El «récord» de 61 licitaciones desiertas que preocupa a la construcción asturiana
ASTURIAS
Hasta el mes de noviembre, en el Principado se licitaron 61 actuaciones por 31,7 millones, que quedaron desiertas. Tras la administración regional, los ayuntamientos de Oviedo, Aller y Corvera fueron los que sacaron a concurso más proyectos que, finalmente, no se materializaron. La patronal pone el foco en los precios de partida como causa de este problema
24 dic 2024 . Actualizado a las 11:35 h.Junto con el de los trámites burocráticos y la falta de mano de obra cualificada, uno de los grandes (y recurrentes) caballos de batalla del sector asturiano de la construcción tiene que ver con el, desde el punto de vista del sector, muy elevado número de licitaciones que quedan desiertas en la región. Fundamentalmente, desde el segmento del 'ladrillo' consideran que hay que mejorar los pliegos y los precios de los proyectos para evitar una situación que, lamentan, se reproduce año tras año.
De acuerdo con el último informe de licitación de la patronal asturiana, el apartado de obras desiertas «merece un capítulo especial», al marcar «un récord». CAC-Asprocon alerta de que, «por primera vez», en el mes de noviembre se superan las sesenta actuaciones que se han ido 'al limbo'. En esta línea, de seguir la tónica de las últimas semanas, a final del ejercicio este ámbito de actividad se puede encontrar «ante uno de los peores resultados de la historia en todas sus vertientes», tanto en lo que respecta a número de obras como al presupuesto de las mismas.
61 actuaciones desiertas por 31,7 millones
En concreto, de acuerdo con las cifras de la asociación, en lo que va de 2024 han quedado desiertas 61 actuaciones por un valor total de 31,74 millones de euros. 51 fueron en el conjunto de 2023, por 296,33 millones de euros; 68 en 2022, por 21,67 millones de euros; 73 en 2021, por 105,01 millones de euros y 24 en 2020, por 64,68 millones de euros.
El primer puesto entre estas licitaciones desiertas en cuanto a cuantía económica le corresponde a las obras de ampliación del Centro de Empresas TIC en El Entrego, con Sekuens como organismo licitador, y un presupuesto de licitación de 8.439.695,59 euros. A continuación está la obra de rehabilitación y mejora de la envolvente térmica de la residencia Mixta de Gijón (ERA), con un presupuesto de licitación de 4.926.683,30 euros.
Luego se sitúa la reforma y ampliación de las instalaciones deportivas de las piscinas municipales descubiertas de San Lázaro (con el Ayuntamiento de Oviedo como organismo licitador), con 964.417,25 euros de presupuesto. En quinto lugar se sitúa la obra de recuperación de la pasarela Cabañaquinta-Espineo-Soto (Ayuntamiento de Aller), con un presupuesto de licitación de 540.091,31 euros.
Administración autonómica y local
La Administración Autónoma del Principado de Asturias ha licitado hasta la fecha en el ejercicio 2024 un total de 644 actuaciones por un presupuesto total de 230,55 millones de euros, lo que supone un incremento interanual del 90,58%, en euros constantes.
En este apartado y en lo que respecta a obras desiertas, hubo diecisiete, por un presupuesto total de 23,21 millones. Después, y de acuerdo con las cifras que maneja CAC-Asprocon, la administración, local en este caso, que ha licitado más obras que finalmente han quedado desiertas es el Ayuntamiento de Oviedo, con seis. A continuación se sitúan los de Aller y Corvera, ambos con cuatro.
Precisamente, el presidente de CAC-Asprocon, Joel García, reclamaba durante la última asamblea de la patronal asturiana celebrada el martes 17 de diciembre, que uno de los objetivos fundamentales para el sector pasa por «mejorar el tema de pliegos, precios y revisión de precios anuales».
A su juicio, no hay duda de que, «sin duda, es un tema de precio» el hecho de que tantas licitaciones queden desiertas en el Principado. García cree que «hay que ser serios a la hora de licitar la obra y sacarla al precio que vale». El presidente de la patronal regional de la construcción considera que «todo el mundo sabe» que los precios «han subido» y, por tanto, «es fácil poner un precio a la obra de modo que no te quede desierta».