La secuela dirigida por Denis Villeneuve promete ser todavía más oscura porque «las cosas han ido a peor en estos años»
20 jun 2017 . Actualizado a las 07:49 h.Denis Villeneuve dirige la secuela Blade Runner 2049, que transcurre treinta años después del filme original y muestra un mundo donde «las cosas han empeorado, los personajes están más aislados y el entorno es todavía más tóxico», según explicó ayer su protagonista, Ryan Gosling. El equipo de la película, que se estrenará el próximo mes de octubre, visitó Barcelona para promocionar el largometraje ante los distribuidores europeos reunidos en el congreso Cine Europe, que se celebra esta semana. El actor explicó que el nuevo largometraje «continúa la narrativa» del filme original de Ridley Scott, que «dejaba muchas preguntas abiertas».
Gosling da vida al oficial K, un nuevo blade runner del departamento de Policía de Los Ángeles que inicia una investigación que le lleva a «hacerse muchas preguntas, algunas relacionadas con su propia identidad, tal como pasaba en la primera parte». «Mi personaje se toma muy personalmente la investigación», añadió. En su búsqueda de la verdad se encuentra con Rick Deckard (Harrison Ford), antiguo blade runner que lleva desaparecido 30 años.
Un filme negro
El director, Denis Villeneuve, aclaró que es una película «negra y detectivesca» como la primera, en la que se siguen las evoluciones de un policía que inicia una investigación que le llevará a «soñar con un mundo mejor». Si el filme de Ridley Scott ya era oscuro, la secuela promete serlo todavía más porque «las cosas han ido a peor en estos años» y la película muestra «un ecosistema que ha colapsado», según Villeneuve.