Kate Winslet explica cómo fue grabar la escena del beso de «Titanic» con Leonardo Dicaprio: «Fue un desastre»
CULTURA
Aunque la película cuenta una historia de amor épica, la actriz británica recuerda algunos momentos del rodaje como «una pesadilla»
15 jun 2024 . Actualizado a las 09:25 h.«No me extraña que todas las jóvenes del mundo quisieran ser besadas por Leonardo DiCaprio», bromea Kate Winslet revisando la mítica escena del beso en la proa del Titanic para la revista Vanity Fair. Su historia de amor se convirtió en una de las más míticas de la historia del cine, pero para la actriz británica grabar esa escena en concreto «fue un desastre».
Hace 27 años desde que se estrenó la película. En ella pudimos ver a los jóvenes actores — durante el rodaje Winslet tenía 22 años, DiCaprio, 23 — interpretando una pareja totalmente enamorada. Pero Kate admite ahora que grabar esa escena y besarse con DiCaprio no fue el mejor momento de su vida. Aunque no culpa a su compañero de reparto, «Dios mío, Leo es todo un romántico...», admitió, sino al maquillaje. «No fue tan bueno como parece. Nos besábamos, y seguíamos besándonos, pero yo tenía un maquillaje muy pálido, él muy moreno y nos revisaban continuamente, y al final parecía como si hubiera estado chupando una barrita de chocolate con caramelo», confesó.
Tuvieron que repetir la toma varias veces para que todo saliera perfecto. «Fue una pesadilla», recuerda Kate Winslet, mientras mira la escena con cariño. Por un lado, «Leo no podía parar de reírse» y por otro el director, James Cameron, quería una luz muy específica, obviamente y las puestas de sol no paraban de cambiar, así que tuvieron que repetir la escena cuatro o cinco veces.
Además, la zona donde se encontraban para grabar era de difícil acceso. Winslet recuerda que se golpeó la rodilla contra la barandilla varias veces en ese espacio. «Estábamos en una sección que no era parte del decorado del barco real que teníamos», explicó. Por lo que el equipo de maquillaje y peluquería no podía llegar hasta ellos. «Teníamos que subir a una escalera para llegar hasta esa zona». Kate fue la encargada de guardar lo poco que pudo esconder tras su vestido para arreglarse, y lo mismo con el maquillaje de DiCaprio.
De hecho, Kate Winslet describió el rodaje de esta escena como una «pesadilla», porque DiCaprio «no paraba de reírse» y porque ella «no podía respirar con ese maldito corsé» que llevaba. Pese a todas estas molestias, la actriz termina admitiendo que para ellos fue bastante divertido, y que terminaron riendo y cubiertos con el maquillaje del otro. A pesar de todo, Kate Winslet guarda un buen recuerdo de los días de grabación y de su compañero de reparto con el que mantiene una gran relación.