«Soy un oviedista más para siempre y espero que pronto volvamos a ver a este equipo donde se merece», dice el futbolista en su carta a la afición carbayona
01 jul 2022 . Actualizado a las 20:36 h.Cinco temporadas y 151 partidos oficiales después, José María Angresola, Mossa, ya es historia en el Real Oviedo. El lateral izquierdo no continuará en la plantilla azul y esta tarde, después de que el club comunicase el estado contractual del equipo, el valenciano se despidió del oviedismo con un emotivo vídeo.
Mossa, que aterrizó en la capital del Principado en el verano de 2017, se va del Oviedo como capitán y con «los recuerdos, emociones y sentimientos» a flor de piel tras vestir la camiseta azul. «Lo guardaré siempre como uno de los días más felices de mi vida», dice el valenciano sobre aquel derbi asturiano que ganó el conjunto oviedista gracias a un doblete inolvidable del lateral zurdo.
Carta de Mossa al oviedismo
De niño tenía un sueño: ser futbolista y poder vivir los momentos que me ha regalado un club como este. Han sido cinco temporadas, 151 partidos oficiales y un carrusel de emociones. Vivimos momentos buenos que nos hicieron volver a soñar, momentos difíciles en los que temimos lo peor y una última temporada en la que pude disfrutar de una afición que volvía a ilusionarse.
Pero si con algo me quedo, es con los recuerdos, emociones y sentimientos que me ha provocado jugar para este club. No puedo olvidar a sensación de cada partido en el Tartiere, durante en muchos momentos sentí que los nuestros nos levantaban, nos empujaban cuando las fuerzas flaqueaban. Los desplazamientos masivos, en los que nos sentimos privilegiados en cada uno de los estadios que hemos visitado.
Los derbis, en los que hemos demostrado quienes fuimos siempre. En especial, aquel 4 de febrero en el que pudimos devolveros el orgullo: lo guardaré siempre como uno de los días más felices de mi vida.
Y por supuesto, esta última temporada. Vuestro reconocimiento a una plantilla que lo intentó hasta el último minuto del último partido, y donde nuestras lágrimas eran las vuestras. En este club he aprendido que a los equipos no les hacen grandes ni su historia, ni sus títulos, ni sus grandes logros; les hace especial su gente. Y os aseguro que después de haberlo vivido desde dentro, estoy seguro de que este equipo es inquebrantable.
Quiero dar las gracias a los trabajadores del club y a los entrenadores que he tenido, que confiaron y respetaron mi trabajo siempre. A todos mis compañeros, que me dieron el privilegio de ser capitán de este equipo. Y gracias a vosotros, afición. Jamás podré devolver todo el cariño que me habéis dado.
Cinco temporadas dan para mucho y sé que he pasado por momentos buenos y no tan buenos. Os pido disculpas si en algún momento no estuve a la altura o esperabais más de mí. Pero os prometo que me he vaciado y he respetado este escudo cada día. Soy un oviedista más para siempre y espero que pronto volvamos a ver a este equipo donde se merece. Cuando eso pase, ahí estaré para celebrarlo con vosotros.
Gracias, hala Oviedo siempre.