Recuerdos de un playoff

Pablo Fernández OVIEDO

AZUL CARBAYÓN

Jugadores del Vetusta celebran el gol al Arenas de Getxo
Jugadores del Vetusta celebran el gol al Arenas de Getxo Javier Merino (DAWLAD)

Tres protagonistas de la promoción de 2015 nos cuentan cómo vivieron aquel Vetusta-Arenas de Getxo

16 may 2018 . Actualizado a las 05:10 h.

El 24 de mayo de 2015, el Real Oviedo jugó ante el Cádiz, en el Carlos Tartiere, la ida del playoff de ascenso a Segunda División. Dicho encuentro se disputó por la tarde, pero en la matinal de aquel domingo, la entidad carbayona vivía otra fase de ascenso.

El Vetusta, filial del club azul, recibió al Arenas de Getxo en un Requexón abarrotado. El equipo entrenado por Iván Ania finalizó la Liga en tercera posición y el sorteo les deparaba una durísima eliminatoria ante uno de los rivales con más potencial de la categoría. 

Una temporada fantástica

«Nosotros desde el principio sabíamos que teníamos un equipo para competir e intentar estar en la parte alta de la clasificación, pero objetivo como tal nunca nos lo planteamos», dice Adrián Llano, actualmente en el Caudal y uno de los capitanes de aquel Vetusta. 

El mediocentro, que estuvo tres años en el filial carbayón, no duda en señalar al gran artífice de aquel tercer puesto: «Iván Ania cambió completamente la dinámica del equipo y sin duda es el máximo culpable de lo que se consiguió esa temporada. Nos hizo creer que se podían conseguir cosas importantes».

Adrián Llano en el Vetusta-Arenas de Getxo
Adrián Llano en el Vetusta-Arenas de Getxo Javier Merino (DAWLAD)

Iván Fernández, que disputará el playoff de ascenso con el Marino, también jugaba en ese Vetusta 14/15: «Ese año se había hecho muy buena plantilla y durante la temporada se incorporó Cristian Rivera, que nos dio un salto de calidad al equipo».

«Teníamos un equipo joven, con muy buena proyección y que se hizo muy fuerte en casa, donde no perdimos en toda la temporada», explica Marcos de Castro, arquero titular del filial azul dirigido por Ania y que, por cierto, acaba de ascender a Tercera siendo el jefe de la portería del Universidad de Oviedo.

Cómo se vivieron aquellas dos semanas

«Los focos eran para el primer equipo, ya que el ascenso a 2ª era el objetivo de todo el club y de la afición, por lo que nosotros estábamos un poco mas en la sombra», dice Iván. «Para nosotros fue una semana normal, no trabajamos de manera distinta a como lo veníamos haciendo durante todo el año», coinciden Adrián y Marcos.

Eso sí, el portero no duda en señalar que: «nuestra temporada no pasó desapercibida. En mis años de canterano, nunca vi tanta gente con la camiseta del Oviedo como aquella mañana del partido de ida en El Requexón».

Marcos en el Vetusta-Arenas de Getxo
Marcos en el Vetusta-Arenas de Getxo Javier Merino (DAWLAD)

Una eliminación muy dura

Pocos finales más amargos que el que vivió el filial carbayón en aquella eliminatoria. Tras vencer en Oviedo por 1-0, los de Iván Ania aguantaron en Gobela todos los ataques del Arenas, hasta que en el 93' el conjunto vasco igualó la eliminatoria. Ya en la prórroga, el Vetusta sucumbió.

«Para mi la clave de la eliminatoria estuvo en el partido de ida, donde yo creo que fuimos muy superiores al Arenas y merecimos un resultado mejor, al final dejamos con vida a un equipo muy difícil en su campo», comenta Adrián Llano

Iván y Marcos no dudan en señalar la expulsión de Llano en el encuentro de ida como una de las claves de la eliminatoria, al que definen como «jugador muy importante para nosotros, líder en el vestuario y continuidad de Iván Ania sobre el campo».

El portero no se olvida de aquel encuentro en Getxo: «Personalmente, he de decir que la experiencia fue horrible. Cuando nos marcaron el gol y el árbitro señaló el final del partido, se me quería caer el alma la suelo. Fue un fiel reflejo de lo que le puede pasar a un portero, mostrar seguridad durante toda la eliminatoria y, en la última jugada, un error en la toma de decisión puede echarlo todo por la borda».

Cómo ven a este Vetusta de Javi Rozada

«Tuvimos una buena pelea durante el año, pero fueron superiores en el último mes ya que, gracias en parte a su amplia plantilla, llegaron mejor que nosotros», dice Iván sobre el mano a mano que mantuvieron Marino y el filial azul.

Iván Fernández en el Vetusta-Arenas de Getxo
Iván Fernández en el Vetusta-Arenas de Getxo Javier Merino (DAWLAD)

«Yo sobre todo destacaría, al contrario de lo que suele ser el perfil típico de un filial, que son un equipo muy serio en defensa, han encajado muy poco durante todo el año», explica Adrián Llano. El jugador del Caudal quiso hacer hincapié en un jugador de los carbayones: «Si tuviera que destacar a alguien sería a Roni (David González), que ya estuvo en el playoff contra el Arenas y fue precisamente el goleador. Además de su calidad creo que la experiencia que tiene puede ser un plus para ellos».

Marcos destaca la experienca del conjunto de Rozada, a pesar de ser un filial: «Tuve la oportunidad de ver el partido de Miramar y me sorprendió como en los últimos diez minutos los jugadores del Marino estaban desquiciados. Les vi una picardía que muchas veces se echa en falta en equipos tan jóvenes».

En lo referente al técnico del Vetusta, Adrián Llano lo conoce bien tras pasar un curso con él en el Lealtad: «La palabra que define a Javi es intensidad, con él no hay un momento de relajación, ni entrenando ni compitiendo. Creo que se ha adaptado muy bien a dirigir a un filial, que no siempre es fácil».

Mutilvera y un último consejo

Llano coincidió con el equipo navarro la temporada pasada en 2ªB y, a pesar de conocer poco a la plantilla actual debido a la amplia reestructuración que llevaron a cabo, señala que «los navarros, aunque no destacan por el fútbol que practican, si lo hacen porque compiten de una manera increíble. Su campo, pese a ser sintético, tiene buenas dimensiones, por lo que yo creo que el Vetusta puede adaptarse bien allí».

«Lo primero es intentar quitar los nervios de jugar un playoff lo antes posible, para después centrarse en que es un partido más. Que lo disfruten al máximo, que estén concentrados los 180 minutos y que tengan mucha suerte», son los últimos consejos de Iván Fernández y Marcos de Castro. Que así sea.