El Real Oviedo vence en el último suspiro

ALFONSO SUÁREZ OVIEDO

AZUL CARBAYÓN

Saul Berjon Real Oviedo Horizontal.Saul Berjon manda el penalti por encima del larguero
Saul Berjon manda el penalti por encima del larguero LFP

Los azules, con 10 jugadores, se imponen al Nástic en otra remontada en la segunda parte

12 nov 2017 . Actualizado a las 23:40 h.

Importantísima victoria de los azules en el Nou Estadi de Tarragona (1-2). Los de Anquela remontaron un marcador adverso por segunda vez consecutiva y consiguen sumar por primera vez dos victorias seguidas. Tres puntos de oro que permiten a los de la capital del Principado acechar los puestos de playoff.

Apostó Anquela por mantener el mismo once que venció al Lugo con el único cambio obligado de Cotugno por Johannesson. El andaluz, eso sí, ordenaba a su equipo con un 4-3-3 y no con la línea de tres centrales que propició la remontada hace 7 días ante el Lugo.

Los primeros minutos fueron de claro dominio local que buscaban el área de Juan Carlos. Eso sí, el Real Oviedo no estaba fuera del encuentro, sino que parecía responder a un plan preconcebido para encontrar espacios a la espalda de la defensa local.

Pese a unas primeras intentonas del Nástic, como una falta directa de Tejera que se fue fuera por poco, fueron los asturianos los que avisaron con mayor peligro tras una contra rápida entre Saúl, Linares y Aarón. El disparo del ilicitano lo atrapó Dimitrievski. Lo intentó también Linares desde fuera del área, pero su disparo se fue fuera por poco.

Aunque los catalanes llegaban con soltura a las inmediaciones de la portería azul, fue el equipo de la capital del Principado el que dispuso de la mejor ocasión de la primera parte. Carlos Hernández se adelantó a Perone dentro del área, recibiendo una patada y un penalti claro.

Saúl Berjón trató de repetir el lanzamiento que ejecutara frente al Lugo. Sin embargo, en esta ocasión, el esférico se fue muy por encima del larguero local. Una lástima para los azules que desaprovecharon una oportunidad única de ponerse por delante en el marcador.

Pese al error, parecía que los asturianos se habían asentado en el encuentro y comenzaban a dominarlo. Cuando mejor estaban, un error doble de Mossa y Juan Carlos propició que el Nástic dispusiera de su ocasión desde los 11 metros. El defensa se confió en un balón largo ante la presión de Uche, derribándolo en el área de manera torpe. Juan Carlos, con gran ventaja, tardó demasiado en salir. Manu Barreiro transformó el lanzamiento de manera magistral. Era el 1-0 para los locales.

Los últimos intentos azules no sirvieron para nivelar el marcador. Apenas un disparo de Aarón que Dimitrievski paró con facilidad. Como hace siete días, el Real Oviedo tenía que dar la vuelta al marcador en la segunda parte.

Gran reacción en la segunda parte

Salió con más contundencia el Real Oviedo, consciente de la necesidad de volcarse en la portería del Nástic. Anquela apostó por volver al dibujo con 3 centrales y dos carrileros largos que dieran más presencia ofensiva a los azules. No había pasado ni un minuto cuando Miguel Linares ya remataba fuera un centro de Mossa desde la izquierda.

Volvió el aragonés a tener una buena ocasión tras una gran asistencia de Mossa. Su remate fue enviado a saque de esquina con grandes dificultades. Los azules comenzaban a cercar el arco de Dimitrievski. Precisamente, en ese córner tuvieron otra ocasión los de Anquela pero la defensa finalmente consiguió despejar el disparo de Cotugno.

Se vio obligado Anquela a mover el banquillo después de un tremendo golpe entre Forlín y Manu Barreiro, cabeza con cabeza, que dejó al argentino conmocionado. El preparador andaluz introdujo a Pucko en lugar del defensa y ordenando al equipo, de nuevo, con 4 defensas.

La tuvo de nuevo Linares con un precioso remate de cabeza que rozó la escuadra de Dimitrievski. El centro desde la derecha fue obra de Cotugno. Eran los mejores minutos de los asturianos en toda la segunda parte, rondando el empate gracias a su insistencia ofensiva.

Pero el Nástic no renunciaba a nada y a punto estuvo de hacer el 2-0 en una gran jugada por banda izquierda que finalizó Uche con un disparo muy ajustado al palo de Juan Carlos.

El susto no cambió un ápice el guion del partido, con un Real Oviedo volcado sobre la portería de Dimitrievski. La tuvo Berjón con un disparo con su pierna izquierda que, de nuevo, se fue muy arriba.

El que sí consiguió el empate fue Carlos Hernández que remató de manera excepcional un gran centro de Aarón desde la izquierda. Los asturianos conseguían nivelar el electrónico de manera totalmente justa.

El empate pareció calmar las ansias de los de la capital del Principado. No es que firmaran el empate, pero los intentos ya no eran tan claros. El cansancio también hizo mella en gran parte de los futbolistas. Pese a ello, Anquela no movía el banquillo.

Dispusieron los oviedistas de una buena ocasión en un contraataque que Aarón y Linares no consiguieron culminar. Pero como a los azules les gusta complicarse la vida, veían como en los últimos minutos tenían que jugar en inferioridad numérica por culpa de la expulsión por doble amarilla de Carlos Hernández.

Sin embargo, en un arranque de furia, el Real Oviedo volvió a disfrutar de una ocasión inmejorable para llevarse el partido. Mossa recibió un balón en el interior del área de Yeboah y fue derribado por Suzuki.

En esta ocasión, con Saúl fuera del campo, fue Aarón el encargado de lanzar la pena máxima. Su lanzamiento, mordido y pegando incluso al suelo, entró con suspense tras tocarlo Dimitrievski. Era el 1-2 para los asturianos que así conseguían la primera victoria lejos del Carlos Tartiere.

Tres puntos de oro que permiten a los de Anquela respirar tras liberarse de una pesada carga y comenzar a mirar hacia arriba en la clasificación.

Nástic de Tarragona: Dimitrievski; Suzuki, Xavi Molina, Perone, Abraham; Gaztañaga, Tejera (Zahibo, min 70), Uche, Maikel Mesa (Jean Luc, min 83), Delgado (Javi Jiménez, min 67); Manu Barreiro.

Real Oviedo: Juan Carlos; Cotugno, Carlos Hernández, Forlín (Pucko, min 63), Christian Fernández, Mossa; Folch, Mariga; Aarón, Saúl Berjón (Yeboah, min 87), Linares (Valentini, min 90). .

Goles: 1-0 Manu Barreiro de penati (min 40). 1-1 Carlos Hernández (min 72). 1-2 Aarón, de penalti (min 92).

Tarjetas: El árbitro Pizarro Gómez mostró tarjeta amarilla a los locales Gaztañaga, Suzuki y Dimitrievski, y a los visitantes Saúl Berjón, Carlos Hernández (doble amarilla), Mossa y Linares.