El actor ovetense analiza su papel en la película, que se estrena el viernes, y su trayectoria profesional
22 jun 2017 . Actualizado a las 17:05 h.Santiago Alverú, joven actor ovetense, estrena en cines su primera película como protagonista, Selfie, dirigida por Víctor García León y producida por Jaime Gona. Entre eventos y presentaciones, Santi,contesta a unas preguntas sobre su carrera. Porque Santi es muchas cosas: actor, cómico, emprendedor, un verdadero showman y una cabeza inquieta. Sigan sus pasos, porque este joven de sonrisa ancha, flequillo al bies, barba moteada y empeine blanco va a a dar mucho que hablar.
Selfie es una película que busca sacar la sonrisa después de todo lo que ha soportado el pueblo español: crisis, corrupción. Narra las historias y peripecias de Bosco, un joven cachorro de la derecha, un pollopera que se ve en la miseria tras la imputación de su padre por corrupción.
-¿En qué se parecen y en qué se diferencian Santi y Bosco?
-Más que parecernos, Bosco es lo que yo he dejado que sea, con mediación de Víctor García León. Al interpretar, decides qué vuelcas en tu personaje y qué no. Mucho de mi capacidad para improvisar, de mis experiencias o por supuesto, de mi pijerío, está ahí. Es un primer papel y era la forma más natural de abordarlo. Pero Bosco es una creación, y nada más. Nace de un guión que ya lo había pensado antes de que yo llegase. Ah, y la ropa. La ropa es mía. Y el tío viste que te cagas, claro.
-Es su debut como actor. ¿Qué le llevó a dar el paso y ponerse frente a la cámara? ¿Cómo surgió la oportunidad?
-Siempre he hecho monólogos y algún vídeo de humor. Todo esto llega al director y a la directora de cásting por casualidad, a través de un profesor de mi universidad. Ellos buscaban a un actor que añadiese naturalidad al personaje. Me hicieron un par de pruebas y confiaron en que yo podría entender lo que proponían. Y cuando tienes esa confianza de profesionales como estos, por supuesto accedes. Además no puedo estar quieto, ya lo sabes.
- La película es una comedia sobre la crisis y la corrupción, un tema muy presente aún y que ha hecho mucho daño. ¿Ve a la sociedad preparada para comprender y disfrutar la película?
-De hecho creo que es el momento justo. Todos los géneros tienen un momento de nacimiento y de zénit, y creo que el cine sobre la crisis ya ha pasado ese momento. Quedarán películas buenísimas por hacerse, sin duda, pero ahora llega el turno de la comedia, de la parodia. Selfie es al cine de la crisis (y salvando las distancias) lo que Sillas de montar calientes al Western. Más o menos. Digo yo.
-Selfie ha arrasado en festivales, frente a críticos, hasta Jabois le ha dedicado una columna. ¿Vencedores en los Goya?
-Para nada. Nos vemos en los Oscars directamente. De hecho hablamos todo el rato de ello en nuestros jacuzzis de champán.
-Entre triunfar ante la crítica o en las taquillas. ¿Por qué se decanta?
-Vin Diesel, Haneke, Garci, Von Trier y cualquier persona que se dedique a esto se decantaría por lo segundo y no únicamente por motivos económicos. La crítica ha acogido esta película con mucho cariño y eso es excepcional. Además a mi me hace particular ilusión: siempre he escrito sobre cine, la crítica me ha servido siempre para acercarme a los estrenos de forma activa y pasiva. Estamos, de verdad, muy agradecidos. Pero por supuesto, hemos hecho esta película para entretener. Esa es la última finalidad de todo esto y no debemos olvidarlo. Que la gente vea Selfie y se divierta es lo más importante.
-Es un hombre polifacético: creador de los Premios YAGO; dirige YONLOK; escribe en Cinemania; triunfó con su antiguo blog, Semejante Ramera; hace monólogos. ¿Qué es lo próximo que tiene en mente?
-¡Muchas gracias! La verdad es que ahora he empezado a trabajar en un agencia y consultoría dedicada al mundo de la gastronomía (Brandelicious) y estoy aprendiendo muchísimo. Estoy acabando un máster en Gestión de Empresas de Comunicación por la Universidad de Navarra. Pensando también en la cuarta edición de los Yago. Y seguro que se me ocurrirá algo después del verano.
-Su cara aparece en autobuses, marquesinas, muppies. ¿Ha catado ya las mieles de la fama o sigue ligando lo mismo?
-Es que en realidad la fama, hasta donde yo sé, únicamente te facilita un primer acercamiento. Luego el resto es actitud, y por mi parte sigue siendo la misma. Así que ligo lo mismo (muchísimo).
-¿Opinión de la situación actual del cine en España? ¿Y de la cultura?
-Bum. Creo que hay muchos problemas: de comunicación, de apoyo, de educación… pero es un debate muy amplio. Deberíamos consolidar una tradición de respeto hacia nuestro cine y nuestra cultura, desde el público y desde las instituciones.
- Santi es un enamorado del cine. Dígame algunos de tus referentes.
-Para este papel poco he podido utilizar más allá de fijarme en las Kardashians y algún hijo de extesorero, pero no son referentes, desde luego. Como espectador Albert Finney es mi actor favorito, soy un enamorado de El Señor de Los Anillos y un ávido consumidor de comedia norteamericana: Louis CK, Bill Blurr, Dave Chappelle, Jerry Seinfeld… Me encantaría hacer en España algo parecido a las películas que nacen de Saturday Night Live. De hecho Selfie puede tener algo de ello, por cómo está construido el personaje de Bosco.
-Para ir terminando, unas facilitas. ¿Camisa o camiseta?
-Camisa casi casi siempre.
-¿Cowboys de Medianoche o La Cultureta?
-Cowboys.
-¿Sidra, cerveza o vino?
-Cerveza.
-¿En qué fiesta de prao ve antes a Bosco? ¿Y en cuáles le veremos?
-A Bosco en ninguna, sería el típico pijo aburrido de Asturias que veranea fuera el muy imbécil. Yo espero estar en varias, sobre todo porque si no, como bien sabes, nuestro grupo juzga sin piedad a los prófugos. Lastres y el Xirin son mis preferidas.
-Para cerrar, cómo convencería a los lectores para que vayan a ver Selfie.
-El que busque una comedia con la que pasárselo bien y estar fresquito en el cine, la tiene. Quien quiera una película para debatir a la salida, con su familia o amigos mientras cena, también. Quien quiera palos a la izquierda, los tiene y muchos. Quien quiera tortas a la derecha, también. Es una película con la que reirse de toda la mierda que hemos soportado. Y la hemos hecho para que disfrutéis.