Los azules jugarán el playoff gracias a la derrota del Racing ante el Villarreal B. El Oviedo se adelantó ante el Eibar (4-3), pero a partir deel empate tras un penalti que no era fueron mejor los armeros
03 jun 2024 . Actualizado a las 15:04 h.De la manera más agónica posible, pero conseguido. El Real Oviedo, por primera vez desde el regreso al fútbol profesional, jugará el playoff de ascenso. Fue tras caer derrotado en Eibar, fue tras una nueva decisión arbitral injustificable, fue tras un mal segundo tiempo de un equipo tocado en lo anímico sucedido en el primer tiempo... pero fue. Fue tras la derrota del Racing en La Cerámica.
Del 0-1 a otro escándalo arbitral que el Eibar supo aprovechar
Pasadas las emociones propias del recibimiento y los minutos previos al pitido inicial, el partido arrancó como nunca debe arrancar un partido en el que juega Aketxe. Siempre que hablemos, claro, de los intereses del equipo que juegue contra Aketxe. Berrocal colgó un balón tras el saque de centro, Pomares saltó con Nolaskoain y Guzmán Mansilla no dudó en pitar la falta. No dejó de no dudar durante todo el primer tiempo, por cierto. Aketxe lanzó la falta y no hubo peligro para el Oviedo, pero en la siguiente jugada Paulino perdió un balón -el primero de muchos- en salida de balón y Colombatto hizo falta en la frontal sobre Sergio León. Esta sí era falta de gol, pero el disparo de Aketxe se estrelló en la barrera. A partir del minuto 5, el Oviedo comenzó a mostrarse cerca del área armera.
Y de qué manera. Jaime Seoane ponía un balón largo que, claramente, todos los presentes en Ipurua veían que se iba por línea de fondo. Todos menos Borja Sánchez, que corrió y salvó el balón, Alemao lo recogió y la jugada continuó. El balón le llegó a Viti, este la puso y apareció Borja Sánchez, el que antes había salvado el balón, para controlar y con toda la sangre fría que le caracteriza definir a la perfección ante Luca Zidane. 0-1 y locura en la grada de Gol Este del estadio, abarrotada por la afición oviedista. El partido no daba respiro a nadie. Borja Sánchez encontró a Alemao y el brasileño disparó al lateral de la red cuando, aunque escorado, solo tenía delante a Luca Zidane. El respondía con el balón parado y gracias a la movilidad de sus mediapuntas, no paraban. Aketxe, Soriano y Stoichkov hacían daño recibiendo entre líneas, girando y moviendo el balón de lado a lado. Leo Román tuvo que intervenir a un disparo desde la frontal y en el minuto 23 llegó una de esas jugadas a las que ya está acostumbrado el Oviedo y el oviedismo.
Córner desde la derecha, Nolaskoain remató en el segundo palo y el balón le daba en la mano de Paulino. Ni VAR ni nada, Guzmán Mansilla no dudó y pitó penalti. Paulino no se lo creía. En la repetición se podía ver como el cántabro tenía la mano delante del pecho, ocupando un espacio que nada tenía que ver con el cabezazo. Nada, penalti. Y gol de Aketxe. El 1-1 -sobre todo por el cómo- dejó tocado al Oviedo y el Eibar lo aprovechó. Tras un par de amagos y un gol anulado a Stoichkov po fuera de juego, otra pérdida de Paulino acabó en Cristian Gutierrez en izquierda, la puso y Sergio León apareció para cabecear a la red. 1-2. Borja Sánchez era el único de los jugadores oviedistas capaces de hacer daño en este tramo de partido y se puede decir que el descanso le vino bien a los de Carrión. En Elda y La Cerámica, mientras, seguía el 0-0. El Oviedo todavía era equipo de playoff.
