El primer equipo se estrena con un partidillo en el que Ziganda no quiso mostrar todas sus cartas
17 jul 2021 . Actualizado a las 11:27 h.Del tradicional amistoso de pretemporada contra el Vetusta se pasó a un partidillo entre los miembros del primer equipo. Posteriormente, a un entrenamiento al que no se podría asistir en su totalidad. El Real Oviedo quiere esconder sus primeros pasos en un verano de muchos cambios en la entidad.
Tras los múltiples cambios, el cuerpo técnico planteó un partido con dos mitades de 30 minutos. En lo que se pudo ver, José Ángel Ziganda dividió a sus futbolistas en dos equipos. Ambos plantearon el 4-3-3 que el navarro ha empezado a implementar en los últimos entrenamientos.
El primer equipo estuvo formado por Joan Femenías en la portería. Una defensa compuesta por Lucas Ahijado y Pierre Cornud en los laterales y David Costas y Alejandro Arribas en el centro. Jimmy Suárez, Marco Sangalli y Álex Cardero formarían en la medular, con Viti Rozada y Borja Sánchez en las bandas. La punta de ataque sería para Samuel Obeng.
Enfrente, Berto Hórreo bajo palos. Defensa para Jorge Mier, Simone Grippo, Christian Fernández y Mossa. En el centro del campo aparecían Yayo (mediocentro del División de Honor), Guille Bernabéu y Riki Rodríguez. En las bandas se situaron Steven Prieto y Osky, con Javi Cueto como referencia arriba.
Solo dos futbolistas se quedaron al margen de estos 22. Se trata de Javi Mier y Vanderson Teles. Centrocampista y extremo han comenzado la pretemporada arrastrando problemas físicos del pasado curso y siguen su proceso de recuperación. Esta mañana, trabajaron al margen de sus compañeros durante el partidillo de entrenamiento.
El partido, que fue presenciado por la plana mayor del club carbayón (Jorge Menéndez Vallina, Manuel Paredes, Rubén Reyes, Mario Prieto, Roberto Suárez, Antonio Rivas…) y seguido por Cuco desde un andamio para tener una mejor perspectiva, comenzó con un gol de Sangalli casi en el primer minuto al finalizar con una vaselina y superar a Hórreo.
Poco después, el donostiarra ponía el 2-0 en el marcador tras aprovecharse de un centro de Cornud al que no consiguió llegar Obeng. El lateral se mostró muy activo durante los primeros minutos del choque en el lateral zurdo. Se confirmaba el dominio de los teóricos titulares en el primer acto con dos tantos y una presión alta que complicó a su rival, mientras que Osky se mostraba el más incisivo con varios centros al área que no encontraron rematador. Tras los 30 minutos de primera parte, el Real Oviedo cerró el entrenamiento para la segunda mitad.
