Cientos de personas han desfilado ya por la capilla ardiente instalada sobre el escenario del teatro Jovellanos para testimoniar su pesar y su homenaje al artista gijonés
05 jul 2019 . Actualizado a las 20:32 h.«Adiós, chatín» «Arturo, chatín, irrepetible». Las despedidas murmuradas por dos de los primeros visitantes de la capilla ardiente de Arturo Fernández mientras depositaban un beso en sus manos y las manos en el féretro resumen en cuatro palabras el sentimiento de los cientos de paisanos del actor gijonés que ya han desfilado por el escenario del teatro Jovellanos. Decenas de personas esperaban desde la una y media de la tarde y bajo un sol verdaderamente ardiente el momento en el que, pasadas las 16,00, se abrieron las puertas para la última representación del artista fallecido la madrugada de ayer en Madrid; su propia despedida del teatro del mundo en el lugar que fue el mundo para él: un escenario.
Dentro, aguardaban ya flanqueando el féretro envuelto en una bandera de España y un retrato clásico del actor su viuda, Carmen Quesada, la alcaldesa de Gijón, Ana González, y representantes de los grupos político en el Ayuntamiento de Gijón y la Junta General del Principado. Previamente, todos ellos habían guardado un minuto de silencio en pleno Paseo de Begoña, secundados por la mayor parte de las personas que aguardaban en las colas y los viandantes. Los ciudadanos han comenzado a desfilar en una hilera cada vez más concurrida en la que algunos se limitaban a pasar ante los restos, otros lo rozaban con sus dedos y musitaban alguna despedida, los más inclinaban la cabeza en señal de duelo y no pocos se atrevían a sacar una fotografía con sus móviles. Algunos también se han aproximado hasta Carmen Quesada -serena y sentada junto a la alcaldesa- para transmitirle personalmente sus condolencias. Posteriormente han llegado al Jovellanos la primera mujer del actor, Isabel Sensat, o el presidente del Principado en funciones, Javier Fernández.
Este último ha agradecido al actor que pasease «por todos los escenarios el nombre de Asturias y su asturianía», además de su vinculación con Gijón, su ciudad natal, según recoge Europa Press. Ha resaltado, asimismo, que era una persona que tenía «mucha energía» y «un gran actor», con una trayectoria de éxitos y muy vinculada a Asturias. Por este motivo, ha remarcado que este es un mal día, por lo que manda hacerle una adecuada despedida.
Los visitantes están circulando con fluidez en el acceso al escenario, pero los tapones empezaron pronto a producirse a final del recorrido, en el vestíbulo, donde esperan varios libros de firmas que muchos están utilizando para transmitir su adiós personal a Fernández. Las colas han crecido también de forma espectacular fuera del teatro a lo largo de la tarde. Es de suponer que el río de vecinos y admiradores no cese hasta el cierre de la capilla ardiente, a eso de las 22,30. Todo hace presagiar que el funeral por Arturo Fernández, previsto para las 17,00 de mañana sábado en la Iglesia Mayor de San Pedro, será multitudinario.