Las actitudes «racistas y xenófobas» de un grupo de alumnos hacia otros estudiantes y docentes en el campus de Mieres
ASTURIAS
El rector de la Universidad de Oviedo asegura que ya se ha abierto un procedimiento disciplinario para investigar unos comportamientos que califica de «intolerables e inaceptables» que podrían conllevar la expulsión de los autores de la institución
28 ene 2025 . Actualizado a las 18:22 h.La Escuela Universitaria Politécnica de Mieres se está viendo sacudida de un tiempo a esta parte por un creciente clima de intolerancia que nunca antes se había dado en las aulas y pasillos del campus de Barredo. Según ha trasladado la propia dirección de la Escuela en un comunicado a la comunidad universitaria, en las últimas semanas habrían recibido informaciones de «actitudes racistas y xenófobas» que un grupo de alumnos habría mantenido hacia otros estudiantes y docente, hechos que el rector de la Universidad de Oviedo, Ignacio Villaverde, ha calificado en las últimas horas de «intolerables e inaceptables» en la institución y por los que ya se ha abierto una investigación interna.
Las alarmas saltaban en el seno de la comunidad universitaria del campus de Barredo el pasado viernes cuando el director de la Escuela Politécnica, Ángel Martín, hacía una comunicación de urgencia para trasladar que en las últimas semanas habían recibido informaciones sobre conductas sucedidas en el centro que estarían vulnerando las normas de convivencia universitaria, con hechos que, según explica el mismo, «atentan contra los derechos fundamentales de las personas y su libertad». En concreto, Martín indica en el escrito que «un grupo de estudiantes habría mantenido actitudes racistas, xenófobas e intolerantes hacia parte del estudiantado y del profesorado», hechos que, especifica, «habrían ocurrido durante el desarrollo de la actividad académica dentro de la escuela, pero también fuera».
Esta situación que, «de confirmarse», para el director de la Escuela Universitaria Politécnica de Mieres es «inaceptable y de la máxima gravedad», ya ha sido puesta en conocimiento de los órganos universitarios correspondientes por parte del mismo, incluyendo a la Comisión de Convivencia, para que, de considerarlo, se tomen «las medidas disciplinarias oportunas». En la misma comunicación, Ángel Martín pedía, además, la colaboración de la comunidad universitaria «para denunciar estos u otros hechos similares que atenten contra los derechos de las personas y la convivencia universitaria».
«Y lo más importante, queremos trasladar nuestro apoyo incondicional a cualquier persona, del colectivo de estudiantes, del profesorado o del PTGAS, que pudiera haber sido, o sea víctima de una situación de acoso o haya visto vulnerados de alguna forma sus derechos», manifestaba el director de la Escuela Politécnica de Mieres, que ofrecía el «apoyo y ayuda» de la dirección «en todo cuanto esté en nuestras manos».
Respaldo del equipo rectoral al campus de Mieres
El rector de la Universidad de Oviedo, Ignacio Villaverde, ha reconocido, por su parte, la «rápida y contundente reacción» del equipo directivo del campus de Mieres ante unos comportamientos que, ha dicho, «son absolutamente intolerables e inaceptables dentro y fuera del ambiente universitario». Es por ello que, aunque en sus declaraciones ante los medios de comunicación no ha querido entrar en detalles porque «esto ya está sujeto a la apertura de un expediente disciplinario», el mismo ha trasladado a la dirección de la Escuela Politécnica y al resto de la comunidad universitaria «todo el respaldo del equipo rectoral y del resto de la Universidad de Oviedo».
Villaverde confirmaba, por tanto, que ya se ha iniciado un «procedimiento administrativo disciplinario» en el cual las actitudes «racistas y xenófobas» puestas en conocimiento por la Escuela Politécnica de Mieres están siendo objeto de investigación por parte de las autoridades administrativas universitarias, aunque el mismo realizaba estas declaraciones reiterando su intención de «mantener un silencio institucional» y ser prudente sobre los detalles en el proceso de investigación.
Lo que sí ha explicado el rector de la Universidad de Oviedo es que tras la derogación «del viejo decreto de disciplina de los años 50», un decreto que justamente prohibía regular situaciones como la que ahora se investiga, y el cambio de la normativa sobre convivencia universitaria, comportamientos «intolerables» como los que ahora se investigan podría tener como sanción más grave «la expulsión de la Universidad en la que se cursan los estudios», ha señalado Ignacio Villaverde que, no obstante, ha aclarado que, en este caso, «eso depende de la calificación administrativa que reciba el comportamiento».