La marea de pellets plásticos alcanzan la costa de O Grove

La Voz O GROVE / LA VOZ

CONTAMINACIÓN

Marcos Creo

Las playas de Pateiro y A Barciela recibieron las bolas blancas desperdigadas por toda la costa

05 ene 2024 . Actualizado a las 22:01 h.

El Concello de O Grove movilizó esta tarde a sus efectivos de emergencias tras la aparición, en dos playas de la localidad, de nuevos pellets plásticos procedentes del cargamento del buque Tocanao, que hace casi un mes sufrió la pérdida de seis contenedores, a la altura de la costa portuguesa. Según explican tanto la Policía Local como Emerxencias, el primer hallazgo se produjo en la playa de A Barciela, a las 15.19 horas. Allí se encontró un saco intacto que fue retirado fácilmente. El segundo aviso, procedente de una playa próxima, la de Pateiro, llegó a las 15.37. En este caso, las bolas estaban desparramadas sobre la arena.

La Xunta ha pedido la colaboración de los concellos para difundir la problemática a la que se enfrenta la costa, a fin de que la ciudadanía notifique cualquier hallazgo de este tipo de producto que realice. Podrá hacerlo llamando al número 112, o bien llamando a los servicios municipales «para que o concello de comezo ao informe de actuación de prevención, evitación e/ou reparación marcado pola Xunta de Galicia». Desde el Concello meco «rogamos a colaboración cidadá para informar da chegada deste tipo de residuo as costas do Grove, e poñer en marcha os protocolos, se non os detectaron os servizos municipais con antelación».

Primero, en A Illa 

No habían dado aún las cuatro de la tarde de este jueves cuando un vecino de A Illa, dando su habitual paseo diario, se encontró en la playa de Niño do Corvo, en A Illa, «con un saco intacto». Era uno de esos sacos cargados de unas bolitas de plástico blancas que en los últimos días no dejan de aparecer en la costa gallega. A través de este hombre, el hallazgo fue comunicado de inmediato a las autoridades: la Policía Local de A Illa acudió al lugar de los hechos, hasta donde se trasladó también personal de Gardacostas para llevarse el saco. Por su parte, la cofradía ha puesto en alerta a sus vigilantes frente a una eventual aparición de más de esas bolas.

Estos pequeños elementos fueron detectados por vez primera a mediados de diciembre en la playa de Espiñeirido, en la que confluyen los municipios de Ribeira y Porto do Son, y tras un período de relativa calma, la gran marea de bolitas de plástico blancas ha vuelto y se extiende sin control por todo el litoral de la ría de Muros-Noia. Los pellets, suaves al tacto y con un fuerte olor, similar al de la gasolina, proceden de un barco que perdió parte de su carga en el océano Atlántico, a la altura de Viana do Castelo. Como eran transportados en sacos dentro de un contenedor, se cree que estos fueron rompiendo paulatinamente y es ahora cuando se está produciendo el gran desembarco, por lo menos en Barbanza.

Después de que en la primera oleada llegaran a retirarse medio centenar de sacos todavía sellados en Espiñeirido, en los que aparecía impreso el nombre de Bedeko Europe, una empresa con sede en Polonia, el pasado miércoles volvieron a saltar las alarmas, cuando las bolitas empezaron a extenderse por Porto do Son, afectando especialmente a As Furnas y Boca do Río. En días sucesivos, los pellets hicieron acto de presencia en otros muchos puntos de la costa.