El Real Oviedo no es ni su sombra en Cádiz

Pablo Fernández

AZUL CARBAYÓN

El Cádiz celebra el 1-0 con Sebas Moyano lamentándose
El Cádiz celebra el 1-0 con Sebas Moyano lamentándose LFP

Los azules completan uno de los peores partidos del curso y rompen la racha de siete jornadas seguidas sin perder ante un Cádiz (2-0) que tampoco hizo gran cosa

26 oct 2024 . Actualizado a las 18:22 h.

La primera victoria del Cádiz en su estadio en lo que va de temporada llegó ante el Real Oviedo. Y mira que el fútbol es un juego complicado de entender en la gran mayoría de las ocasiones, pero esta tarde se vio desde bien temprano que los azules -de blanco y naranja en tierras gaditanas- no iban a tener el día. La racha de siete jornadas seguidas sin morder al polvo se fue tras un primer tiempo regular tirando a malo decidido por un error de Sebas Moyano y por un segundo tiempo malísimo que acabó con el 2-0 final. Toca volver a ser uno mismo ante el Burgos, el domingo que viene.

Un Oviedo poco Oviedo

No hacía falta ser un lince para saber que el escenario no era sencillo para el Cádiz. Pitada del Nuevo Mirandilla al ver a sus propios jugadores y una falta de confianza propia de un equipo que está en descenso cuando su objetivo es regresar a Primera División. Que el Cádiz era un flan se notó desde el primer minuto, pero el Real Oviedo no estaba fino. Los azules, en su primer partido sin David Costas y Jaime Seoane, dos piezas fundamentales a la hora de construir juego y asentarse en campo rival, estaban espesos en la circulación del balón y ni Colombatto ni Cazorla acaban de recibir el esférico de forma limpia.

Si frente a Málaga o Mirandés se vio un Oviedo mandón y muy seguro de sí mismo con balón, en el antiguo Carranza se estaba viendo un Oviedo más reactivo, que no tenía problemas en que su rival fuese el que llevase la iniciativa. El tema es que el Cádiz no era capaz, así que intentaba que el balón le llegase pronto a sus extremos y que el talento de Ontiveros y Ocampo hiciese el resto. No crearon ninguna ocasión clara, pero Lemos y Rahim sufrieron cada vez que les tocó ponerse el mono de trabajo. En una de esas, encima, Rahim se llevó una tarjeta amarilla tontísima. Aun así, el partido estaba abierto y el Oviedo las empezó a tener.

Pasado el 20’, error de Iza en un balón largo, Sebas Moyano controló y definió terriblemente mal ante David Gil. La siguiente, ya rozando el 40’, fue mucho más clara si cabe. Tras una pérdida de los locales, Moyano activó al espacio a Alemao, el brasileño no fue capaz de definir cuando lo tenía todo a favor y el rechace, también más favorable para el atacante que para el defensor, tampoco fue aprovechado por Moyano. Se iba al limbo la más clara. Cosas del fútbol, el propio Sebas Moyano falló claramente en una diagonal del Cádiz, dejó el balón muerto en el área y ahí estaba Iza para batir a un Aarón Escandell que se quedó a media salida. 1-0, descanso y cara de tontos.

Y la cosa empeoró

Empezaba el segundo tiempo y, cuando no estaba pasando nada, todo se volvió loco. El partido pasó a ser un correcalles repleto de imprecisiones y todavía no estaba muy claro a quién beneficiaba. En el 51’, llegada del Oviedo. Buen saque de Escandell, Ilyas -hasta entonces muy desafortunado- se comió a Iza, avanzó y puso un centro al que Moyano y Alemao no llegaron pero sí Cazorla, cuyo disparo al palo corto lo desvió David Gil. Javi Calleja movió ficha y añadió pimienta al caldo: Hassan dentro y Sebas Moyano fuera. A los dos minutos, error de Escandell al salir del área y Ocampo, desde casi el centro del campo, no estuvo lejos de marcar un golazo.

La siguiente fue otra más o menos clara. Pase largo de Colombatto, Ilyas condujo por la izquierda, la puso y Alemao no llegó al remate. ¿La pena? Que Hassan no estaba en el segundo palo, zona a la que siempre le mandan ir Javi Calleja y Luismi Loro. El Cádiz también movía ficha de cara a los últimos 20 minutos: Ontiveros, Mwepu y Carlos Fernández al banquillo, Chris Ramos, Sobrino y Escalante al césped. Poco después, Calleja sacó todo lo que le quedaba en el banco y Paraschiv y Masca entraron por Ilyas Chaira y Alemao. El Cádiz, mientras dormía el ritmo del partido sacando un par de saques de esquina de forma consecutiva. Además, los gaditanos empezaban a crear dudas a los centrales carbayones con pases largos y a la espalda. 

Último cuarto de hora de partido y la sensación no era la de que el Oviedo estuviese cerca del empate. Pero claro, la ventaja del Cádiz seguía siendo mínima. El 2-0 llegó, pero no valió. Sobrino se comió a Hassan y el Cádiz avanzó hasta que Alcaraz, desde muy lejos, marcaba un golazo con uno de esos disparos marca de la casa. Eso sí, antes de que llegase el golpeo de Alcaraz, codazo de Escalante a Colombatto. Un codazo en la cara del árbitro, por cierto. Gorostegui Fernández llamó desde el VAR y Galech de Azpeteguia no tuvo más remedio que anular el gol. Ese 2-0 sí llegó minutos después y fue en una falta lateral que, incomprensiblemente, Chris Ramos cabeceó a placer. Partido finiquitado. 

Ficha técnica

Cádiz CF: David Gil; Iza Carcelén (Zaldúa, min 85), Kovacevic, Chust, Matos; Ontiveros (Escalante, min 68), Alcaraz, Kouamé (Fede San Emeterio, min 85), Ocampo; Carlos Fernández (Sobrino, min 68), Mwepu (Chris Ramos, min 59).

Real Oviedo: Aarón Escandell; Lemos, Luengo, Dani Calvo, Rahim; Del Moral (Sibo, min 59), Colombatto; Ilyas Chaira, Santi Cazorla (Álex Cardero, min 59), Sebas Moyano (Hassan, min 54); Alemao.

Goles: 1-0 Iza Carcelén (min 45); 2-0 Chris Ramos (min 86)

Árbitro: Iosu Galech Apezteguía (Comité navarro). Amonestó a los locales y a los visitantes Rahim (29’), Sibo (66')

Incidencias: Estadio Nuevo Mirandilla (Cádiz).