Alrededor de 800.000 volteos han sido necesarios para llevar el neumático desde Irún hasta Santiago de Compostela. Los fondos recaudados serán para el Instituto Oncológico
23 jul 2017 . Actualizado a las 17:39 h.Lo nunca visto en la historia de las peregrinaciones a Santiago. Al mediodía de hoy hicieron su entrada en el Obradoiro, triunfal como pocas y con un coro de ¡Sí, sí, sí, la rueda ya está aquí!, los esforzados del proyecto ReVuélcate 2017, que llegaron en 17 días desde Irún volteando una rueda gigante de tractor de 110 kilos de peso. Volteando, no rodando que es muy diferente. Unos 800.000 volteos, calcula el promotor de la iniciativa, Fran Linares, el esforzado y musculado propietario del gimnasio LinaresGym de Sotrondio que no puede ocultar la emoción al final de la aventura, realizada bajo el lema «Nunca no puedo» y a beneficio del Instituto Oncológico Universitario del Principado de Asturias y de la Federación de Fibrosis Quística.
Junto a su amigo Quico, Fran inició la aventura en Irún hace dieciesiete días y luego se les fueron sumando multitud de colaboradores por el Camino para ayudarles en el volteo. Pero ya piensan en superarse con alguna hazaña aún mayor. ¿Qué puede ser aún mayor que estos 800 kilómetros volteo a volteo de rueda gigante? «La idea es dejar esto pequeño», es la única y misteriosa respuesta de Fran.
Estos dos deportistas solidarios del valle del Nalón están curtidos. «Estamos reventados» pero la rueda de la solidaridad nunca para, señalaron cuando llegaron a la plaza de la Catedral de Oviedo, casi en la mitad de su reto. Llevaban recorridos más de 300 kilómetros a pie. Para este reto del Camino de Santiago, los organizadores de Re-Vuélcate ya han habilitado un número de cuenta en el BBVA (ES5201825130330201550600) en el que pueden hacer sus ingresos todas las personas que quieran colaborar a partir de este reto con la investigación contra el cáncer y la fibrosis quística.