El canterano dio sus impresiones tras la igualada en el derbi y el tanto conseguido ante el Sporting
10 oct 2021 . Actualizado a las 00:00 h.Gran ambiente, nervios y pequeño chasco final para el Real Oviedo en el derbi ante el Sporting de Gijón (1-1). Los azules rozaron con los dedos un nuevo triunfo, pero un gol tardío de los rojiblancos dejó en tablas el choque entre asturianos. El gran protagonista por parte azul fue Lucas Ahijado. El lateral anotó el gol con el que el oviedismo soñó con una nueva victoria.
El canterano abandonó el Carlos Tartiere inmerso en una mezcla de sentimientos. Por un lado, «contento y orgulloso por el gol», el segundo que consigue con la elástica del primer equipo. Por el otro, «triste por el empate. Queríamos la victoria y recompensar a nuestra afición».
Su gol y cómo vio el choque
«Muy contento y orgulloso por el gol. No hay palabras para describirlo. Es lo que sueña todo niño que empieza en categorías inferiores, sobre todo en un derbi».
«Veo que Borja va a poner el pase tras una buena jugada en banda izquierda, Confié en que podía llegar. Tuve la suerte de que me cayó. Muy contento por mí, por el equipo y por la afición, por poder ayudar. Disfruté de ese momento. Encantado».
«Lo que todo canterano sueña es que haya gente de la casa. Hemos trabajado toda la vida para estar aquí. Orgullosos por cómo hemos trabajado».
«El vestuario quería ganar el partido y llevarnos los tres puntos para casa. Al final, no es lo que queríamos. Sabíamos que era un rival difícil. Nos vamos un poco tristes».
«Esta vez me tocó a mí. Ojalá me siga tocando y que el lateral derecho siga marcando goles. Lo importante es estar ahí para apoyar en todo lo que sea necesario».
El papel de la afición
«Triste por el empate. Queríamos la victoria y recompensar a nuestra afición. Estuvieron increíbles desde el hotel hasta el estadio. También durante todo el partido. Ahora ya solo nos toca pensar en el siguiente partido».
«Al final no te lo crees. Otras veces ya han estado ahí, pero cada derbi es especial. Te ponen los pelos de punta. Esa sensación desde dentro no sabes ni qué hacer. Se agradece muchísimo cómo nos trata nuestra afición».
