Los azules fueron mejor que su rival y, después de un primer tiempo igualado, Alemao puso el definitivo 1-0 en el marcador. Gol anulado a Masca por un fuera de juego justísimo
16 jun 2024 . Actualizado a las 20:32 h.El Real Oviedo quiere más. El Carlos Tartiere olió la sangre y Alemao fue el encargado de salir a cazar. Primer tiempo de playoff, de final de playoff nada más y nada menos. Segundo tiempo de Oviedo de Carrión. Y ahí, el Espanyol no supo reaccionar. Fue 1-0, pero podría haber sido 2-0 salvo por unos desgraciados milímetros. En Cornellá, a los azules les vale el empate para regresar a Primera División.
Pura final de playoff
La previa fue de lo más emotivo que se recuerda en el Carlos Tartiere. Ya en el césped, Luis Carrión no cambió, pero Manolo González sí. El técnico del Espanyol reforzó el centro del campo con Aguado, dejó a Melamed y Pere Milla en el banquillo y salió en el lateral izquierdo… con un lateral izquierdo. En el Real Oviedo, mientras tanto, casi todo igual. Borja Sánchez, tocado en las últimas horas, se quedó en el banquillo y Paulino fue el titular en una de las bandas. Los azules recuperaron el primer balón del encuentro, pero el Espanyol se apuntó la primera ocasión: transición de los pericos tras pérdida azul y Jofre disparó demasiado cruzado desde el flanco derecho.
El Real Oviedo parecía algo nervioso y no encontraba el pase interior, escenario que aprovecharon Braithwaite y Puado para meter baza y poner más nervioso aún al Tartiere en general. Los delanteros del Espanyol se hacían fuertes de espalda, conectaban con sus compañeros y daban salida a los pericos. Cuando el Oviedo -y más concretamente Dani Calvo y Oier Luengo- controlaron dicho aspecto del juego, el partido se volvió más azul carbayón. Pasado el diez, ataque posicional largo de los de Carrión, de lado a lado y centro de Viti en la derecha que era córner a pesar de que Arcediano Monescillo pitó saque de puerta. Rozando el 20’, cabalgada de Alemao por la izquierda, Calero se quedó atrás pero le dio tiempo a molestar al brasileño, que decidió tirar en vez de pasar atrás. El disparo se fue y se pidió penalti, pero no era nada.
Del 20’ al 30’, poco de ambos, aunque seguía dando la sensación de que la iniciativa era local. Paulino no estaba cómodo desde el principio y pasada la media hora cayó al suelo: lesión y su lugar lo ocupó Dubasin. El primer tiempo se moría entre decisiones del colegiado que cabreaban al Tartiere e intentos de ambos equipos que morían antes de que pudiesen llamarse ocasión. Eso sí, todo ocurría más cerca de Joan García que de Leo Román. Jaime Seoane fue el protagonista de la última gran ocasión del primer tiempo, con Cololombatto dejándosela de cara y el centrocampista disparando muy cerca del poste. Esa fue la última.
El mordisco azul
Dubasin empezó con ganas el segundo tiempo y sus carreras hicieron sufrir más de la cuenta a Cabrera en los primeros instantes de la reanudación. El Espanyol lo intentaba tras pérdida azul, pero los saques de esquina generados los despejaba el Oviedo sin problemas. El Tartiere se animaba a la mínima que podía y, tras unos minutos de tanteo, los de Carrión volían a llevar la iniciativa. El técnico movió el banquillo de nuevo: Masca y Abel Bretones dentro, Moyano y Pomares fuera. Acción-reacción por parte de Manolo González, ya que tras dichos cambios dio entrada a Sergi Gómez, Rúben Sánchez y Melamed y el Espanyol pasó a jugar con tres centrales y carrileros.
Entró Masca y Alemao se activó. Pasado el 60', el brasileño se sacó de la chistera un pase de tacón impresionante que Masca corrió al espacio para fusilar a Joan García desde la frontal. El portero desvió a córner y el Carlos Tartiere dijo «ahora». El estadio carbayón se arremangó y el Espanyol sintió el miedo por primera vez en la eliminatoria. Cinco minutos después, locura. Falta lateral en la izquierda y allá que fue Seoane. El centrocampista la puso con veneno y Joan García la sacó como pudo en la línea, pero ahí estaba Alemao para empujarla a gol y prender fuego a la capital del Principado. 1-0 y el Tartiere patas arriba. Carrión quiso más madera: quitó a un Luismi con amarilla y al propio Alemao, metiendo a Homenchenko y a Borja Bastón.
Con el estadio ovetense siendo una caldera, gol anulado al Real Oviedo. Tras un robo en campo rival, Colombatto jugó con Dubasin, este la puso desde la izquierda y Masca cabeceó a la red. Minutos después, Arcediano Monescillo se puso la mano en la oreja y Sagués Oscoz le dijo que fuera de juego. Más justo, imposible, pero 1-0 en el marcador. El Espanyol, que quitó la defensa de cinco y dio entrada a Keita Balde y Pere Milla, no reaccionaba, pero todavía quedaban cinco minutos y el descuento. Cinco minutos de añadido, quedaban solo tres y los acercamientos seguían siendo locales. El Oviedo, como ya ocurrió en Ipurua, era mejor que el rival tras adelantarse en el marcador. Los azules se van a Cornellá con ventaja y a muerte a por el ascenso.
Ficha técnica
Real Oviedo: Leo Román; Viti, Luengo, Dani Calvo, Pomares (Abel Bretones, min 60); Luismi (Homenchenko, min 78), Colombatto, Seoane; Paulino (Dubasin, min 35), Sebas Moyano (Masca, min 60) y Alemao (Borja Bastón, min 78).
RCD Espanyol: Joan Garcia; Óscar Gil (Keita Balde, min 76), Calero, Cabrera, Bryan Oliván (Pere Milla, min 76); Gragera, Keidi Bare, Aguado (Sergi Gómez, min 62); Jofre (Rubén Sánchez, min 62), Puado (Melamed, min 62) y Braithwaite.
Goles: 1-0 Alemao (min 71)
Árbitro: Arcediano Monescillo (comité castellano manchego). Amonestó a los locales Luismi (min 67) y a los visitantes Óscar Gil (min 71) y Keita Balde (min 87)
Incidencias: Estadio Carlos Tartiere (Oviedo). 29.297 espectadores.