Los focos apuntan al Vetusta

Pablo Fernández OVIEDO

AZUL CARBAYÓN

Jugadores del Vetusta en un entrenamiento en El Requexón
Jugadores del Vetusta en un entrenamiento en El Requexón Real Oviedo

El filial del Real Oviedo sigue preparando el último encuentro de la temporada ajeno a todos los rumores

16 may 2019 . Actualizado a las 10:18 h.

Si después de la gran temporada realizada por el Vetusta los jugadores del filial iban a tener un gran protagonismo en la época de rumores que precede al mercado de verano, la derrota sufrida por el primer equipo en Málaga hace que el objetivo del playoff de ascenso se diluya y los focos comiencen a apuntar hacia otros objetivos.

En la matinal de ayer, Javi Rozada dirigió una nueva sesión de entrenamiento en El Requexón con vistas al encuentro que este sábado cerrará la temporada en Durango. Como viene siendo habitual durante todo el curso, el técnico contó con jugadores que actualmente están cedidos en diversos equipos de Tercera y que el curso que viene podrían tener un hueco en el filial, caso de Orviz (Ceares), Eloy (Praviano) y Álex Menéndez (Covadonga).

Con Viti, Jero, Steven y Josín a las órdenes de Egea, el lesionado Ernesto, que estuvo hablando en la zona de vestuarios con gente del club, fue la única ausencia en el campo nº2 de la ciudad deportiva azul. Precisamente, el propio Ernesto y Rubén Lobato protagonizan los últimos rumores en lo que a traspasos se refiere.

El atacante, máximo goleador del Vetusta con 15 goles, tiene una importante oferta del Alcorcón. Según una información de Marca y La Nueva España, el club carbayón ya le habría comunicado al jugador su intención de ascenderle al primer equipo, pero la oferta podría haber llegado tarde. Hay que recordar que el propio Ernesto, hace solamente un mes, dijo en los micrófonos de la Cadena SER que acababa contrato y que el Real Oviedo todavía no había hablado con él.

Caso diferente es el de Rubén Lobato. El lateral zurdo de 25 años podría fichar por el Eibar, que lo cedería el curso que viene a un conjunto de Segunda División, una práctica habitual en el club de Ipurua. Lobato, que llegó en el verano de 2017 y fue una pieza importante en el ascenso, ha vuelto a ser un fijo en el carril izquierdo de la defensa del Vetusta, con una gran incidencia en las jugadas a balón parado.