«El equipo enlaza más pases atrás, porque bajamos a un mediocentro con los centrales, pero eso no nos está dando la victoria», dice el técnico del Real Oviedo
29 abr 2023 . Actualizado a las 13:04 h.Minutos después de que finalizase el entrenamiento del Real Oviedo, el último de los azules antes de recibir este domingo la SD Ponferradina (Carlos Tartiere, 16:15 horas), Álvaro Cervera analizó la actualidad carbayona en sala de prensa de El Requexón. El técnico oviedista habló de cómo está el equipo, de la buena racha de las últimas semanas y de varios nombres propios de la plantilla.
Cómo llega el equipo al partido del domingo
«No estarán Javi Mier, Jimmy, Tarín, Bastón, Montoro y Luismi por tarjetas».
«Sí temo que haya relajación, sí. Es un partido difícil de jugar, estoy convencido de que los partidos se juegan más con la cabeza que con los pies y pulmones, después de tres victorias y estar en una zona cómoda será difícil de afrontar. Estamos haciendo lo posible para que no sea así, pero hay que reconocer que es un partido que no tiene las hechuras de los de antes».
«Lo único que podemos cambiar es jugar con uno o dos puntas. Durante la semana he pensado que podríamos jugar con dos puntas, intentarlo otra vez a ver si el equipo se maneja bien y ganar. Lo demás… no».
«Hugo Rama está bien, pero no ha entrenado. Era un golpe. Hay otros jugadores que tampoco han entrenado toda la semana, pero más por la acumulación de partidos. Hugo fue por el golpe»
«Mangel, Camarasa, Koba y Yayo, dos para cuatro puestos en el centro del campo. Si jugamos con dos mediocentros, claro».
Mangel y Yayo, nombres propios. Y el doble pivote
«Vamos a ver… El doble pivote es la duda, sí. Pueden jugar Mangel y Koba, Mangel y Camarasa… Si queremos jugar con dos puntas, seguramente tendría que jugar un mediocentro más defensivo para que el equipo esté equilibrado. Todavía no lo tengo decidido».
«¿Yayo? Lo normal es que apueste por otros. Me sabe mal porque el filial está en muy buena dinámica, pero tenemos demasiadas bajas en el centro del campo y hay que llevar más gente por lo que pueda pasar. Considero a Yayo un futbolista muy de futuro, es un jugador que me gusta. Juega a dos toques, lo hace fácil, me dicen que es muy oviedista, quiere mucho a este club. Es un jugador de futuro importante».
«Mangel empezó muy bien, sensacional. Es algo que lo tiene. Luego ha tenido un pequeño parón, no sé debido a qué, imagino que es a sus ganas de hacer las cosas mejor de las que estaba haciendo. Eso es una equivocación de futbolista. Todas las personas tenemos un tope, y no tenemos que sobrepasarlo porque seguramente nos equivocaremos».
«Tengo una anécdota que yo repito mucho: me contaron una vez de un chico que sacaba muy buenas notas en música y muy malas notas en matemáticas. Los padres enseguida le pusieron a dar clases particulares de matemáticas, y el tutor le dijo que esas clases particulares las diese de música, que es como se va a ganar la vida. Esto es un poco eso: haz lo que sabes hacer y serás muy bueno. Si empiezas a hacer más cosas… no sé si me he explicado. Me gusta la gente que hace lo que sabe hacer, la que intenta hacer más cosas de las que sabe hacer… me cuesta como entrenador».
El triunfo en Leganés, ¿inicio de la buena racha?
«Veníamos haciendo méritos para sacar mejores resultados, aunque es verdad que en Leganés se jugó bien. Mi teoría es que el equipo juega mejor ante los equipos que proponen más, cuando somos nosotros los que tenemos que llevar la iniciativa nos cuesta más, seguramente culpa mía. He escuchado que el equipo enlaza más pases y hace más cosas con balón, pero yo no estoy de acuerdo. El equipo enlaza más pases atrás, porque bajamos a un mediocentro con los centrales, pero eso no nos está dando la victoria. La victoria nos la da meter dos goles en un partido o tener más acierto».
«Yo creo que no ha cambiado mucho, antes hicimos méritos, pero no sacamos resultados, ahora sí. El partido de Ibiza, por ejemplo, no me gustó nada. Hay rachas y dinámicas en los equipos, ahora nos toca la de ganar».
«Me fastidiaron mucho las derrotas ante Villarreal B y Burgos, esas fueron las que nos desengancharon en puntos y anímicamente. Y luego los de arriba están bien, los que luchan por el sexto puesto están bien, así que es difícil mirar arriba».
«Se han hecho cosas bien, no muchas, pocas, pero bien. El vestuario, cuerpo técnico incluido, ha visto el peligro y seguimos haciendo lo nuestro, pensando que el momento llegaría. Y así fue. No hacemos nada diferente, seguimos metiendo goles a centro de Lucas, remate de Enrich o balón parado. Hemos cambiado de dormir peor a dormir mejor».