El Real Oviedo, en su último partido en casa de la temporada, busca los tres puntos ante el Racing para así certificar la salvación
17 jul 2020 . Actualizado a las 09:23 h.Quién se lo iba a decir al Real Oviedo. Después de una temporada en la que el sufrimiento extremo ha sido el compañero de viaje más fiel, el conjunto carbayón tiene la oportunidad de cerrar su permanencia en Segunda División en la penúltima jornada del curso, en su estadio y ante un rival que ya está descendido. No será fácil, seguro, pero si uno mira a lo ocurrido en el pasado los azules no se pueden quejar. Esta noche, ante el Racing (Carlos Tartiere, 21:00 horas; Movistar LaLiga), pueden despertar de la pesadilla.
El aviso del Huesca
Sin quererlo, el Huesca le mandó un mensaje potente al Oviedo hace una semana. Los oscenses, que llegaron a El Sardinero con la posibilidad de dejar encarrilado su ascenso a Primera División, cayeron 1-0 ante el Racing. El próximo rival del conjunto carbayón está descendido por méritos propios, pero sigue siendo un equipo de Segunda. Y eso es sinónimo de peligro.
«Ante el Racing esperamos el partido más difícil de la temporada», dijo Juanjo Nieto durante la semana. El vestuario azul, que sabe mejor que nadie por el sufrimiento que ha pasado este club en los últimos diez meses, no se confía. Ni debe, ni puede. Demasiados momentos amargos vividos este curso como para tirar por la borda en la última jornada la única ventaja conseguida en los últimos meses.
Los dos últimos encuentros del Real Oviedo en el Carlos Tartiere tuvieron más de agonía que de partido. Ante Mirandés y Las Palmas, los azules se jugaban el derecho a seguir con las mismas posibilidades de salvarse que el resto de rivales. Era ganar o ponerse a hacer cuentas imposibles. Sin embargo, el conjunto de Ziganda, tras el mejor partido de la temporada, salió de La Romareda con una vida extra que nadie tiene en este momento. Ahora toca aprovecharla.
Una semana larga y varios cambios en la mente del Cuco
Por primera vez desde que comenzase esta agónica recta final de curso, el Real Oviedo pudo disfrutar de una semana similar a las que se vivían antes de la pandemia. Un día de descanso y tres entrenamientos en El Requexón, además de la sesión de activación que se celebrará esta misma mañana en la ciudad deportiva azul. Tiempo para descansar, reflexionar y planificar.
Con toda la plantilla disponible salvo Riki, y siguiendo la línea marcada por José Ángel Ziganda en las últimas semanas, el once carbayón será diferente al que se exhibió en Zaragoza. Mossa, Borja Sánchez y Alfredo Ortuño tienen muchas papeletas para regresar a la titularidad en detrimento de Christian, Rodri y Samuel Obeng. Tres cambios y un 4-2-3-1 como el que se vio ante Las Palmas hace ocho días.
El otro invitado a la cita, el Racing, llegará con lo justo. Con la confianza de haber ganado al Huesca la pasada jornada, pero con lo justo. 11 bajas y solo 13 fichas profesionales en perfecto estado, ya que Nkaka y Barral, dicho por José Luis Oltra, están tocados y lo normal es que no jueguen. Ni rastro de los Luca Zidane, Enzo Lombardo, Álvaro Cejudo o Aitor Buñuel, grandes nombres de la plantilla cántabra. Pero así ganaron al Huesca, ojo.
Posibles alineaciones
Real Oviedo: Lunin; Nieto, Grippo, Arribas, Mossa; Luismi, Tejera; Sangalli, Borja Sánchez, Yoel Bárcenas; Ortuño.
Real Racing: Crespo; Carmona, Figueras, Olartua, Moi Delgado; Ortiz, Toribio; Nico Hidalgo, Martín Solar, Nando; Guillermo.
Árbitro: Daniel Jesús Trujillo Suárez, del Comité de Árbitros de Tenerife.
