Diego Martínez: «El Oviedo y el Carlos Tartiere hacen que saques lo mejor de ti»
AZUL CARBAYÓN
La Voz de Asturias entrevista al técnico del Granada, próximo rival del conjunto carbayón
04 may 2019 . Actualizado a las 15:58 h.Diego Martínez (Vigo, 1980) lleva tres años siendo uno de los técnicos de moda de la Segunda División. El entrenador gallego llevó al fútbol profesional al filial del Sevilla en 2016 y puso en el foco a muchos jugadores de la cantera hispalense. Después, dos gallitos de la división de plata como Osasuna y Granada le dieron la llave de sus respectivos proyectos. Tras un año complejo en Pamplona, es en la ciudad nazarí donde puede alcanzar el sueño del ascenso. Horas antes de visitar al Real Oviedo, en la vuelta de Sergio Egea al Carlos Tartiere, el técnico vigués atiende a La Voz de Asturias.
-¿Cómo llega el Granada a la recta final del curso en general y al partido del Carlos Tartiere en particular?
-Pues muy ilusionados. Llegar con 67 puntos faltando seis partidos es algo que era un sueño a principios de temporada, estamos por encima de las expectativas. Ilusionados y con ganas de competir el domingo en el Tartiere.
-Quedan seis jornadas para que finalice el curso. ¿Las semanas de trabajo ya son muy rutinarias o se siguen probando cosas nuevas?
-En el fútbol, o como lo entiendo yo, siempre es importante innovar, seguir probando cosas nuevas, pero también asentar todos esos hábitos que te han traído hasta aquí. Todo es necesario.
-¿A qué altura de competición empezó a ver sobre el césped el Granada que se había imaginado en pretemporada?
-Creo que eso no existe. De nada vale el Granada que tu quieres en ver a X altura de campeonato si en la jornada 1, 2 o 3 no has tenido el rendimiento suficiente para sumar puntos. Esto es una carrera de fondo.
Entiendo que necesitas sumar puntos desde primera jornada para ganar confianza, aumentar la convicción de tus jugadores en la idea de juego o sentirte cada día más competitivo. Esto es algo continuo, uno se tiene que estar reinventando cada jornada, pero respetando los valores y principio en los que crees. Y eso está en este equipo desde la jornada 1.
-Cogió un Granada diferente al ese que el curso pasado no consiguió el objetivo de pelear el ascenso hasta el final.
-Fue una pretemporada bastante complicada. Primero por el hecho de configurar una plantilla en sí misma, que en Segunda nunca es fácil, y segundo por prescindir de jugadores que por motivos económicos no podíamos tener.
Lo bueno de este equipo es que jugadores que el año pasado tenían un rol diferente al de este año y jugaban mucho menos han dado un paso adelante. Además, hemos acertado en las incorporaciones de los cedidos (Fede Vico, Pozo, San Emeterio, Martínez, Dani Ojeda). Esa era otra de las claves. También apostamos por jugadores (seis en total) que el año pasado venían de descender.
-Y les ha salido bien.
-En ese maremágnum hemos conseguido hacer un equipo competitivo y del que todos nos sentimos orgullosos. No solo en la construcción de la plantilla, en los objetivos y en las expectativas es un Granada muy diferente al del año pasado.
-¿Hay muchas diferencias entre Osasuna y el Granada?
-Cada etapa, cada ciudad y cada equipo son diferentes. Estoy muy agradecido a Pamplona, lamentablemente nos quedamos a un gol de jugar el playoff, pero creo que cada sitio tiene su idiosincrasia. Me alegro mucho por Braulio Vázquez (Director Deportivo de Osasuna) y su proyecto.
La temporada pasada fue un año de aprendizaje, con muchas dificultades pero muy bonito. Granada es otro tipo de proyecto y también está siendo un año de crecimiento. No se pueden comparar, estoy muy agradecido a ambos clubes y ciudades.
-Osasuna y Granada comandan la clasificación de Segunda. ¿Cree que tiene algo que ver que, tras ser el curso pasado equipos recién descendidos, este año se quitaran la presión que suele conllevar esa etiqueta?
-Soy un entrenador que cree en los proyectos. Proyectos en los que puedas ir asentando una identidad y también introducir cambios, configurando una plantilla base y que puedas ir añadiendo lo que necesites. En ese sentido la Segunda tiene el gran inconveniente de que si tienes una expectativa desmesurada y no la vas cumpliendo pues hace mucha mella en la mente y la confianza de los jugadores.
Lo vemos todos los años, pero parece que en la Segunda División no hay una conciencia clara de la igualdad existente. Hay equipos que ahora mismo están con cuarenta y pico puntos y que a lo mejor, si comenzase ahora la Liga, por cuestiones de dinámicas o acierto igual estaban entre los cinco primeros. No hay tantas diferencias. Aquí lo que hace daño son las expectativas. Nadie puede ganar todos los domingos y nadie pasa por ello sin sufrir.
-Por eso hay tantas destituciones, ¿no?
-Claro. El problema es que se generen ambientes alrededor del equipo que impidan que saques tu mejor versión, tanto individual como colectivamente. Todos los equipos pasan por fases muy buenas y por otras muy malas, como es tan larga da tiempo a todo.
