La británica ha fallecido a los 81 años en su casa de Clapham, al sur de Londres
30 dic 2022 . Actualizado a las 14:26 h.La diseñadora Vivienne Westwood ha fallecido este jueves a los 81 años en su casa de Clapham, al sur de Londres, según han dicho sus representantes en un comunicado publicado en su cuenta de Twitter. La británica será recordada en el mundo de la moda por sus diseños innovadoras y atrevidos, su actitud inconformista y como referente icónico de la estética punk del Reino Unido.
Transgresora, rebelde y ferviente defensora del medio ambiente, Vivienne Isabel Swire, conocida como Vivienne Westwood, fue la artífice principal de la estética punk y New Wave en este país y con frecuencia llevó al extremo provocadoras creaciones que nunca dejaron indiferente al exigente sector de la moda.
Nacida en el condado inglés de Derbyshire el 8 de abril de 1941, la modista tomó su apellido de Derek Westwood, con quien se casó en 1962 y tuvo a su hijo Ben, y a quien dejó tras conocer a Malcolm McLaren, el que fue representante del emblemático grupo de punk Sex Pistols y «un hombre cosmopolita y muy atractivo», de cuya unión nació Joseph.
En ese momento, Westwood trabajaba en una escuela de primaria al tiempo que fabricaba y vendía joyas en un puesto del popular mercadillo londinense de Portobello.
Con McLaren fundó en 1971 una boutique con la que el creativo tándem revolucionó la formar de vestirse, y que adoptó sugerentes y sucesivos nombres como «Let It Rock», «Too Fast To Live», «Too Young To Die», hasta un enorme letrero de neón rosa renombrado como «SEX». Ese local sirvió como primera plataforma para que Westwood comenzara a exponer sus extravagantes diseños.
Inspirada en el estilo «motero», las prostitutas o el fetichismo, esa estética empezó a calar tras el primer concierto de los Sex Pistols, donde los músicos vistieron diseños de la pareja.
En esos atuendos abundaban las cadenas, los alfileres de gancho cadenas o las cuchillas de afeitar y, junto a otros factores procedentes del estilo más convencional británico, dieron lugar al «look» antisocial y transgresor irremediablemente ligado al punk.
Aún se recuerda el desfile de 1979 en el London Olympia, donde Westwood y McLaren lanzaron su elogiada colección «Piratas», que se convirtió en referente del llamado «New Romantic Look».
Es en los 80, tras su separación de McLaren, cuando el nombre de Vivienne Westwood empieza a ser tomado en serio, sobre todo porque sus originales ideas fueron adoptadas por diseñadores consolidados como Karl Lagerfeld, Jean Paul Gaultier o Lacroix.
La prensa de todo el mundo no escatimó en elogios a la modista británica, considerada una de las diseñadoras más vanguardistas del siglo pasado.
Durante las últimas dos décadas, Westwood ha estado unida al fotógrafo austríaco Andreas Kronthaler, 25 años menor que ella y con quien se casó en el ayuntamiento de Wandsworth (Londres) en 1992 porque «entonces Austria no formaba parte de la Unión Europea (UE) y Andreas no podría haberse quedado en este país».
Aunque hace años renegaba de la monarquía británica, sus opiniones han variado hasta derrochar elogios al príncipe Carlos por sus esfuerzos medioambientales y fue condecorada en 1992 por la reina Isabel II con un OBE (Orden del Imperio Británico), mientras que en 2006 fue nombrada «Dama».
Mejor diseñadora británica en 1990, 1991 y 2006, Westwood, que llegó por primera vez a Londres con 17 años «sin conocimientos culturales», ha despotricado en ocasiones de la moda por «no ser muy intelectual» y ha llegado a afirmar que no se siente «cómoda» defendiendo sus propias creaciones.
En su marcada faceta como activista por el medio ambiente, Westwood presentó su iniciativa «Climate Revolution» durante la gala de clausura de los Juegos Paralímpicos de Londres de 2012 y apoyó a la organización benéfica «Cool Earth», fundada en 2007 por el diputado laborista Frank Field para preservar los bosques.
Luchó además contra la polémica técnica de extracción de gas conocida como fracking; en 2014 se afeitó su llamativa melena naranja por una campaña ecológica y ha citado como a «una de las personas más importantes del planeta» a James Lovelock, autor de la «Teoría Gaia», que sostiene que la tierra funciona como un súper organismo vivo.
En una entrevista con un diario británico en 2012, Vivianne Westwood aseguraba que le gustaría poder vivir «otros 20 años» para saber qué ocurrirá con el medio ambiente.