Laurina, futbolista del Real Oviedo femenino: «Jugarse todo en estas ocho jornadas es emocionante»
AZUL CARBAYÓN

Este domingo, el Real Oviedo femenino disputa un partido fundamental ante un rival directo por el ascenso como el Europa. La Voz de Asturias entrevista a una de las jugadoras clave del equipo carbayón
07 mar 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Han pasado ya diez años desde que Laura Gutiérrez, Laurina (Luanco, 2000) debutase con el Oviedo Moderno en la máxima categoría del fútbol femenino español. Ahora, pasar por el Real Betis y el Deportivo de la Coruña, es una de las piezas importantes de un Real Oviedo femenino que lucha por escalar en el panorama nacional. Quedan ocho jornadas y este domingo (San Claudio, 17:00 horas) las azules, segundas, reciben al Europa, líder del grupo. Un punto separa a ambos equipos, así que lo del domingo es partido grande. Dos días antes de la cita, LA VOZ DE ASTURIAS se sienta a charlar con Laurina en la grada del José Ramón Suárez Fernández, escenario del encuentro.
—¿Semana intensa?
—Son semanas importantes, se nota la tensión y esa responsabilidad que tenemos al enfrentarnos a un rival directo. Creo que, a nivel general, el ambiente está tranquilo. Sabemos qué equipo somos, llevamos trabajando muchos meses y no podemos cambiar eso esta semana. Aunque la tensión está, claro.
—¿Lo del domingo ante el Europa es una final?
—No, quedan suficientes partidos por delante como para pensar que lo del domingo es una final. Todos son importantes, ya lo estamos viendo. Ganamos al Athletic B y después no conseguimos sumar de tres en Avilés y Madrid. Esos puntos también son importantes, no solo los que en general la gente marca en rojo en el calendario.

—¿Cómo llega el Real Oviedo?
—Tranquilas. El otro día en Madrid queríamos la victoria ante el Atlético C y se nos atascó, aunque si no puedes ganar, empata. Eso lo hicimos. El equipo sabe en qué tiene que mejorar y en eso estamos.
—¿Qué partido esperan?
—Un partido de tú a tú, muy competido. Ya fue similar en Barcelona y seguro que se decide por pequeños detalles. Tienen jugadoras con experiencia, que llevan tiempo allí y que saben lo que se juegan. Veo un duelo muy intenso el domingo.
—¿Una de las claves de este final de temporada es afrontar el resto de partido de la misma forma que afrontan los duelos directos?
—Eso siempre es lo más complicado de todas las ligas en general. Según el rival, la jugadora tiene un nivel de activación diferente, es así, por eso debemos tener muy claro la responsabilidad que tenemos para con el proyecto. Sea el rival que sea, hay que meternos esa caña entre nosotras para que el fin de semana salga bien. No queda otra.
—Ocho jornadas por delante, esto se acaba en mayo. Queda muy poco.
—Intentamos no pensarlo, porque te digo de verdad que lo estamos disfrutando mucho. Vamos día a día y el ambiente de trabajo es fantástico, aunque evidentemente somos conscientes de que esta es una liga corta y que ya queda poco.
—¿El formato (solo asciende el primero y promociona el segundo) de esta Segunda RFEF es todavía más complicado que el de la Primera RFEF?
—El año con el Dépor fue bastante tranquilo porque, en general, fuimos superiores a los rivales y estuvimos siempre arriba. Aquí está todo muy apretado, estamos tres arriba desde el principio y esa tensión constante es difícil de gestionar, pero también es muy bonita. Jugarse todo en estas ocho jornadas es emocionante.

