elecciones. En la película creo que es la primera vez que vemos a alguien, en este caso Rodchenkov, que estaba en la trama, que realmente entiende cómo trabajan los ministros rusos. Él da la cara y enseña como funciona el sistema ruso, con evidencias sorprendentes sobre este fraude, en el que la parte deportiva es secundaria. Si hicieron todo en los Juegos de Sochi, ¿qué más están dispuestos a hacer? Lo puedes aplicar a todos los aspectos de la política y lo que estamos viendo en el mundo.
-Vitaly Mutcko estaba involucrado en el programa de dopaje sistemático de Rusia y lo ascendieron a viceprimer ministro ruso. ¿Qué le parece?
-Mi opinión es que su ascenso es corrupto.
-Eso parece.
-¿Qué opinión puedo tener? Que el hombre que era el jefe de Gregory [Rodchenkov] haya pasado de ministro de Deportes y lo asciendan a viceprimer ministro ruso, eso te demuestra como funciona el gobierno ruso.
-Mutko es hoy el responsable de la organización del Mundial. ¿Es creíble el programa antidopaje del Mundial? ¿Está en peligro?
-Creo que la pregunta más importante es si un país que se ha probado que ha orquestado tal fraude deportivo tiene derecho a organizar el Mundial. No se trata de dopaje o no dopaje, sino de fraude. Este tipo de prácticas fraudulentas que han corrompido el sistema deportivo mundial durante décadas no han sido castigadas. La pregunta es, si este sistema existía, y lo fue, y sabemos que eso es verdad, entonces ¿puede tener derecho de acoger a todos los países en el Mundial o a mandar gente a los próximos Juegos de Invierno. Esas son las preguntas más importantes, no tanto el tema de dopaje.
-¿Cuál es su opinión sobre el papel del presidente Putin en todo programa de dopaje?
-Mira, no sé si el papel de Putin está o no en el programa, o si personalmente estaba. Lo que creo, según Gregory, es que la orden era ganar a toda costa. Y creo que en Rusia eso esencialmente quiere decir que todo lo que puedas hacer para ganar está bien. No lo sé, pero creo que no era Putin el que mandaba directamente, pero la orden era ganar a toda costa. «Haz todo lo que tengas que hacer para ganar. No quiero saber cómo lo haces, pero hazlo».
-¿Cómo le afectó a Rodchenkov la muerte de sus dos colegas que podían tirar de la manta?
-Fue un asunto muy grave. Nikita Kamaev era una amiga íntima de Gregory y él no cree en absoluto que muriese de forma natural, sino que hubo juego sucio.
-Hace unos días el COI y la WADA fueron tibios sobre la actual posición de Rusia respecto al Informe McLaren sobre el sistema de dopaje en el país. ¿Cuál es su opinión?
-Mi opinión es obvia, la evidencia es evidencia y la prueba es la prueba, aunque si lo quieres admitir es otra cosa. Es como estar en un juicio por asesinato y tener el cuerpo presente, la sangre, la bala y el ADN; tienes cada prueba que necesitas para demostrar el asesinato y el asesino te mira a los ojos y te dice que no fue él, que él no lo hizo. Leo el New York Times y el ministro de Deportes ruso dice que es imposible que manipulasen los análisis de Sochi. No solo es posible, sino que se ha probado científicamente. No hay nada más que argumentar. Es como mirar un caballo y decir que no es un caballo. Que tú lo digas no quiere decir que sea la verdad. Lo que vemos en Rusia es que da igual las pruebas que se les presenten, porque ellos dicen que no es verdad. Así que es increíble porque nadie asume responsabilidades de lo que realmente ocurrió.
«China ha tenido un sistema parecido durante años y hay gente que ya sale a contarlo»
Fogel es muy crítico con los tímidos pasos que está dando Rusia para homologar su sistema antidopaje. «Nunca ha habido antidopaje en Rusia, así que la idea de reintegrar algo que nunca existió es problemática. Su sistema fue ‘anti anti dopaje’. El sistema que utilizaban era fraudulento».
-¿Dónde está el disco duro que le entregó Rodchenkov al llegar a Estados Unidos?
-Todo ha sido entregado a los que debían tenerlo. No tenemos más pruebas en nuestro poder. Hace tiempo que se entregaron todas las pruebas a la WADA, al FBI y a todos los que están investigando.
-¿Cree que la WADA debería ser más contundente en sus decisiones sobre Rusia, con una recomendación sobre la ausencia de Rusia en PyeongChang?
-No tengo las respuestas de lo que ellos deberían hacer o no. Lo que sí sé es que ha habido un fraude enorme. Y que este fraude aún no ha sido castigado. Pero yo no tengo la respuesta sobre qué es lo correcto. Eso depende del Comité Olímpico. Creo que hace falta credibilidad y no la hay. Y si los Juegos no van a asumirla, por un fraude así, creo que te tienes que preguntar cuál es el objetivo, qué sentido tiene hacer las Olimpiadas si no tienen credibilidad las reglas actuales.
-¿Qué otro país podría estar ahora desarrollando un programa de dopaje de estado? ¿Sospecha de alguno?
-Creo que China.
-¿Incluso ahora?
-No lo sé, pero por lo que me han contado China sin duda ha tenido un sistema parecido durante años y hay gente que sale a la luz a contarlo, pero yo no estoy metido en eso. La historia que seguí yo fue la de Rodchenkov.
-¿Se siente seguro? ¿Ha tenido alguna amenaza?
-No estoy en peligro. Espero estar bien. La historia me encontró a mí y yo soy el mensajero de la historia, pero yo no tuve nada que ver con el escándalo del fraude en sí, yo era un periodista de investigación que ayudó a descubrir la historia y contarla al mundo. Yo no estaba trabajando en el laboratorio.
-¿Cuál fue la última vez que estuvo con Rodchenkov?
-Me prohibieron contactar con él hace tiempo. Si sigues las noticias, Rusia ha pedido que Estados Unidos extraditen a Rodchenkov y lo han denunciado allí en Rusia. Así que yo no me comunico con él desde hace tiempo y no he podido verlo desde que entró en el programa de protección de testigos.