El Grupo Ornitológico Mavea contabilizó hasta 2.000 ejemplares en algunos momentos en el estuario avilesino
15 may 2019 . Actualizado a las 13:37 h.El Grupo Ornitológico Mavea ha hecho un balance de la espectacular llegada de aves migratorias al estuario avilesino, donde se han podido ver más de 2.000 aves en algunos momentos, informa EFE. Más de un centenar de personas se acercaron a la ensenada de Llodero y el Aula de Naturaleza el pasado lunes, 13 de mayo, para observar «un gran espectáculo» de aves limícolas en la ría de Avilés, que continuó en menor medida este martes.
A lo largo del pasado lunes miles de aves estuvieron entrando y saliendo del estuario, frenadas en su ruta migratoria por las fuertes rachas de viento del este y nordeste. En algunos momentos se pudieron ver más de 2.000 aves en la ensenada de Llodero y al final de la tarde aún se podían contar algo más de un millar.
A la puesta de sol, con la marea subiendo, las aves buscaban acomodo ría adentro, «echando seguramente en falta sitios donde poder descansar tranquilamente», relata Mavea. Aparte del número total de individuos, otros aspectos llamaron la atención como la variedad de especies, con al menos 17 limícolas y otras 8 de otras aves acuáticas.
«Sobre todo el récord alcanzado para una especie concreta, como es el chorlitejo grande, del que pudieron contarse a media tarde alrededor de 1.200 individuos», subraya la organización conservacionista. Ayer descendió el número, pero siguieron viéndose algunas especies muy interesantes como fumareles y espátulas.
La presencia de tal cantidad de aves también propició la observación de lances de caza de una pareja de halcones y de un aguilucho lagunero y la presencia de águila calzada. Se pudieron observar en estos días al menos 30 especies de aves acuáticas, según el cálculo de Mavea.
De seguir las rachas de viento fuerte del este, seguramente los próximos días se pueda seguir disfrutando del espectáculo. «Desgraciadamente, mucha gente paseando con perros sueltos y algunos fotógrafos de dudosa ética causan molestias indebidas en un momento crítico de la vida de estas aves», lamenta el Grupo Ornitológico.