Con solo 18 años está asombrando a Europa con su fútbol, así es la nueva estrella del fútbol luso
01 jul 2016 . Actualizado a las 19:17 h.Renato Sanches ya le ha arrebatado varios récords a Cristiano Ronaldo. Ha logrado que los focos le apunten más en las últimas horas que a la estrella del Real Madrid y, con 18 años y 317 días, se convirtió el jueves en el futbolista más joven en marcar en un partido a vida o muerte de la Eurocopa, y en el más precoz de las «Quinas» en estrenarse como titular y anotar. Antes, Sanches le había quitado a CR7 otro registro: el de jugador más joven en ser convocado a la selección absoluta para una fase final de competición, ya que llegó a la Eurocopa con 18 años y 10 meses, frente a los 19 años y 4 meses que tenía Cristiano Ronaldo. Las cifras oficiales desmienten a quienes cuestionan su edad y afirman que su padre, emigrante a Francia, le inscribió en el registro civil ya con cinco años.
El centrocampista de origen caboverdiano ya emergió como figura clave al entrar en la segunda parte y revolucionar el choque de octavos ante los croatas, pero ante los polacos fue determinante. Se echó al equipo encima, anticipó, tuvo descaro, desborde, anotó el gol del empate de un gran zurdazo, a pesar de ser diestro, y fue valiente para lanzar el segundo penalti de la tanda, nada menos que tras Cristiano. Lidera los parabienes tras ingresar Portugal entre los semifinalistas del certamen por cuarta vez en las últimas cinco ediciones.
Tras ser elegido por segunda vez por la UEFA el mejor jugador de un partido, a Renato le costaba hablar con fluidez. «Estoy feliz y sólo quiero disfrutar del momento. El míster me dijo que estuviera calmado, que hiciera lo que sé. Defender bien, llevar el balón arriba y moverme mucho. Confiamos en nosotros, vamos a descansar y queremos conseguir el título», afirmaba en las tripas del Vélodrome marsellés. ¿Premios individuales?: «Lo importante es el grupo. Sin los compañeros, nada sería posible», subrayaba con cara más de adolescente que de adulto.
Por la zona mixta, se pasea como un rapero. Se quiere parar ante los periodistas, pero tuerce su rostro amable y dice que no le dejan. Tapa sus rastas con la capucha del abrigo; si no fuera porque que viste la ropa de marca, su aspecto sería de desarrapado. No esconde sus orígenes, en el suburbio lisboeta de Musgueira y su crecimiento en las Aguilas, un club de la zona donde se forman a los niños necesitados. Ya con 10 años, se lo llevó el Benfica, previo pago de 750 euros y 25 balones.
«El Bule», apodado así por ser tan resistente como los antiguos cazos para hervir el agua, trata de mantener los pies en el suelo, aunque en menos de lo que dura un parto ha transformado su vida. De ser juvenil en el gran club lisboeta, a ser internacional absoluto y fichar por el Bayern de Múnich de Carlo Ancelotti. Su cláusula liberatoria era de 80 millones, pero los bávaros han pagado 35 fijos, más al parecer los otros 45 en variables en función de partidos jugados, rendimientos y títulos durante toda su estancia en el campeón alemán.
Quemar etapas Sus colegas de selección le miman, le alaban, pero piden máxima prudencia para que vaya quemando etapas sin que se le suba el éxito a la cabeza. «Renato ha tirado del equipo en los dos últimos partidos. Tiene un gran margen de progresión y muchas cosas que ofrecer a lo largo de un futuro en la que debe crecer», expone el veterano técnico Fernando Santos. «Su potencial es enorme y las cualidades las demuestra en el campo, aunque aún debe de ser más organizado. Es inmune a la presión, ya que de lo contrario no estaría entre los 23 convocados», apostilla. «Hablamos de un niño que está comenzando. Juega muy bien, es muy bueno y su capacidad de progresión es excelente, pero le falta aún todo el camino por recorrer», sostiene el veterano Nani, que nos dedica una sonrisa cómplice al preguntarle por el Valencia, aunque el extremo del Fenerbahce dice que por ahora sólo piensa en Portugal.
«Es el pequeñín del equipo, pero le sobran ganas y fuerza. Todos le intentamos ayudar. Este es un grupo muy fuerte en el que los veteranos sabemos transmitir nuestra experiencia a los jóvenes», sostiene el central José Fonte. El incombustible Ricardo Carvalho, suplente frente a los polacos, cree que en este juego «da igual la edad». «Renato entra en el campo y aporta su intensidad al equipo», celebra. A partir de ahí, «paciencia» y «proteger» para no volver loco a esta figura que en apenas un año cambiará el arrabal por Múnich, capital de la gran Baviera. Salvo que el largo verano proyecte un movimiento estrella, en el Bayern coincidirá con el bombardero Robert Lewandowski, ariete que abrió el marcador en Marsella. Podrá decirle que un día le eliminó de la Eurocopa. Sanches parece seguirle los pasos a Ronaldo y está llamado a ser su sucesor, como cuando Cristiano dejó el Sporting de Lisboa para irse también con 18 años al Mánchester United. Cabe pensar que le apasiona el 'reggae', y se le compara con los holandeses Clarence Seedorf y Edgard Davids, exestrellas en la zona de creación de Holanda. El 'Bule' lidera la revolución lusa en Francia.