
Los azules, esta vez sí, aprovecharon los resultados de la jornada y se colocan a tiro del ascenso directo tras ganar (1-0) al Albacete
16 feb 2025 . Actualizado a las 22:59 h.No con mucha brillantez, pero seguramente con merecimiento. Así se llevó el Real Oviedo un triunfo importantísimo ante el Albacete (1-0). Nacho Vidal hizo lo único que le faltaba por hacer desde que está en la capital del Principado y cuando los manchegos parecía que levantaban la patita, los azules respondieron. Lo cierto es que, en los últimos 20 minutos de partido, el segundo gol estuvo más cerca que el empate. El Oviedo es cuarto y está a un solo punto de Racing y Mirandés, colíderes de Segunda.
Nacho Vidal, no podía ser otro
Cayéndose Paulino de la Fuente debido a unas molestias físicas, Javi Calleja vio la oportunidad de apostar por Álex Cardero. Junto al canterano, Seoane e Ilyas Chaira entraron por Portillo y Sebas Moyano. Así salía el Real Oviedo en un guion muy similar que el del pasado lunes, porque el Albacete esperaba en campo propio y le daba a los azules la iniciativa absoluta con balón. Ahí entró una de las variantes entrenadas por Calleja durante la semana: Pomares se incrustaba con los centrales en salida de balón y Nacho Vidal e Ilyas daban la amplitud en cada banda.
Los minutos pasaban y con ello la intención del Real Oviedo. La circulación no era todo lo dinámica que debería -y eso que Seoane no entró mal al partido-, al menos para conseguir desordenar al Albacete y encontrar el hueco. Además, la segunda línea oviedista no acababa de girarse cuando recibía entre líneas, así que los manchegos defendían cómodos. Alemao robó una, cedió para Ilyas Chaira y Agus Medina evitó el disparo. Antes del 20’, Seoane encontró a Vidal al espacio y, tras no sacar centro, su disparo con el interior se fue rozando el palo. El Oviedo se asomaba, pero no era suficiente. Por su parte, Higinio representaba el único peligro de un Albacete al que no le duraba demasiado el balón. El delantero protagonizó las dos jugadas con más peligro y que obligaron a Aarón a sudar, pero ambas acciones fueron anuladas por fuera de juego.
Un par de cabezazos de Alemao a las manos de Lizoain y otro par de intentos de Ilyas y Álex Cardero desde más allá de la frontal que se fueron a córner. El Oviedo sacó cuatro saques de esquina, pero el peligro no aparecía. Nacho Vidal, el más incisivo de todos los de azul junto a Jaime Seoane, encontró el premio cuando el descanso esperaba a la vuelta de la esquina. Jugada larga del Oviedo, Pomares jugó con Ilyas en izquierda y un centro que parecía demasiado bombeado lo cabeceó Nacho Vidal a la red. Cantada de Lizoain, pero 1-0. El mejor jugador carbayón de las últimas cuatro jornadas encontraba su merecido premio.
El Oviedo, del peligro al merecimiento
El Albacete, en los primeros diez minutos del segundo tiempo, tuvo todo el balón que no tuvo antes del descanso. Juanma por Lazo fue el único cambio de Alberto González, pero la actitud más ofensiva de los manchegos se unió a los problemas del Oviedo con balón. Higinio asentó en el ambiente esa tensión propia del equipo que está acercándose al empate, aunque lo cierto es que no se puede contabilizar ninguna ocasión clara del Albacete en ese tiempo. Para paliar los problemas con balón, Calleja apostó por Portillo y Sibo en detrimento de Cardero y Seoane. Dicho cambio, al menos en los primeros minutos, no resultó demasiado bien.
Eso sí, Alberto González sacó del campo a Higinio y eso dio aire al Oviedo. Los azules se asentaron y, más o menos, lograron hacerse con el balón. Una de Portillo por banda, otra de Alemao al espacio y, sobre todo, un disparo de Ilyas que Lizoain despejó. Esa última era, hasta el momento, la gran ocasión del segundo tiempo. Cuando el Oviedo estaba bien, dos cambios más en los azules: Hassan y Rahim dentro, Colombatto y Pomares fuera. El argentino estaba desparecido en el segundo tiempo, pero su cambio sorprendió. Portillo pasaba al centro y Hassan se iba a la banda derecha. Nada más entrar, jugada de Hassan por derecha y Portillo no fue capaz de engatillar el centro. Quedaban ocho minutos y el descuento.
Sibo crecía en el partido, Hassan recibió en derecha, encaró a lo que se le puso por delante y su disparo mordido se fue al larguero. Ahí estaba la sentencia para el Oviedo. El partido ya llevaba tiempo más cerca del segundo gol local que del empate visitante, pero cualquiera se fía. Cerca del 90', la polémica, cómo no. Tras otro jugadón de Hassan, Alemao recibió y Nabil le tiró al suelo. Penalti, pero ni Ávalos Barrera en el campo ni Caparrós Hernández en el VAR dijeron algo. Cuatro minutos de descuento... y nada. La ocasión más clara, del Oviedo. Tres puntos de oro.
Ficha técnica
Real Oviedo: Aarón Escandell; Nacho Vidal, Costas, Dani Calvo, Pomares (Rahim, min 79); De la Hoz, Seoane (Sibo, min 56); Álex Cardero (Portillo, min 56), Colombatto (Hassan, min 79), Ilyas Chaira (Sebas Moyano, min 89); Alemao.
Albacete: Lizoain; Agus Medina, Jon García, Lalo, Alcedo; Pacheco (Álvaro Rodríguez, min 71), Pablo Sáenz (Nabil, min 81), Riki, Morci (Kofane, min 81); Lazo (Juanma, min 46) e Higinio (Martón, min 71).
Goles: 1-0 Nacho Vidal (min 43)
Árbitro: Ávalos Barrera (comité catalán). Amonestó a los locales Nacho Vidal (90') y a los visitantes
Incidencias: Estadio Carlos Tartiere (Oviedo). 16.888 espectadores.