Luis Arturo: «Alfonso Herrero va a ser coreado por la grada del Tartiere»

Pablo Fernández OVIEDO

AZUL CARBAYÓN

Luis Arturo en la redacción de La Voz de Asturias
Luis Arturo en la redacción de La Voz de Asturias Pablo Fernández

Azul Carbayón entrevista al actual seleccionador asturiano y ex entrenador del Real Oviedo Vetusta

22 dic 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

El gran momento que vive en la actualidad el Real Oviedo Vetusta (luchando por el liderato de Tercera con el Marino de Luanco) no es algo que surgiera de la nada. Es fruto de un trabajo que comenzó la temporada pasada a las órdenes de Luis Arturo. Con el ahora técnico de la Selección Asturiana, los Josín, Prendes, Asier, Steven, Edu Cortina, Ánder y compañia se foguearon en una categoría novedosa por entonces para casi todos ellos.

Azul Carbayón habla con el técnico sobre su paso por El Requexón, de la irrupción de su ex pupilo Alfonso Herrero en el primer equipo, del juego del nuevo Real Oviedo de Anquela, de su polémica marcha cuando ya parecía renovado y de muchas cosas más. 

-¿Cómo se produjo tu llegada al Real Oviedo?

-Tras acabar la temporada con el Ribadesella (ascenso a Regional Preferente), donde estaba muy a gusto he de decir, me salen otras opciones y comunico al club que no voy a continuar. Me llamó el Llanes, pero justo en ese momento surgió la opción del Real Oviedo y no me lo pensé, claro.

-Llegas al Requexón tras una 15/16 muy irregular del Vetusta. Muchos jugadores de fuera que llegaron y a final de temporada marcharon y un equipo que necesitaba una reestructuración.

-El panorama que nos encontramos es un proyecto que, desde el primer momento, quería contar con muchos jugadores de la casa. Ese fue el planteamiento inicial. Teníamos una generación muy buena que llegaba del juvenil y por la que había que apostar, además de reforzarnos en las posiciones que nos hiciera más falta.

El cambio de división de honor a Tercera es muy grande y el comienzo no fue fácil. La estructura ofensiva estaba clara debido al trabajo metodológico del club, pero la defensiva no. Trabajamos mucho ese aspecto en los primeros meses.

-En una temporada especial por ese reencuentro con el Sporting B, ¿cuáles eran los objetivos clasificatorios?

-El objetivo interno era jugar el playoff de ascenso. Más allá de que fuera complicado o no, uno tiene que ser ambicioso. Los críos se deben formar, pero cuando más arriba compitan y más corto sea el paso al primer equipo mejores jugadores serán.

-Os quedasteis a las puertas.

-La Tercera del año pasado fue muy dura. Nosotros teníamos un equipo muy joven y con poca experiencia. Hicimos 75 puntos y hasta la penúltima jornada luchamos por meternos, pero cuando los demás equipos hacen 84 puntos o más pues es muy difícil. Me quedo con que luchamos por el objetivo y rendimos al máximo sin cortar la progresión de los chavales, algo que era prioritario. La temporada fue, para mí, de notable.

Luis Arturo dirige un entrenamiento en El Requexón
Luis Arturo dirige un entrenamiento en El Requexón Real Oviedo

-Cómo vivió el equipo las semanas previas a los dos derbis que hubo en la temporada.

-En lo extradeportivo no notamos mucha diferencia respecto a otros partidos. Internamente, en el vestuario, sí había muchísima ilusión.

-En El Requexón quedáis 1-1.

-Llegábamos tras pocos meses de trabajo. En el primer tiempo ellos fueron mejores, pero nuestro segundo tiempo fue espectacular. Uno de los momentos de juego más potentes de la temporada. Jugamos casi 45 minutos en su campo y si el partido dura cinco minutos más ganamos.

Aquel gol de Viti en los minutos finales nos reforzó mucho tanto deportivamente como anímicamente, porque al final no solo formamos futbolistas, formamos futbolistas del Real Oviedo. Con un carácter y una idea determinada relacionada directamente con el club y su idiosincrasia.

-Yo siempre digo que estas últimas generaciones de canteranos que llevan años en el club son diferentes. Se han criado con un Oviedo en Tercera y Segunda B, lo fácil hubiese sido no hacerse oviedista.

-Así es. Por eso no hay que dejar de inculcar a los chavales lo que significa estar en ese club.

-En Mareo os lleváis los tres puntos.

-Nos quedamos con uno menos al comienzo del segundo tiempo. La sensación durante todo el encuentro fue de control de la situación. Tras el gol de Edu Cortina supimos replegar bien y salvo algún minuto al final no sufrimos mucho.

Fue un partido muy especial y que creo que va a ser recordado por la gente del Oviedo. Creo que fue un punto de inflexión incluso en el club. El final del partido fue muy especial, tanto en el césped como en el vestuario con los chavales. Me cuesta y me emociona recordarlo.

Me cuesta y me emociona recordar lo que vivimos en el vestuario tras ganar el derbi en Mareo

-Durante el curso varios jugadores mostraron un nivel muy alto, destacando nombres como Josín, Prendes, Asier, Steven o Edu Cortina. Viti por desgracia no pudo participar mucho. ¿Qué me puedes decir de ellos?

