El técnico madrileño trabajó mano a mano con Rubén Reyes, director deportivo carbayón, en el Rayo Vallecano y lograron ascender a Primera División en la 17/18
24 sep 2021 . Actualizado a las 19:52 h.La victoria del Girona ante el Valladolid del pasado fin de semana calmó, al menos un poco, las aguas en Montilivi, pero en el club blanc-i-vermell quieren seguir sumando en el Carlos Tartiere. A dos días del encuentro del domingo ante el Real Oviedo (18:15 horas), Míchel Sánchez, entrenador de los catalanes, habló del duelo ante los carbayones y dio las que, según él, son las claves del partido que les enfrentará al conjunto de José Ángel Ziganda.
La clave del partido y las fortalezas del Oviedo
«Necesitamos un ritmo de juego alto porque el Real Oviedo es uno de los equipos que mejor trabaja la presión de su bloque defensivo. Son intensos, te agobian mucho y necesitamos tener una gran circulación de balón para ser dominadores».
«La clave está en que nosotros queremos ser dominadores del juego y para tener el balón hay que salir bien de la presión del Real Oviedo. Es un equipo que trabajan muy bien en la alta intensidad, corren en la presión y se juntan bien cuando les superas. También hay que evitar pérdidas porque saben jugar en transición y tienen dos delanteros que ganan muchos duelos. Hemos trabajado todo esto por semana».
«Si somos capaces de superar esa primera línea de presión, hay que ser dominadores en campo rival. Así entiendo yo el estilo que quiero implantar aquí. Es un partido que nos puede demostrar a qué altura estamos y lo que podemos ser esta temporada. Será un reto muy bueno para nosotros».
Opción de jugar con tres centrales en el Tartiere
«Puede ser una de las soluciones debido a que el Oviedo juega con dos delanteros, pero la otra forma de verlo es que si reforzamos el centro del campo igual el Oviedo no nos ataca tanto. Si somos capaces de acabar jugadas en campo rival y apretar la pérdida, igual no nos hacen daño en transiciones. Hay que ver qué solución escogemos y cuál nos da resultados».
El pasado conjunto de Míchel y Rubén Reyes
Míchel, entrenador del Girona, y Rubén Reyes, director deportivo del Real Oviedo, se saludarán este domingo antes de que arranque el encuentro, pero cuando el colegiado señale el inicio del partido el sitio de ambos estará separado por varias gradas del Carlos Tartiere: uno al banquillo visitante, el otro al palco. Hace tres años, la historia era bien diferente. En la temporada 17/18, aquella que acabó con el ascenso a Primera División del Rayo Vallecano de Míchel, Rubén Reyes era el analista del conjunto vallecano. El actual director deportivo azul, cada jornada, era el encargado de realizar los informes de los equipos a los que se enfrentaba La Franja,
En la 18/19, ya con el Rayo instalado en la élite del fútbol español, Rubén Reyes ganó peso en el círculo de confianza de Míchel -aunque ya en la temporada anterior era uno más en el día a día del primer equipo- y pasó de analista a ayudante técnico, estando cada fin de semana en el banquillo del conjunto vallecano. Cuando a mediados de marzo la directiva del Rayo destituyó a Míchel y Reyes se hizo cargo del equipo hasta que llegó Paco Jémez, llegó a su fin la relación profesional entre el técnico del Girona y el máximo responsable del Real Oviedo. Este domingo, el reencuentro.
