Sheila Cremaschi, dice que el premio es «lo máximo» que le podía ocurrir al festival

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Sheila Cremaschi
Sheila Cremaschi

La directora del Hay Festival de Segovia destaca lo que el certamen ha hecho por la España vacía

09 jun 2020 . Actualizado a las 17:09 h.

La directora de la edición española del certamen internacional Hay Festival, galardonado con el Princesa de Asturias de Comunicación y Humanidades 2020, Sheila Cremaschi, ha expresado este martes que la concesión del prestigioso premio es «un triunfo de todos los segovianos».

En una entrevista con Efe, Cremaschi se ha mostrado «muy contenta» con la noticia porque, en su opinión, es «lo máximo» que le podía ocurrir al festival: «Ya me tengo que jubilar después de esto», ha bromeado.

El certamen literario, originado en 1988 en un pequeño pueblo galés que se convirtió en un encuentro anual de literatos y artistas de todo el mundo, comparte el galardón con La Feria Internacional del Libro de Guadalajara (México), considerada la más importante del mundo de habla hispana.

Hay Festival celebra desde 2006 certámenes similares al original en otras ciudades del mundo como Cartagena de Indias (Colombia), Querétaro (México), Arequipa (Perú), Abu Dabi (Emiratos Árabes Unidos) o Segovia.

La directora de la edición española ha mostrado su agradecimiento a los vecinos e instituciones de Segovia por el apoyo al certamen desde que llegó a la ciudad en 2006 para convertir esta localidad y, por extensión, a toda Castilla y León en «un lugar de encuentro democrático, reflexivo y de pensamiento».

A este respecto, Cremaschi ha destacado los esfuerzos de la organización en aquel entonces: «A la gente se le ha olvidado pero, hace 17 años, cuando íbamos a Segovia a organizarlo, el tren demoraba 2 horas y 50 minutos para llegar, necesitábamos cinco horas de tren al día», relata.

«Segovia formaba parte de la España de la que tanto hablan ahora», ha señalado la directora, en una referencia al reto demográfico y la falta de recursos del medio rural.

En este sentido, la organizadora ha puesto en valor la ciudad, localización que, a su juicio, tiene «una belleza y una de las escenografías más bonitas del mundo».

Por ello, uno de los objetivos principales de emplazar al público en esta localidad, no es sólo que disfruten de los encuentros con los artistas internacionales que participan cada año del Hay Festival, sino también «invitarles a pasear por la ciudad».

Cremaschi ha destacado el mérito del evento al haber conseguido este prestigioso reconocimiento a través de un formato que invita a las personas a «pensar», «reflexionar» y «juntarse para escuchar a filósofos», en lugar de ofrecer «espectáculo»: «Somos diferentes», ha reivindicado la responsable del evento.

Según ha apuntado la directora, este espacio de reflexión será fundamental este año, por los cambios vitales adquiridos como sociedad a raíz de la crisis sanitaria del coronavirus.

Tanto es así que, según ha adelantado la directora, uno de los temas obre los que versará la edición este año será «la celebración de la naturaleza», una cuestión que, a pesar de haber sido ideada en enero, encaja a la perfección con las revelaciones sobre el impacto de la sociedad en el medio ambiente surgidas durante la pandemia.