Toché: «No puede haber un cambio de entrenador porque un córner entre o no»

AZUL CARBAYÓN

Toché en El Requexón
Toché en El Requexón Real Oviedo

Declaraciones del delantero azul antes de volver a Riazor

07 nov 2018 . Actualizado a las 11:46 h.

El Deportivo-Oviedo será un partido especial para José Verdú 'Toché' (Santomera, 1983). El delantero carbayón, que formó parte del Dépor que consiguió el ascenso a Primera en la 13/14, vuelve a Riazor por primera vez desde que dejó el club coruñés y analizó para La Voz de Galicia la situación actual del Oviedo y de Juan Antonio Anquela.

-Llega justo. Recién salido de una lesión.

-Sí. Tuve una rotura en el sóleo que parecía poco, pero al intentar volver recaí. La pasada jornada ya pude entrar en la convocatoria y tener minutos así que ahora estoy a tope para A Coruña.

-De ídolo en Oviedo a los 35.

-Aquí siempre me han tratado genial, y además deportivamente me ha ido muy bien, con muchos goles y la confianza de casi todos los entrenadores. Me siento respaldado por todo el mundo. Este año el rol es distinto porque somos tres delanteros de nivel, la lesión me ha tenido parado y ahora me va a costar entrar otra vez, pero seguiré dando guerra.

-Su baja le abrió hueco a Ibrahima Baldé y no le ha ido mal.

-Es un gran delantero. Está con mucha confianza porque lo ha hecho bien cada vez que ha salido, es muy corpulento pero no le falta técnica; muy completo. Él y Joselu son bastante diferentes y se compenetran bien. Este año hemos mejorado bastante la delantera y el míster lo aprovecha.

-¿Cómo es Anquela sin cámaras?

-Es súper llano, te gana en el tú a tú. Es muy cercano al jugador y lo agradecemos. Da siempre su cien por cien y no se le puede exigir más; busca que el equipo salga a cada partido súpermotivado. De él me quedo con la cercanía, su forma de vivir el fútbol. Estamos encantados porque hace muy fácil el día a día. En eso es el número uno. Este año hemos tenido muchos cambios en la plantilla y es más difícil, pero vamos a pelear por meternos arriba.

-¿Cree que una derrota en Riazor haría peligrar su puesto?

-El club confía en el míster y nosotros también, tenemos la confianza de que vamos a hacer un buen año. En Majadahonda, por ejemplo, nos marcan su gol en un córner en el 94. No puede haber un cambio de entrenador porque un córner entre o no entre.

-Se ha medido a varios equipos de Natxo ¿Qué impresión le da?

-Maneja un sistema un poco atípico. Un sistema medio raro que en el Zaragoza ya era difícil de contrarrestar. Me parece un gran entrenador que está haciendo un buen año. Ojalá tenga muy buenos resultados a partir de la próxima semana.

Toché había coincidido con Carmelo Del Pozo en el Oviedo y cuando fichó por el Deportivo le auguró un éxito rotundo en A Coruña. Ve que el tiempo le da la razón: «Con Carmelo no tenía ninguna duda; deportivamente es de lo mejor que podía fichar el club, de los que se equivocan muy poco. El Dépor ha acertado y con eso tiene mucho trabajo hecho».

-Del Pozo se marcó entre sus objetivos un vestuario unido para momentos duros. El Oviedo atraviesa uno, ¿cómo lo llevan?

-Somos una plantilla muy corta. Sabemos que todos vamos a jugar y eso hace que todo el mundo se sienta importante. Somos una piña aunque estemos pasando una mala racha. Saldremos; tenemos jugadores para estar más arriba.

-Su carrera es también un máster para su futuro como entrenador ¿De quién ha aprendido más?

-De todos se aprende, hasta del entrenador malo. La experiencia me hará intentar equivocarme menos, pero es una profesión en la que muchas cosas no dependen de uno. Este año por ejemplo tenemos una plantilla corta y nos lesionamos cuatro a la vez; el pasado éramos muchos y siete tenían que quedarse sin convocar. En el fútbol no hay una voz que te diga: «Esto es lo ideal». El entrenador se tiene que adaptar a lo que hay y eso intentaré hacer yo.

-El Toché entrenador se va a encontrar un fútbol muy cambiado a ese en el que empezó a jugar.

-Cuando yo empecé hace muchos años todos jugaban con dos delanteros, eran básicos. Ya no. La gran diferencia está en la táctica porque ahora los jugadores estamos todos a un alto nivel físico, hay menos distancia en ese terreno. Pero al final sigue tratándose de buscar soluciones a los problemas que plantea el rival. Hacemos el fútbol que podemos.