La alegría llegó desde La Cerámica
El segundo tiempo arrancó con un cambio que ya se masticaba en la banda y, también puede decirse, en la grada: Dubasin entraba por Masca. Mientras que Paulino antes ocupaba posiciones interiores, ahora pasaba a la derecha para dejar dicho espacio a Dubasin. Después de que Dubasin obligase a Luca a intervenir en una jugada que estaba anulada por fuera de juego, Seoane recibió en la frontal tras una jugada larga y su disparo se fue rozando el larguero. El jarro de agua fría llegó en el 58', momento en el que llegaba el gol del Sporting en Elda. Tras casi una hora de jornada, el Oviedo estaba por primera vez fuera de los puestos de playoff. Mientras, sobre el césped de Ipurua, a los de Carrión les costaba ser dueños del partido y siempre había acciones en las que el Eibar parecía hacer daño con espacios.
De cara a los últimos 25 minutos de partido, Carrión daba entrada a Sebas Moyano y Borja Bastón en detrimento de Paulino y Borja Sánchez. Mientras que a los jugadores oviedistas les costaba un mundo, la afición oviedista desplazada a Ipurua intentaba levantar a los suyos. Joseba Etxeberria respondía con un cambio defensivo: Sergio León, delantero, se iba y entraba Róber Correa, lateral. El Oviedo sumaba dos tímidas llegadas con Dubasin y Bastón, pero no acababa de achuchar al Eibar. Saque de banda, balón suelto tras controlar Bastón y disparo desviado de Sebas Moyano. Minuto 72 y tanto celebrado por el oviedismo, pero no marcaba el Oviedo: gol del Villarreal B ante el Racing y los azules volvían al playoff. Un minuto después, Bastón remataba al larguero, aunque volvía a ser fuera de juego.
El minuto 80 llegaba con amarilla para Seoane y, inmediatamente después, el Real Oviedo veía un poco de luz. Sebas Moyano centraba desde la izquierda, Alemao aparecía en el segundo palo y Borja Bastón cabeceaba a la red con la portería vacía. 2-2 que no cambiaba la tabla, pero sí acercaba al Oviedo al triunfo y despertaba a los jugadores azules. Y un par de minutos después volvió a cambiar todo. Centro desde la izquierda y Luengo recibió un golpe en la cabeza. Unos pedían penalti y, mientras, el balón parecía irse a saque de banda hasta que Corpas lo salvó. Con Luengo en el suelo, Corpas arrancó y el árbitro no paró el juego pasándose así por el forro el protocolo de golpes en la cabeza. Corpas corrió y corrió, Seoane no lo paró, Leo Román se quedó a media salida y Corpas marcó el 3-2. Luengo y Dani Calvo protestaban, pero nada. Gol. Y en el 90', tras un saque de puerta, Stoichkov marcaba el 4-2 y solo quedaba mirar a La Cerámica.
Un poste del Villarreal B, una ocasión para el Racing, una parada de Yáñez en el Eldense-Sporting... Pasaban muchas cosas, pero no pasaba ninguna. Entre medias, por cierto, gol -golazo- de Bastón para el 4-3. Y finalmente, el grito que esperaba todo el oviedismo: ¡Final en Santander! El Real Oviedo es equipo de playoff y se enfrentará... al Eibar.
Ficha técnica
SD Eibar: Luca Zidane; Corpás, Venancio (Unai Vencedor, min 85), Berrocal, Cristian (Ríos Reina, min 85); Nolaskoain, Matheus; Aketxe (Sergio Álvarez, min 74), Mario Soriano (Mada, min 74), Stoichkov; Sergio Léon (Róber Correa, min 64).
Real Oviedo: Leo Román; Viti, Luengo, Dani Calvo, Pomares (Abel Bretones, min 76); Paulino (Borja Bastón, min 66), Seoane, Colombatto, Borja Sánchez (Sebas Moyano, min 66); Masca (Dubasin, min 46) y Alemao (Álex Millán, min 86).
Goles: 0-1 Borja Sánchez (min 5); 1-1 Aketxe, de penalti (min 25); 2-1 Sergio León (min 39); 2-2 Borja Bastón (min 88); 3-2 Corpas (min 83); 4-2 Stoichkov (min 90+1); 4-3 Borja Bastón (min 90+6).
Árbitro: Guzmán Mansilla (Comité Andaluz). Amonestó a los locales Corpas (min 87), Correa (mi 89) y a los visitantes Paulino (min 25), Seoane (min 80)
Incidencias: Estadio de Ipurua (Eibar). 7.588 espectadores, medio millar del Oviedo.