Aplauso de la Fundación Franco al arzobispo de Oviedo: «La cruz del Valle de los Caídos no tiene ideología ni es enseña de bandería»

ASTURIAS

Jesús Sanz Montes recibe el reconocimiento de la fundación franquista tras su postura sobre la resignificación del espacio: «Como era de esperar, ha tenido que ser el siempre valiente arzobispo de Oviedo quien ha alzado su voz con firmeza y claridad en defensa del valle»
10 abr 2025 . Actualizado a las 05:00 h.Aplauso público de la Fundación Nacional Francisco Franco (FNFF) al arzobispo de Oviedo, Jesús Sanz Montes, después de posicionarse claramente sobre la resignificación del Valle de los Caídos, actualmente denominado Valle de Cuelgamuros. El debate sobre la redefinición del espacio de San Lorenzo de El Escorial ha sumado esta semana un nuevo episodio con la intervención de Sanz Montes, quien en su carta dominical ha defendido el significado espiritual del monumento y criticado lo que considera una ofensiva ideológica contra la cruz y la comunidad religiosa que reside en el recinto. «Esa inmensa cruz, la más alta que hay en el universo mundo con sus 152’5 metros, no es enseña de bandería, no responde a ninguna sigla política, ni es tutora de ideología alguna», señala en su escrito, que ha sido apoyado y aplaudido públicamente por parte de la Fundación Francisco Franco.
El Gobierno de España busca redefindir el significado del Valle de los Caídos —actualmente renombrado como Valle de Cuelgamuros— como parte de una política de memoria histórica, eliminando símbolos del franquismo de lugares públicos. El objetivo es transformar el espacio en un lugar de reconciliación, de memoria histórica y de homenaje a las víctimas de la Guerra Civil, tanto de un bando como de otro, en lugar de un símbolo del franquismo. Un proceso que buscar convertir el valle en un espacio más representativo de todos los caídos durante la guerra. Mientras el Gobierno sigue negociando con el Vaticano para llegar a un acuerdo sobre la resignificación del sitio, tanto la FNFF como varios sectores de la Iglesia continúan defendiendo su visión del lugar. La última a cargo del siempre polémico arzobispo de Oviedo.
Sanz Montes publicó una carta el pasado domingo en la que recuerda que «en este valle nuestro hay una cruz enhiesta entre las colinas verdes de sus montañas», una cruz que, según sostiene, «no responde a ninguna sigla política, ni es tutora de ideología alguna». En su opinión, se trata de «un espacio de encuentro y reconciliación tras el conflicto bélico entre hermanos» donde «reposan en paz (hasta que algunos han querido perturbar ese sagrado descanso para jalear esa memoria en beneficio propio) personas que cayeron detrás de los dos bandos, bajo las dos banderas, en medio de ambas trincheras».

La carta recoge una crítica a quienes, según el arzobispo, tratan de eliminar los símbolos cristianos de la vida pública: «El alarde de un calculado ataque a esa cruz tan visible y significativa se hace en aras de una falsa equidistancia [...] enarbolando la neutralidad religiosa desde un impositivo laicismo que erradica nuestra historia». También afirma que «querer utilizar a los muertos para ganar batallas perdidas reabriendo las heridas que tanto nos costaron cerrar» forma parte de «una maldad irresponsable» que «insidia la convivencia en nuestra sociedad española». En paralelo, Sanz Montes menciona «quebraderos de cabeza judiciales que en torno a la corrupción de gente muy cercana con sus vínculos familiares» podrían estar detrás de estas decisiones, como forma de desviar la atención pública. La carta finaliza invocando un mensaje de reconciliación religiosa: «La misericordia y la fidelidad se encuentran, la justicia y la paz se besan (Sal 85). La Cruz nos lo recuerda, los monjes lo cantan».
Aplauso de la Fundación Francisco Franco a Sanz Montes
La reacción por parte de la FNFF no ha tardado en llegar, dedicando un aplauso público a la postura del arzobispo. Tras la publicación de la primera carta, la FNFF difundió una carta que comienza de la siguiente manera: «Como era de esperar, ha tenido que ser el siempre valiente arzobispo de Oviedo, monseñor Jesús Sanz Montes, quien alce su voz en defensa del Valle de los Caídos, reivindicando su verdadero sentido como espacio de reconciliación, oración y memoria fraterna». Un texto en el que también expresan su apoyo a la comunidad religiosa que vive en el recinto: «La comunidad benedictina en ese lugar eleva su plegaria para pedir ese don que Dios sólo concede».
En la parte final de su escrito, la fundación remata de nuevo agradeciendo a Sanz Montes «no rehuir de polémicas» y estar «lejos de alimentar confrontaciones» con un «discurso claro y sin ambigüedades»: «En un tiempo de mudos consensos y silencios calculados, su palabra se erige, como la cruz del Valle, alta y visible, como signo de reconciliación y esperanza para una sociedad que no puede construirse sobre el olvido ni el resentimiento. Monseñor Jesús Sanz siempre al pie del cañón».