El Chosco de Tineo: un manjar único, natural y lleno de historia
Agustín Menéndez, presidente de la IGP Chosco de Tineo, destaca especialmente sus cualidades nutricionales en las dietas de deportistas
En el corazón de Asturias, el Chosco de Tineo se alza como un embutido único que combina tradición, sabor y versatilidad. Este manjar, protegido bajo la Indicación Geográfica Protegida (IGP) desde noviembre de 2007, se elabora exclusivamente con cabecero de lomo y lengua de cerdo, aliñados con sal, pimentón y ajo, y embutidos en el ciego, una parte del intestino del cerdo. Según Agustín Menéndez, presidente de la IGP Chosco de Tineo, este embutido se cocina y se comercializa listo para consumir, siendo un producto que destaca por su carácter artesanal y su increíble versatilidad en la cocina gracias en parte a que está elaborada con la parte magra de la carne.
Un producto lleno de historia y tradición
En cuanto a su origen, una teoría sugiere que los vaqueiros de la región reservaban esta delicadeza como un manjar especial tras la matanza, según registros históricos del Monasterio de Corias.
El Chosco de Tineo, a menudo comparado superficialmente con el botillo, no tiene mucho en común con este último más allá de su aspecto exterior. «Mientras el chosco utiliza cabecero de lomo y lengua, el botillo incluye huesos, lo que lo hace más difícil de digerir», explica Menéndez, marcando así la clara diferencia entre ambos.
Un embutido apto para todos los paladares y ocasiones
No es de extrañar que el Chosco de Tineo sea cada vez más demandado, especialmente en verano, cuando la producción se duplica, o en Navidad, siendo un producto estrella en las cestas. Su atractivo radica no solo en su sabor, sino también en sus propiedades nutricionales. En el festival anual de exaltación del Chosco, celebrado cada 1 de noviembre en Tineo, expertos en nutrición y deportistas han destacado su alto contenido proteico, lo que lo convierte en un alimento perfecto para dietas deportivas y equilibradas.
La versatilidad del Chosco es otra de sus grandes bazas. Desde los cachelos tradicionales con aceite y pimentón hasta propuestas más innovadoras como pizzas, ensaladas o fabadas, este embutido ha encontrado su lugar en cocinas de todo tipo. No obstante, Menéndez destaca la necesidad de adaptarse a los nuevos hábitos de consumo y anuncia que trabajan en modificar el pliego de la IGP para permitir su venta en formatos más pequeños. «Muchas familias son menos numerosas y buscan opciones más prácticas. Queremos facilitarles el disfrute de nuestro producto», señala.
Una de las dudas frecuentes sobre el chosco es cómo conservarlo tras abrirlo. Menéndez recomienda dividirlo en dos mitades y congelar una de ellas, aunque advierte que no debe permanecer en el congelador demasiado tiempo para evitar la pérdida de propiedades.
Receta: Pizza de Chosco
Si buscas una forma innovadora de degustar este manjar, la pizza de Chosco es una opción ideal. Para prepararla, extiende una base de masa de pizza y cúbrela con una mezcla de queso rallado y tomate. Añade lonchas finas de Chosco de Tineo y espolvorea más queso al gusto. Hornea hasta que la base esté crujiente y el queso derretido. El resultado es una combinación única de sabores que resalta la calidad del Chosco de Tineo en cada bocado.
Este embutido asturiano sigue conquistando paladares y ganando terreno en la gastronomía nacional e internacional. Con su rica historia, sus múltiples aplicaciones y su carácter inigualable, el Chosco de Tineo no es solo un alimento: es un símbolo de tradición, sabor y excelencia culinaria.