
La diputada del Grupo Mixto señaló que reavaluará su decisión consultando a sus bases tras la dimisión de la consejera de Industria
17 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Una cosa son los ritmos judiciales y otra son los ritmos políticos. Nada detiene la investigación sobre las causas de la explosión en la mina de Blue Solving, en Zarréu, en Degaña, que terminó con la vida de cinco trabajadores. Y las primeras indagaciones apuntan a una posible irregularidad, muy grave, de que se estaba extrayendo carbón sin licencia. Pero el ritmo del debate político es otro, y la escalada para pedir responsabilidades políticas, que se aceleró desde el lunes a gran velocidad poniendo el foco en la consejera de Industria, se frenó el miércoles cuando Belarmina Díaz presentó su renuncia.
En esa presión política, una elevada tensión que llegó a poner en riesgo el pacto de gobierno, tuvo mucho peso el anuncio de los grupos de la oposición de pedir la apertura de una comisión de investigación parlamentaria sobre el accidente. La anunciaron de forma conjunta PP y Foro y también manifestó su interés en hacerlo la diputada del Grupo Mixto Covadonga Tomé. Pero muchas cosas cambiaron tras el anuncio de Belarmina Díaz de presentar su dimisión, la misma posibilidad de que la comisión llegue a abrirse y todo ello a pesar de que, en su discurso y aún conociendo ya que dejaba el cargo, insistió en que comparecería ante el parlamento las veces que fuera necesario. Seguramente porque contaba con que la llamaran desde esa comisión.
Pero quizá no la haya. Covadonga Tomé señaló este miércoles, tras el pleno que incluye el turno de preguntas al presidente que consideraría la decisión, que consultaría con las bases de su grupo la orientación de su voto. En su intervención recalcó: «Valoramos, cómo no, la dimisión de la consejera. Quizás debió ocurrir inmediatamente al conocerse las irregularidades que llevaron a la tragedia y el escenario sería otro. Pero no, no estamos en el marco de la derecha. Estamos sin prisa, desde la reflexión, desde la conversación, en nuestro propio camino, sin escuchar presiones de ningún lado, ni de la izquierda, ni de la derecha, ni de arriba, ni de abajo, de ningún lado, escuchando única y exclusivamente la voz de nuestra gente que pide explicaciones y nuestra propia conciencia».
El voto de Tomé es clave porque es el que decanta la mayoría absoluta en la cámara a favor en contra de la izquierda. ¿Cómo es el proceso para abrir una investigación parlamentaria?
Según el reglamento de la cámara pueden solicitar abrir una comisión de investigación el Consejo de Gobierno, dos grupos parlamentarios o una quinta parte de los diputados. La propuesta debe presentarse con una exposición de motivos ante la mesa de la cámara y arranca automáticamente a los siete días si ningún otro grupo se opone. Y esta es la cuestión, porque la propuesta conjunta de PP y Foro ya cumple el requisito de los dos grupos formalizando la petición, pero si otro se opone es necesario que se vote en el pleno. Y hay grupos que se oponen, tanto PSOE como IU que además a lo largo de las últimas jornadas han insistido en que ven un riesgo muy elevado de que la comisión termine siendo un «circo» que haga pasar a las familias de los fallecidos un nuevo calvario.
Los ritmos de la política son los que son. Terminada la sesión de este miércoles se abre para el parlamento, como para la inmensa mayoría de la población, un largo puente de Semana Santa, la admisión a trámite de la petición de la comisión de investigación de PP y Foro tendría que darse la semana próxima y, ante el previsible rechazo de los grupos del Gobierno, llevar a pleno el debate también exigiría posponerlo al menos una semana más. En todo caso si hay votación será el de Tomé un disputado voto, el que puede inclinar la balanza a uno u otro lado.