Cesc Gay entiende la comedia con una sutileza poco usual, sin negarle el paso al drama
27 nov 2022 . Actualizado a las 12:00 h.Lo jugosas que resultan las situaciones embarazosas, desde las meteduras de pata, y el «tierra trágame», los «mejor calladito» y «por ahí no sigas que la lías». En resumen, cuando somos incapaces de controlarnos y acabamos ciscándola, inevitables peajes de la condición humana. Todo eso, con la ayuda de un muy lucido reparto de señores actores y señoras actrices (tengan más o menos trayectoria por cosa de la edad), y un guion afinado, confirman a Cesc Gay (Barcelona, 1967) entre lo más lúcido del cine español, como ya demostró en sus más recientes Truman (2015) y Sentimental (2000), y que entiende la comedia con una sutileza poco usual sin negarle el paso al drama, léase, como la vida misma.
Así como su fidelidad a la estructura, al modo y a las maneras de pantalla grande, evitando la desvergüenza sitcom televisiva en eso de la risa. Que te hayas fumado la película sin una sola ojeada al reloj, atrapado entre diálogos repartidos en cinco historias en apariencia autónomas pero conexas (con sus correspondientes títulos), equivale a un pleno poco usual.
El espacio es Barcelona y algunos de sus barrios por los que se mueven los protagonistas representativos de una clase media (aunque guay y tal, algo venida a menos) con la que es fácil identificarse gracias al buen trazo de los personajes. El riesgo de un producto así es su desequilibrio, con tramas mejor redondeadas o quizá más agradecidas.
La mujer que descubre que ya no ama a su marido cuando toca a su vecino; el poeta maduro (Coronado) que se liga a una joven a la que casi triplica en edad y se descubre en medio de un engaño cruel; el tipo que descubre una foto en París que cree comprometida y se come el coco a la tremenda; la pareja moderna empeñada en que un amigo separado ligue una noche; y la más ácida y desvergonzada: la de tres actrices corroídas por la envidia pero que se dicen amigas y coinciden en un casting, a las que visten Maribel Verdú, Nora Navas y Alexandra Jiménez, quizá la actriz más en forma ahora mismo, magnética ante la cámara y que a este crítico le pierde.
HISTORIAS PARA NO CONTAR
España, 2022. Director: Cesc Gay. Intérpretes:Chino Darín, Antonio de la Torre, Javier Rey, Anna Castillo, María León, Alexandra Jiménez. 99 min.