«Parece que en la Segunda División no hay una conciencia clara de la igualdad existente»
-Ahora mismo están luchando por el ascenso directo. ¿Existe ese miedo a no conseguirlo y que el equipo llegue a un playoff con menos moral que los equipos que entran por debajo?
-Nosotros no miraremos la clasificación hasta la jornada 42. Intentaremos competir al máximo todos los partidos que nos quedan, como hemos hecho hasta ahora. Por lo demás, pues creo que en el fútbol hay ejemplos de todo tipo.
-¿Cómo fue ese paso del filial del Sevilla al primer equipo de Osasuna? ¿Notó que aumentaba la presión?
-Cada club tiene sus particularidades. El fútbol, el verde, el vestuario es común a todos los sitios. Luego evidentemente tienes que manejar diferentes circunstancias, pero no veo mucha diferencia. Creo muchas veces se hacen juicios desde el cliché y no es así. Todo es más normal.
Cada temporada es distinta, con jugadores y objetivos distintos. Todo eso hay que gestionarlo, pero en definitiva el trabajo es similar. He tenido la oportunidad de vivir en muchos vestuarios y muy diferentes. Hay que alejarse de la estandarización y centrarse más en las personas y en la especialización de los 25 jugadores que te toca dirigir.
-¿Se ha encontrado con muchos jugadores que se interesen de verdad en el juego? Que le pregunten y tengan inquietudes sobre lo que hace o no hace su equipo sobre el césped.
-Tenemos un vestuario al que le gusta el fútbol y que busca mejorar en los detalles del juego. Creen en la metodología de trabajo, en ese sentido tenemos suerte.
-Esta es su tercera temporada en la categoría. ¿Estamos ante la Segunda más complicada de los últimos años?
-Para mí está más difícil que nunca. Ya hace tres años me parecía muy igualada, pero creo que ahora el nivel de los equipos es mucho mayor. Vemos plantillas diseñadas para estar arriba del todo y ahora luchan por no descender. Esto se debe a la terrible igualdad y competencia que existe. Por eso es tan atractiva también, todas las semanas todos podemos ganar a todos y viceversa.
-A nivel de juego y resultados a partir de los recursos disponibles, ¿qué equipo le ha sorprendido más en lo que va de temporada?
-Sería injusto nombrar a uno, de verdad. Hay muchos equipos que están haciendo muy bien las cosas y a lo mejor uno te gusta más en ataque organizado, otro en su fase de contraataque, otro me gusta como trabaja la estrategia. Decantarme por uno sería injusto.
-En los últimos años en Primera División se está viendo una riqueza táctica casi sin precedentes. Muchos equipos que juegan bien y cada uno de una forma diferente. ¿Pasa también en Segunda?
-Nosotros mismos hemos manejado muchos sistemas a lo largo de la temporada. Creo que sí hay mucha riqueza técnico-táctica en Segunda, el hecho de que los equipos apuesten por formas diferentes de jugar es una muestra clara.
Al final en el fútbol el que importa es el jugador. Cualquier sistema o identidad tiene que ir enfocada a sacar el mejor rendimiento del jugador. Nosotros creemos en eso y por ello creemos en la variación del sistema. A veces introducimos modificaciones que en ocasiones no son ni percibidas por un análisis más ajeno, pero hay claves a lo largo de los partidos que están ahí.
-Y esa riqueza se ve reflejada en el mercado de verano.
-Eso es. Cada vez hay más jugadores de Segunda que se abren un hueco en Primera División. Hace 10 o 15 años eso no era así. Ahora es algo muy común que jugadores que lo hacen bien en LaLiga 123 tengan más cerca LaLiga Santander.
-¿Le sorprendió la destitución de Anquela?
-Siempre es desagradable que destituyan a un compañero. Veía al Oviedo un equipo muy competitivo metido de lleno en la lucha. Ahora entra otro compañero, que es Sergio Egea. Tanto el entrenador saliente como el que entra saben que es una situación normal dentro de nuestra profesión.
-¿Es complicado planificar la semana ante este tipo de rivales que acaban de cambiar de técnico?
-Hay cambios y matices, claro, pero esto es un juego de jugadores. Los entrenadores podemos ayudar e intentar orientar cosas, pero los protagonistas son ellos. El Oviedo tiene muy buenos futbolistas, viene de ganar en Almería y, más allá del cambio de esquema, seguro que para ellos fue una inyección de confianza importante.
-¿Qué destacaría de este Real Oviedo?
-Las bandas son muy buenas. Saúl y Bárcenas, siendo distintos, son grandes jugadores. Arriba tienen argumentos con Joselu, Ibra y Toché. Me gusta el centro del campo con Tejera, Javi Muñoz y la irrupción de Jimmy. Johannesson da mucha profundidad y atrás son veteranos y contundentes.
Saben competir, el partido ante el Oviedo fue uno de los más difíciles que tuvimos en Los Cármenes, se decidió por un detalle. Si ya de por sí el tramo final es bonito, tener partidos contra estos rivales y en un escenario como el Carlos Tartiere hace que saques lo mejor de ti.