Detrás de una gran miniserie hay un gran libro

CULTURA

Es una ley que se cumple (con excepciones) también con las series. La mejor literatura prende en pantalla. ¿Prefieres ver o imaginar?

07 feb 2021 . Actualizado a las 10:15 h.

Toda ley tiene una excepción, o un repertorio que la sostiene impidiéndole que se vuelva inflexible. Echando un vistazo a muchos de los éxitos de la televisión en serie o a la carta, podemos afirmar que detrás de una buena miniserie hay un buen libro. Y con series como El cuento de la criada, Fariña, Drácula, Sherlock o La catedral del mar la máxima se cumple igual. Quizá Los Bridgerton, la más vista de la historia en Netflix, podría ser una excepción. Nos quedamos antes con los actores, con todo ese «bonus track» de escándalo, y la banda sonora que con las novelas de Julia Quinn. Siendo generosos, ponemos en ocho episodios el tope para hablar de miniserie. Leer o ver, esa es la cuestión. Y en los casos que siguen ninguna de las decisiones será equivocada.

Patria es de las grandes, ocho episodios en los que Elena Irureta y Ane Gabarain (y el resto del reparto) nos estremecen haciéndonos sentir el plomo de la fractura social. La gran novela de Fernando Aramburu está detrás de la serie que parte de un crimen que nos recordará a muchos de los años de plomo en el País Vasco. La herida del fanatismo, el terror y el silencio durante más de tres décadas se aclaran en la novela y en la serie de HBO.

Gambito de dama fue el éxito sorpresa para despedir del 2020 sobre el tablero de la ficción en streaming. La serie, protagonizada por una hipnótica Anya Taylor-Joy (Peaky Blinders, Emma, Endeavour), no inventa sola al prodigio del ajedrez Beth Harmon, que viene ya de la novela de Walter Tevis. En libro o miniserie (la más vista de Netflix el pasado otoño), seguimos la peripecia de una niña huérfana para convertirse en la mejor jugadora de ajedrez del mundo mientras lucha con su dependencia de las drogas y su infierno interior. La historia permite volver al bello y atroz estilo de vida de los 50, y es una jugada maestra que inaugura un filón. Alfaguara publicó Gambito de dama este mes de enero.

Para thillers oscuros, ágiles, trepidantes, con un paisaje y un lenguaje que empapan, El desorden que dejas es uno de los que se llevan el gato de nuestra curiosidad al sofá. Netflix estrenó el 11 de diciembre esta serie basada en la novela de Carlos Montero que ganó el Premio Primavera 2016. Un crimen (o más...), un Novariz ficticio pero reconocible y asfixiante, y actores en estado de gracia nos ahogan en esta intriga que dinamita fronteras entre las aulas de un instituto y los «pazos» del mundo adulto poniendo el dedo en la llaga del acoso y los abusos. La belleza de Galicia compensa su dureza.

Olive Kitteridge es, en cuatro episodios en HBO, una serie perfecta. Contribuye a su singularidad sin estridencias la interpretación de Frances McDormand (Fargo, Tres anuncios a las afueras) y Richard Jenkins (The Visitor, La forma del agua). Está basada en la novela homónima de la Pulitzer Elizabeth Strout y decir que nos asoma a la vida de una profesora madura que trabaja en un pequeño pueblo de Maine y está casada con Henry, un farmacéutico de buen corazón, no es nada, o como advertir que Devs es una «serie de programadores». El valor humano de Olive (McDormand) convierte esta novela y su miniserie en una joya atemporal.

Recursos inhumanos, de Pierre Lemaitre, que protagoniza en seis episodios en Netflix Eric Cantona, está merecidamente en el top de las producciones francesas recientes. Bienvenidos al voraz mundo de la empresa, donde uno es capaz de cualquier cosa (sin despeinarse) por lograr el resultado laboralmente más óptimo. Brutal la adaptación de Ziad Doueiri (Baron Noir), que dibuja una sociedad deshumanizada sin salida cabal.

Unorthodox se ve en cuatro horas y no se olvida. Es la historia real de Deborah Feldman, también palpable en el libro Unhortodox: Mi verdadera historia. Un estricto código rige la identidad (ropa, lecturas, relaciones...) de Deborah hasta que atisba que es posible otra vida fuera de la comunidad de judíos ultraortodoxos del barrio de Williamsburg donde se crio. Nos acerca a un mundo desconocido para la mayoría. Unorthodox, escribir estas memorias, fue la manera de Deborah Feldman de escapar, de elegir.

La lista es larga, pero podemos poner el punto con El perfume. Aroma letal en seis episodios que van más allá de la novela de Süskind. La serie escoge otro camino, macabro y fascinante. Para gustos... Philipp Kadelbach, ganador de un Emmy, es el director de esta adaptación libre que huele como el libro pero aterra aún más.