El descenso del Vetusta podría cambiar la situación de varios futbolistas del club azul. Varios equipos de la Primera RFEF ya se han interesado en el pichichi del filial
01 jun 2021 . Actualizado a las 11:31 h.La orden es clara: en el Real Oviedo no se tomará ninguna decisión hasta que aterrice en la capital del Principado el nuevo director deportivo. Una premisa que vale tanto para el primer equipo como para el resto de la entidad. Y el filial no es una excepción. Hasta la fecha, con el club a la espera, es Roberto Suárez, responsable de la cantera, el interlocutor del Real Oviedo en las conversaciones -meramente informativas- que se están produciendo con jugadores y representantes.
El nuevo escenario del fútbol español
El descenso de categoría, como ya se sabía cuando el Vetusta se estaba jugando la permanencia, traerá consigo cambios importantes en la planificación del filial, cuya plantilla será muy diferente a la del curso que acaba de finalizar. Estar en Tercera RFEF lo cambia todo, y más en una temporada llena de novedades. Este jueves, por ejemplo, se celebrará una reunión en Las Rozas entre la Federación y los clubes que conformarán la nueva Primera RFEF. Uno de los temas a debatir es el de los sub-23. De momento, el primer borrador indica que cada plantilla deberá tener, como mínimo, ocho futbolistas sub-23 (siete jugadores de campo y un portero). Si dicha regla se mantiene, los jugadores jóvenes serán los grandes protagonistas del mercado estival.
Y ahí entran en juego esos futbolistas menores de 23 años propiedad del Real Oviedo. La Primera RFEF, compuesta por 40 equipos, contará con 8 filiales. 32 clubes, de potencial económico y objetivos variados, estarán muy atentos a todos esos jugadores de filiales que han dado con sus huesos en Tercera División. Además, en la Segunda RFEF, como mínimo, habrá otros 10 filiales -podrían ser más ya que el playoff todavía no ha finalizado-, así que la demanda se incrementa.
Un pichichi que busca su lugar
La 20/21 del Vetusta, a pesar de finalizar con el descenso de categoría, ha dejado la confirmación de Javi Cueto (Gijón, 2001) como uno de los grandes valores del club azul. A sus 20 años, y en su primera temporada como sénior, el delantero marcó 8 goles y se convirtió en el gran líder del equipo de Emilio Cañedo. Además, tras hacer la pretemporada a las órdenes de José Ángel Ziganda, debutó en Segunda División ante el Mirandés, en la segunda jornada del campeonato. Eso sí, los 11 minutos que disputó en Anduva fueron los únicos de la temporada con la camiseta del primer equipo.
Cueto, con contrato en el Real Oviedo hasta 2023, afronta un verano clave para su formación. Tras debutar hace tres años con el filial y ser un futbolista más de la plantilla del Vetusta en los dos últimos cursos, su etapa en el segundo equipo de la entidad azul podría haber llegado a su fin. Y más tras el descenso de categoría. Estar en dinámica del primer equipo y con ficha del filial era algo plausible con el Vetusta jugando en Segunda RFEF, pero no en Tercera División.
En este contexto, dos son las soluciones con más fuerza: primer equipo o cesión. En la plantilla 21/22 que dirigirá, a falta de confirmación oficial, José Ángel Ziganda, Samuel Obeng es el único delantero con contrato. Nadie más, así que no parece una locura que Javi Cueto pueda tener un sitio. La otra vía, la de la cesión,la contemplan muchos clubes de la Primera RFEF y son varios los que ya han preguntado por el ariete asturiano. Diversas opciones y una decisión que tomar. Otra tarea que deberá afrontar el futuro director deportivo del Real Oviedo.