-Viti ya es una realidad. Con nosotros casi no pudo jugar, pero es un chaval especial. Edu Cortina es un jugador que tiene muchísimas posibilidades, muy completo y con muchos recursos. Steven tiene gol, que es algo difícil de encontrar. Luego Josín y Prendes son muy diferentes. Prendes es más físico, más contundente. Josín es elegante, con una gran salida de balón. De esos defensas que los ves y te llama la atención.

Asier tiene un talento brutal. Es el más diferente. Su caso es cuestión de paciencia. El año pasado evolucionó muchísimo y este sigue en la misma línea. Paciencia porque jugadores como él son muy difíciles de encontrar. 

-A Anquela parece que le gusta más Prendes.

-Sí. Anquela es un entrenador que le gustan mucho los defensas intensos, agresivos y fuertes. Prendes es ese perfil. Me alegro por él porque le tengo mucho cariño y con nosotros mejoró mucho, de octubre a mayo se convirtió en otro futbolista.

-Hablemos de Alfonso Herrero. ¿Qué pensaste cuando lo viste por primera vez?

-Sabíamos que pasó una época complicada en Madrid debido a una lesión. Fue la gran apuesta del club del pasado verano. El primer día que baja con nosotros fue en un entrenamiento previo a un partido de Copa Federación en Ceares.

Al final es complicado pasar de Valdedebas a La Cruz, hay que ponerse en su situación. Recuerdo que entramos en el vestuario y le dije que estuviese tranquilo, que iba a estar con un grupo de jugadores de los que no se iba a olvidar y en un ambiente buenísimo.

-Su 16/17 es muy buena.

-Sí, el nivel que mostró fue intachable. Tuvo una influencia clarísima en el equipo. Me acuerdo de una parada que le hace a Jandro (ex jugador del Oviedo en 2003) en un partido ante el Covadonga en El Requexón. No vi una parada igual en mi vida. A mí me recuerda a Arconada. Ese perfil de portero de no mucha envergadura, pero con unas capacidades tremendas para parar.

-¿Lo ves haciéndose una carrera en el fútbol profesional?

-Sin duda. Y es algo que ya dije el primer día que le vi jugar. Y se lo dije a él en una conversación que tuvimos allá por enero o así. Le dije que estaba convencido de que se iba a quedar en el primer equipo y que le llegaría la oportunidad.

-En Sevilla realiza un partido espectacular.

-El fútbol se basa en las dinámicas y él ahora está en una muy buena. Tras pasar los primeros partidos e ir cogiendo confianza poco a poco, ahora atraviesa ese momento en el que lo visualiza todo, se adelanta a todo. El partido en Viejo Nervión es el ejemplo perfecto.

Yo creo que es un portero que puede crecer con el Oviedo y que puede llegar a Primera División con esta camiseta. Estoy seguro de que el Tartiere va a corear su nombre.

Alfonso es un portero que puede crecer con el Oviedo y que puede llegar a Primera División con esta camiseta

-Cuando Anquela apostó hace unos meses por el esquema de tres centrales y carrileros pensé en el Vetusta de la pasada temporada. ¿Ves similitudes entre tu equipo y este Real Oviedo?

-Nosotros estuvimos dos meses trabajando el sistema antes de ponerlo. Teníamos unos laterales muy ofensivos y centrales de diferentes perfiles para adaptarse a la línea de tres. La diferencia es que nosotros juntábamos mucha gente en el centro del campo y el Oviedo de ahora tiene un doble pivote más fijo, dándole más libertad a Saúl y Aarón/Yeboah.

Cuando el Oviedo jugaba con cuatro me decía a mí mismo que Anquela lo tenía ahí para probar con la defensa de tres. Al final lo hizo y el resultado es excelente. Lo que más me está gustando de este Oviedo es su organización defensiva, basada en una presión coral y muy bien ejecutada. El partido ante el Lorca es el mejor ejemplo.

Es un acierto tremendo que dice mucho del entrenador y de la capacidad de adaptarse a lo que tiene.

-Se habló mucho de tu salida. En teoría la renovación estaba pactada, pero al salir Roberto Robles del club tú no continuaste.

-Fue una situación difícil de explicar. Sí es verdad que nosotros estábamos planificando la nueva temporada en el filial, ya que era lo que se había hablado con el club.

Luis Arturo dirige un entrenamiento del Real Oviedo B
Luis Arturo dirige un entrenamiento del Real Oviedo B Real Oviedo

-Pero…

-Yo siempre digo que tengo que estar muy agradecido por haber sido entrenador del Real Oviedo Vetusta. Es algo que no olvidaré en la vida, independientemente de lo que pasara después. Durante el transcurso de la temporada todas las personas que trabajan en el club se portaron muy bien conmigo, sin excepción. Lo que tuve que hablar con el club lo hice, y nada más.

Por encima de todo yo soy un entrenador de Llanes que entrenó en Tercera, en Preferente y en 1ª Regional, y que tuve la oportunidad de entrenar al Real Oviedo. Eso es algo que no olvidaré en mi vida. Creo que conmigo se cometió un error de forma, ¿pero ese error pesa más en la balanza que los buenos momentos vividos? Para nada. Me quedo con lo positivo.

-¿Volverías a entrenar en el Real Oviedo?

-Ojalá. Sinceramente creo que es el lugar donde tengo que estar, porque lo siento así. Tengo los mismos valores que el club y me quedé marcado para toda la vida. Es fácil decirlo, pero es que fue así. Es como ese virus que se te mete dentro y no hay medicamento que te lo quite.

El oviedismo es como ese virus que se te mete dentro y no hay medicamento que te lo quite.