El Real Oviedo afronta los cuatro últimos encuentros de la primera vuelta con la imperiosa necesidad de sumar puntos
28 nov 2019 . Actualizado a las 11:08 h.«Estas cinco jornadas serán finales y marcarán la temporada, está siendo durísima y tenemos que acabar la primera vuelta con el mayor número de puntos posibles». Así de contundente, igual demasiado, se mostró Javi Rozada en la rueda de prensa previa al encuentro en Las Palmas. Ahora, tras perder la primera de esas finales, el Real Oviedo afronta la segunda con la necesidad, todavía más imperiosa, de llevarse los tres puntos.
La primera vuelta se esfuma y el conjunto carbayón la encara sediento de puntos. Si nos vamos a las cifras y cogemos la peor muestra posible, es decir, que el Oviedo pierda los cuatro encuentros restantes, esos 15 puntos que ahora suma sería (junto al Bilbao Athletic de la 15/16) la cifra más baja en una primera vuelta de las últimas cuatro temporadas en Segunda División. La posibilidad está ahí, así que hay que mencionarla.
Si nos vamos al otro extremo, al positivo, los 27 puntos que tendría el Oviedo en caso de ganar todo hasta el parón de Navidad serían una cifra normal, que no te garantizaría la salvación pero que, ni mucho menos, te convierte en uno de los grandes aspirantes al descenso. Por ejemplo, con Hierro al mando en la 15/16, los azules finalizaron la primera vuelta con 29 puntos. El curso pasado, con Anquela, fueron 30 los puntos conseguidos en dicha fecha.
Rayo y Cádiz en el Tartiere. Alcorcón y Racing a domicilio. Esas son las cuatro finales otoñales que tiene por delante el Real Oviedo. Echando la vista atrás, y viendo qué hicieron otros equipos en anteriores temporadas, se hace indispensable sumar 20 puntos, como mínimo, para no vivir unas Navidades dramáticas. Sería una puntuación escasa, pero ni mucho menos insalvable. A eso aspira ahora mismo el conjunto oviedista.