Blunderbusses, el dúo asturiano que mantiene vivo el vinilo en la música techno: «No tengo sitio en casa para tantos discos»

Sergio Muñoz Solís
Sergio M. Solís REDACCIÓN

ASTURIAS

El dúo asturiano Blunderbusses
El dúo asturiano Blunderbusses

Tras varias décadas de trayectoria individual, Marcos Ferrero y Sergio Rodríguez estrenan su nuevo sello conjunto con el que prometen ofrecer un show con «variedad de estilos y sonidos»

10 mar 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Más de tres décadas de pasión por la música y por el coleccionismo de vinilos. La vida de Marcos Ferrero y Sergio Rodríguez no se entiende sin el techno y un set de DJ. Ahora, tras muchos años de actuaciones amateur por los principales eventos y salas de fiesta de Asturias de música electrónica, estos dos amigos presentan su proyecto conjunto. Blunderbusses, el nombre artístico del dúo, se caracteriza por la «fusión de estilos» propios de sus integrantes y la particularidad de pinchar con vinilos. 

Ambos amigos comenzaron a interesarse por el coleccionismo de discos desde muy temprana edad. «Era pequeño y ya me gustaban los grupos españoles de funk de los 80, como Aviador Dro», cuenta Rodríguez. El más veterano de Blunderbusses recuerda perfectamente cuál fue el primer vinilo de su extensa colección y la sorprendente manera en que llegó a sus manos: «Fui al rastro de Gijón con mis padres y estaba sonando en uno de los puestos un disco de James Brown. Yo me quedé flipando con su sonido y me lo compraron a ciegas. Ahí empezó esta pasión», narra. Por su parte, Ferrero sintió el gusanillo de la música por su hermano, quien tenía una banda de metal. «A los 16 años, cuando empecé a salir, fue cuando me empecé a fijar más en el techno y la electrónica», relata, si bien reconoce que siempre le llamaron la atención los DJs que pinchaban con vinilos: «A partir de ese momento tuve claro que quería aprender. Al principio, aprendí a pinchar con una mesa y dos Walkman», sostiene. 

En la actualidad, Rodríguez cuenta con un archivo de «unos 40.000 vinilos», que fue creciendo gracias a mercadillos de segunda mano y tiendas especializadas, muy populares durante la década de los 90. Años más tarde, internet facilitaría más las cosas. «No tengo sitio en casa para tantos discos. Tengo un trastero lleno en casa de mi padre y dos habitaciones enteras en la mía. Duermo entre vinilos. Alrededor de la cama no tengo sitio ni para la ropa», manifiesta. 

«El tema de los discos es algo que engancha», subraya Ferrero, quien rememora sus desplazamientos en bus desde Pravia a Oviedo para poder comprar discos en las tiendas de música de la capital del Principado. «Con 60 euros, comprabas cinco o seis discos. Recuerdo que los pinchaba 500 veces hasta poder cuadrar un par de temas. Luego salías de fiesta y cada vez ibas conociendo más artistas y estilos. Te atrapa. La música te evade de cualquier problema», comenta. 

Los caminos de estos dos amigos no tardarían en cruzarse al compartir la afición por la música electrónica. Un conocido en común ofreció a Ferrero, el más joven de los integrantes de Blunderbusses, una fecha para pinchar en el antiguo bar Memphis de Gijón, donde Rodríguez era ya uno de los artistas habituales. «Después, a través de un grupo de Facebook de Alex Ohmios fuimos ganando más relación», explica Ferrero. «Veíamos los discos que compraba el otro y descubrimos que teníamos gustos parecidos», añade Rodríguez. 

Tras varias décadas de trayectoria individual por separado de ambos integrantes, que los han llevado a actuar en fiestas por toda Asturias e incluso ser DJs residentes en algunos de los bares y discotecas más populares de los últimos años, ahora han decidido fusionar sus estilos. Como no podía ser de otro modo, lo harán manteniendo la esencia de pinchar con vinilos. «Es una unión difícil. Tenemos que ver cómo encajamos los discos y las mezclas para cohesionar las sesiones», señala Rodríguez, quien posee dos sellos discográficos (XT FUNK2 y Metrojackbeat) y también forma parte del colectivo Party Massacre. «Yo siempre había tenido la idea de formar un grupo con alguien. Ahora ha llegado el momento», precisa, por su parte, Marcos Ferrero. 

El dúo pronto comenzará a ofrecer sus primeras sesiones y tienen previsto grabar una de ellas desde la estación NC248 Radio, de LABoral Centro de Arte, que estará disponible en redes sociales. Ambos miembros de Blunderbusses prometen un show «muy puro y muy distinto», con «variedad de estilos y sonidos» y cierta improvisación. 

Finalmente, ambos integrantes del grupo agradecen a sus entornos el apoyo y el camino recorrido para dar a conocer este estilo musical en Asturias y expresan su recuerdo y cariño a otros nombres propios de la música electrónica en la región, como el recientemente fallecido Eloy Malnero: «Mucha gente ha hecho las cosas muy bien para que el techno haya llegado a su popularidad actual», sentencia Rodríguez.