—¿Está en su mejor momento de juego de lo que va de temporada?
—Me costó volver a coger el ritmo de competición, llevaba tiempo sin jugar tanto y tan de seguido. Me costó arrancar y recuperar la confianza, pero sí que ahora me veo bien. El cuerpo técnico me ha dado muchísima confianza, me dio los minutos necesarios y tuvo mucha paciencia conmigo. Poco a poco la cosa fue a mejor y ahora sí, me encuentro bien, disfrutona y con chispa en todas las acciones que intento. Encontrarse bien, y a gusto, es esencial.
—¿Prefiere jugar por dentro o en banda izquierda?
—En función del partido me encuentro más cómoda por dentro o en izquierda, pero es verdad que participar por dentro, sea apareciendo o estando, es lo que me gusta. Ahí es donde más disfruto y donde más rindo, creo.
—Tras ascender con el Dépor a Liga F, fue uno de los fichajes importantes del Real Oviedo. ¿Le ha pesado?
—Desde el primer momento intenté evadirme de todo lo que se pudiese esperar de mí, en el buen sentido. Evadirme de esas expectativas generadas, porque fue algo que ya me pesó mucho en el pesado. Aprendí mucho con cómo se dio la situación en el Deportivo [en diciembre de 2023 paró para cuidar su salud mental] y aquí intenté centrarme en mí y en cómo podía ayudar al equipo desde el primer día. Me centré en mi trabajo, en mi día a día y en cuidar mi proceso y mis momentos. Sabía que iba a ser complicado, pero no tenía ningún tipo de presión y desde el club y el cuerpo técnico me cuidaron y tuvieron toda la paciencia del mundo. Ha sido un proceso complicado, es cierto, pero siempre he intentado cuidarme durante el proceso y darme el margen necesario.
—¿Ha hablado mucho con Andrea Suárez (entrenadora) durante esta temporada?
—Sí, tenemos una relación de confianza total. Nos conocemos desde hace tiempo, antes de fichar por el Betis fue mi preparadora física así que había y hay mucha confianza. La base de todo en la vida es comunicarse y eso hacemos. Conversaciones fluidas, muy sanas y que nos aportan mucho a ambas. Siempre con el objetivo de recuperar esa versión mía que había perdido.
—Experiencia no le falta. ¿Ha sido un apoyo para sus compañeras a la hora de gestionar la responsabilidad de ascender?
—Sinceramente, con mis compañeras no hablo mucho de fútbol. Es algo que he ido cambiando con el tiempo. Tenemos relaciones de confianza e intentamos darle la importancia que tiene, trato de hablar más con ellas de situaciones personales y de gestión de emociones. Relacionadas con el día a día, pero no con el juego como tal o los partidos. No soy quién para dar consejos, pero con los años he vivido muchas cosas y eso ayuda. Lo demás, lo futbolístico, vendrá solo.
—Debutó con 15 y tiene 25. ¿Se siente veterana?
—Pues un poco sí [risas]. Es que diez años son muchos, ha pasado tiempo y muchas cosas. No cambiaría nada del camino, es maravilloso haber aportado mi granito de arena al Oviedo Moderno y al nacimiento de este Real Oviedo femenino, un proyecto que me parece brutal y que tiene muchísimo futuro. Aquí se apuesta de verdad.
—Junto a Igle, usted es la única futbolista del Real Oviedo que jugó en la máxima categoría con el Oviedo Moderno. ¿Cuánto ha cambiado todo?
—Veo una mejoría bestial, aunque todavía queda curro. Se nota el apoyo del Grupo Pachuca y se nota que somos importantes en este Real Oviedo. Es lo que nos hacen sentir con el trabajo del día a día, al menos. Se están dando pasos firmes a todos los niveles y se agradece, porque eso también te ayuda a rendir. Estar en un entorno profesional es fundamental.
—¿El proyecto está siendo lo que esperaba?
—Me imaginaba un proyecto ambicioso, pero quizá no tanto. Me está sorprendiendo. Noto la ambición por crecer, por tener un equipo competitivo que esté lo más arriba posible. La plantilla que tenemos habla bien del club.
—¿Qué le dicen desde fuera del Real Oviedo?
—Desde fuera el Oviedo siempre ha sido un club que ha llamado muchísimo la atención. Y ahora más, claro. Se ve que se apuesta, que hay un proyecto y que se cuidan las cosas, que se quieren hacer bien. Ahí son más importantes que nunca los pequeños detalles. Por ejemplo, este viernes se inaugura la nueva tienda oficial en Parque Principado y ahí, junto a las fotos de los jugadores del masculino, hay fotos de jugadoras del femenino. Son detalles pequeños, que seguramente la gente no les dará valor, pero hace cinco años ni te imaginabas que eso se pudiese dar. Eso marca la diferencia y atrae la atención del mundo del fútbol femenino.
—La última. ¿Qué hubiese supuesto para la Laurina pequeña algo como el campamento de verano del Real Oviedo femenino?
—Para mí hubiese sido espectacular, porque nunca tuve la posibilidad. Podía ir a campus en el que otra chica y yo éramos las únicas entre 120 niños. Que salgan adelante estos proyectos para que las niñas puedan formarse, disfrutar del fútbol y tener referentes es maravilloso. Abre muchas puertas y ojalá siga siendo así.