Stephen King vuelve al delicioso terror

CULTURA

Carlos Osorio | REUTERS

El maestro nos ofrece doce relatos excelentes que se adentran en la espantosa oscuridad

28 sep 2024 . Actualizado a las 11:54 h.

Los lectores constantes (como él nos llama) de Stephen King, esos que toleramos su vena de fantasía pero añoramos que nos ponga los pelos de punta mientras nos hace sentir un escalofrío por la espalda, estamos de enhorabuena. El maestro vuelve con un volumen con doce relatos que se adentran en la terrible oscuridad y que reflejan también su camino hacia la vejez (el 21 de este mes cumplió 77), así como las reflexiones que la mayor proximidad al más allá generan en su loca cabeza. Hay muchas grandes historias en este volumen que merece ser leído de cabo a rabo, pero si tengo que escoger, me quedo con dos: El mal sueño de Danny Coughlin y Serpientes de cascabel.

La primera, escrita en 68 microcapítulos, mantiene un ritmo narrativo acelerado que nos induce a esperar una catástrofe inminente y nos altera el pulso. El núcleo de la acción se basa en la parcialidad de la justicia y la angustia del que es acusado de un delito que no ha cometido. Un comisario Jalbert, muy al estilo del Javert de Los miserables, encarna la vileza del poder mal ejercido y la persecución vengativa. Claro que también nos muestra un mundo sobrenatural y nos anima a creer o por lo menos dudar. Se devora.

Un pozo de serpientes

En cuanto a Serpientes de cascabel, baste decir que es una secuela de una de sus obras más polémicas: Cujo. La de aquel perro san bernardo al que un murciélago contagia la rabia... ¿te acuerdas? En el caso de que no la hayas leído hazte de inmediato con un ejemplar. La nueva historia trata, entre otros delicados asuntos, de unos gemelos de 4 años que caen en un pozo de serpientes de cascabel. Casas encantadas, la pandemia del covid, la vida en Florida y también matrimonios de larga duración completan este universo de terror. King nos sirve una pieza exquisitamente inquietante preparada para disfrutar y sufrir. Y hay otras diez más.