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El anuncio de IU de aprobar «nuevos gravámenes a la riqueza» crea un terremoto de reacciones que se zanja con las palabras de Barbón en las que asegura que no se crearán nuevos tributos. «Se trata de profundizar en la vía fiscal asturiana», subraya el presidente del Principado
24 ene 2025 . Actualizado a las 05:00 h.IU —socio del PSOE en el Gobierno del Principado — abrió el melón el pasado miércoles y, aunque en un principio la noticia no hizo mucho ruido, con el paso de las horas ha ido cobrando repercusión hasta causar un gran estruendo. La fiscalidad asturiana vuelve a situarse en primera línea del debate político y todos los agentes implicados están fijando posiciones. Estas son de sobra conocidas porque son las mismas que llevan años defendiendo cada de las partes implicadas, pero ponen sobre la mesa un viejo debate. ¿Hay que subir o bajar los impuestos? El ala más a la izquierda del Ejecutivo quiere más, la oposición y los empresarios están dispuestos a plantar batalla y el equipo de Adrián Barbón vuelve a defender su «vía fiscal asturiana». Esta es la secuencia de una polémica que seguirá dando que hablar en los próximos días.
Todo empezó el miércoles, cuando Xabel Vegas, portavoz de IU-Convocatoria por Asturias, defendió que la comunidad cuente con una vía fiscal «más potente», que no contemple únicamente la aplicación de deducciones sino que incluya «nuevos gravámenes a la riqueza». Y no se quedó ahí, ya que aseguró que su grupo y el PSOE registrarán próximamente una proposición no de ley para avanzar en un sistema fiscal «más justo y progresivo». Vegas defendió que la fiscalidad no se puede reducir únicamente a deducciones que afectan a clases medias pero «a veces no llegan a quienes más lo necesitan».

Las reacciones no llegaron de forma inmediata, pero al final todos los agentes implicados salieron a dar su opinión. El presidente del Principado, Adrián Barbón, explicó la postura de su Ejecutivo y precisó sus intenciones. Barbón apostó por «profundizar» en la denominada vía fiscal asturiana para introducir deducciones para las clases medias y trabajadoras, y dejó claro que «no se trata de crear nuevos impuestos».
El líder del Gobierno autonómico también subrayó que «no hay ningún acuerdo al respecto» sino «un diálogo franco, sereno y sincero» entre los dos partidos que sustentan al Gobierno. Según aseveró, el objetivo de dar «alivios» fiscales «a quien más lo necesita» y que, «a cambio», quienes tengan mejores salarios paguen «un poco más».
«Lo que hay es un diálogo franco, sereno y sincero entre los dos proyectos que apoyan al Gobierno para tener una vía fiscal justa porque sabemos que la justicia fiscal es el camino de la justicia social», apostilló el presidente.
Queipo, «asombrado»
Álvaro Queipo salió al paso y reiteró la ya conocida postura del PP en materia fiscal. El líder de los populares en Asturias criticó que el PSOE e IU quieran «subir aún más los impuestos y endurecer la gran mentira de la vía fiscal asturiana, ese gran error del que no solo no son capaces de salir, sino que se entierran un poco más».
Sobre esta cuestión, reivindicó la propuesta fiscal de los populares asturianos, con la rebaja de varios impuestos, que sea sostenible para las arcas públicas del Principado. «Estoy asombrado con lo que plantea IU de subir más los impuestos, pero más asombrado aún con que el PSOE se deje arrastrar por su socio. IU está en el Caribe y Barbón sigue en Babia, y entre unos y otros Asturias cada vez está peor y los asturianos nunca ganan», alertó.
La patronal pide «seriedad»
La posible subida de impuestos ha puesto en alerta a los empresarios y FADE hizo un llamamiento al gobierno regional para que hagan un planteamiento «completo, serio y comparativo» en materia de impuestos y no avancen hacia un incremento de la fiscalidad que termine por lastrar la actividad económica y la recaudación.
Para la FADE, los planteamientos fiscales no deberían estar centrados en debates ideológicos, sino en realidades objetivas por lo que el Gobierno debería tener en cuenta que Asturias es ya una comunidad autónoma «que tiene claras desventajas fiscales respecto al resto de las españolas».
Aumentar la presión fiscal supondría ir en «dirección contraria» a la senda que debería seguir la comunidad, ha señalado la patronal, para quien subir aún más los impuestos «mermará la actividad económica y terminará lastrando también la recaudación por el efecto salida o no llegada de nuevas empresas».
Condicionará además las decisiones de residencia de gran número de profesionales y supondrá «agrandar la injusticia que sufren la gran mayoría de contribuyentes asturianos en la actualidad, que, en igualdad de condiciones de renta, ven crecer su brecha fiscal respecto a otras regiones, señaló la patronal. En opinión de los empresarios, gravar aún más la vivienda no solo no conseguirá resolver el problema existente en la actualidad, sino que lo acrecentará, ya que se frenará la inversión, con lo que seguirá disminuyendo la oferta y aumentando el precio del alquiler.
En cuanto a las grandes superficies, mantiene que, aunque debe modificarse su tributación, y se deben tener en cuenta aspectos medioambientales, estos cambios no deberían traducirse en un aumento de su tributación que «ya es más elevada que en otros territorios».
Antes, había sido la Cámara de Comercio de Oviedo la que pidió al presidente del Principado que «mantenga su compromiso de no subir impuestos». La institución advirtió de que «el desarrollo económico de Asturias no puede ser rehén de decisiones erráticas» y que la comunidad «necesita soluciones inteligentes, no giros ideológicos que hipotequen» su futuro.
Una vez conocida la respuesta pública del Ejecutivo autonómico al planteamiento inicial de IU, la Cámara de Comercio de Oviedo aseguró que «recibimos con moderada tranquilidad la llamada del consejero de Hacienda del Principado, quien nos ha asegurado personalmente que no habrá una subida de impuestos y que las actuaciones del Gobierno se limitarán estrictamente a lo recogido en el programa electoral con el que el Partido Socialista concurrió a las elecciones autonómicas».
Los empresarios celebraron que «esta comunicación llega como una reacción rápida y necesaria ante la confusión y la alarma generadas en el seno de la Junta General del Principado de Asturias». «Valoramos que el Gobierno haya dado un giro comunicativo claro, ofreciendo garantías en sentido diametralmente opuesto a lo que inicialmente se percibió y que resultaba incompatible con las declaraciones públicas previas del presidente Adrián Barbón, quien siempre ha asegurado taxativamente que no se iban a subir impuestos», concluyen los empresarios.